Análisis de Naruto Shippuden: Legends: Akatsuki Rising (PSP)
El joven y popular aprendiz de ninja Naruto vuelve a nuestras portátiles, tras más de un año sin aparecer por estos lares dentro del catálogo de PSP. La verdad es que el tiempo se ha dejado notar tanto en el protagonista como en sus compañeros de aventuras, sobre todo en sus compañeros estudiantes de la Villa Oculta de la Hoja, ya que la serie Shippuden del conocido manga no hace otra cosa que presentarnos unos personajes más maduros, ya dentro de la adolescencia tardía. De esta manera, mientras sus profesores se mantienen más igual que en la primera parte de la serie, tanto Naruto como Sakura como cualquiera de sus colegas ninja han pegado un cambio considerable (el propio de la adolescencia y el volverse mayor, vamos).
Celebrando este nuevo paso hacia la madurez de Naruto, Namco Bandai ha decidido dejar a un lado los cánones sobre los que regía últimamente todos los juegos basados en el joven héroe, basados, fundamentalmente, en los combates de un jugador contra otro (o contra la máquina, dado el caso). En esta ocasión, nos encontramos con una aventura en tres dimensiones, un clásico "yo contra el barrio", en la que deberemos, sin más, abofetear y patear a todo enemigo que se nos ponga por delante. Eso sí, contaremos también con peleas de gran envergadura, contra los personajes aliados o enemigos correspondientes, aparte de otras opciones de juego que dotan al mismo de una profundidad nada despreciable. Pero, aún así, a pesar de la gran multiplicidad de opciones, y de algunas características próximas al género de rol (detalles bastante nimios, por otro lado), no deja de ser un juego reiterativo en su concepto a más no poder.
Los de siempre, un poco más mayores...
Para la ocasión, contaremos con un argumento basado al dedillo en la temporada del manga (o del anime, que van a la par) en la que hace aparición el grupo de los Akatsuki, un grupo de malvados ninjas cuyas intenciones, en principio, no acaban de estar muy claras. Los asiduos seguidores de la serie de animación ya conocen esta parte de la misma, pero por respeto a los que no hayan oído hablar nunca de ella, evitaremos desvelar ningún detalle más del argumento. La cuestión es que este grupo de malvados ninjas asalta, sin más, la Villa Oculta de la Arena, en la que reside uno de los mayores rivales de nuestro joven héroe: Gaara.
De esta manera, sobre un trasfondo basado íntegramente en la serie, el juego desarrolla una aventura en la que podremos elegir a dieciocho personajes distintos de la misma (según vayamos superando los diferentes niveles del juego y desbloqueándolos, claro). En cada nivel, contaremos con la posibilidad de elegir a un personaje principal y dos de apoyo, que en los momentos más comprometidos nos prestarán su ayuda, en caso de que la necesitemos. Cada nivel responde a un tipo de escenario, aunque éstos, ciertamente, no son nada del otro mundo a nivel de diseño y acaban siendo bastante similares entre sí, los cuales deberemos de recorrer de una punta a otra (todo componente de exploración es prácticamente nulo, a no ser por los pequeños recovecos en los que encontraremos algunos cofres repletos de ítems y tesoros), destruyendo a todo enemigo que se interponga entre nosotros y la salida del nivel.
Destruir a los diferentes enemigos (diferentes es un concepto quizás no aplicable en esta ocasión en concreto, dado que los tipos de enemigos se repiten hasta la saciedad) que nos encontremos no resultará muy complicado, al menos en el caso de los enemigos más comunes. Con tres o cuatro golpes nos desharemos con facilidad de ellos, aunque en los momentos en los que se junten varios de ellos para golpearnos en conjuntos podemos vernos en problemas. El maneja de nuestro personaje será sencillo: un botón para golpear, otro para esquivar los golpes y evadirnos de manera instantánea, otro para saltar y uno para las armas arrojadizas.
¡Poder ninja!
Por otra parte, los botones laterales de nuestra consola nos permitirán bloquear nuestra visión en un enemigo en concreto (cosa que mejora considerablemente nuestra precisión y facilita la jugabilidad, dado que los mapas que veremos en la parte inferior izquierda de la pantalla no son de gran ayuda a la hora de localizar los diferentes enemigos, dada su extrema simplicidad), así como desplegar el menú de técnicas especiales, las cuales podremos asignar a gusto a cada uno de los botones frontales de nuestra consola, en caso de haber recogido los rollos de pergamino correspondientes.
Estos rollos de pergamino mejorarán nuestras cualidades y atributos en la batalla. Por otra parte, nuestro personaje irá subiendo de nivel y mejorando dichos atributos a medida que se embarque en más y más batallas. Lo mejor del tema es que no sólo podremos mejorar el nivel de nuestro personaje en el modo principal de juego, sino que contaremos con una serie de modos alternativos desbloqueables (el modo misión y el modo supervivencia, por ejemplo) en los cuales podremos mejorar el nivel de nuestro personaje embarcándonos en más batallas, así como conseguir diferentes objetos e ítems, como rollos de pergamino o nuevas armas, y, por supuesto, un incremento considerable de nuestra capacidad adquisitiva. Nuestras ganancias durante la partida nos servirán para mejorar nuestro equipamiento en la tienda del juego, inserta dentro del menú principal del mismo
Del abofeteo general a algo más personal...
En determinados momentos de la aventura, generalmente al final de cada nivel, nos embarcaremos en batallas de uno contra uno, enfrentándonos tanto a diferentes compañeros estudiantes de la Villa de la Hoja y alrededores como contra los malvados integrantes de la sociedad Akatsuki. Estos enfrentamientos se parecerán mucho más a los que viéramos en previas entregas de los videojuegos de Naruto, y son una excusa perfecta para que el título que nos ocupa presente un modo versus en el que podremos enfrentarnos contra los diferentes adversarios que ya hayamos desbloqueado, en los escenarios por los que hayamos pasado con anterioridad. Todo ello, claro está, pudiendo combatir contra un personaje controlado por la máquina o por otro jugador de PSP, gracias a la interconexión entre consolas por vía local.
Apartado técnico
El apartado gráfico del juego despliega unos entornos y personajes en tres dimensiones, muy dentro del estilo del anime original, en los que podremos reconocer perfectamente a nuestros personajes favoritos de la serie. Eso sí, cabe reconocer que, a nivel de texturas, el juego anda un tanto flojo, y el catálogo de animaciones con las que cuentan los personajes del juego (sobre todo los enemigos contra los que nos enfrentaremos) es escaso y, en ocasiones, algo tosco. Por otra parte, los escenarios están prácticamente vacíos de contenido, lo que hace que sean muy similares entre sí. No han sido diseñados para que podamos disfrutar de la vista, sin duda. Contaremos también con un buen puñado de escenas cinemáticas, las cuales nos relatarán punto por punto los sucesos descritos por el manga y el anime originales, para que podamos situarnos temporalmente dentro de la acción del juego sin ningún tipo de problemas.
El apartado sonoro, por su parte, contiene una serie de temas musicales bastante repetitivos que, por suerte, pasan bastante desapercibidos gracias a la discreta instrumentación con la que han sido realizados. Acompañan bien a la acción del juego, sí, pero la verdad es que suenan todos bastante similares y pueden llegar a hacerse un tanto pesados. El juego, por otra parte, nos dará la opción de escuchar las voces de los personajes en inglés o japonés, y cuenta con una buena tirada de diálogos en las diferentes escenas cinemáticas, así como una serie de voces y exclamaciones digitalizadas bastante completa.
La jugabilidad del título es extremadamente sencilla, como es de costumbre en los videojuegos de Naruto. Cada botón tendrá asignada una acción muy determinada, y no deberemos de realizar complicadas combinaciones de botones para desatar toda nuestra furia ninja, ni para realizar los movimientos especiales. Por otra parte, se echa de menos más variedad en los golpes y acciones de nuestros protagonistas, aunque bien cierto es que la gran cantidad de técnicas que tenemos a nuestra disposición, así como el amplio abanico de armas con el que contaremos, le da cierto toque de variedad al juego. Donde sí resalta el mismo, realmente, es en la gran cantidad de modos de juego desbloqueables con los que nos encontraremos, los cuales, ciertamente, alargarán la vida del título de forma exponencial, y nos ofrecerán una bocanada de aire fresco respecto a la acción continua de la aventura principal.
Conclusiones
La nueva aventura de Naruto es una propuesta diferente, un tanto alejada de los títulos de lucha a los que nos habíamos acostumbrado en la portátil de Sony, que sin duda se agradece. La gran multiplicidad de modos y opciones de juego es su punto fuerte, aunque un apartado técnico un tanto descuidado hace que no se convierta en un referente dentro de la saga. Por otra parte, la acción del juego es bastante repetitiva, por lo que los jugadores que no sean seguidores del anime o del manga originales no podrán disfrutarlo de la misma manera, ni con la misma intensidad. Un juego de acción y aventura del montón, aunque para la ocasión cuente con unos protagonistas de lujo.