Análisis de Amnesia: Collection (PS4, PC, Xbox One, Switch)
Cualquiera que haya seguido el género del terror en los últimos años sabrá que en 2010 hubo un antes y un después. Frictional Games, después de sorprendernos con Penumbra, lanzaron un juego llamado Amnesia: The Dark Descent que no sólo revolucionó el concepto de survival horror, sino que, si lo pensáis en frío, también revolucionó YouTube. De pronto, los sustos genuinos se convirtieron en cientos de miles de visitas, y de pronto la gente empezó a gritar en vídeo como si les fuese la vida en ello, aunque estuviesen jugando a Barbie: Race and Ride.
En cualquier caso, no cabe duda de que la saga Amnesia es una pieza viva de la historia de los videojuegos, y ahora los usuarios de PlayStation 4 pueden disfrutar de los tres juegos que lo componen en una única colección, que además llega a un precio bastante ajustado (29,99 euros. Así, por la mitad de lo que nos suele costar un juego, nos llevamos Amnesia: The Dark Descent, Amnesia: Justine y Amnesia: A Machine for Pigs.
Amnesia: The Dark Descent
Cualquier fan del terror psicológico que se precie debería jugar Amnesia: The Dark Descent. Pocos juegos han conseguido reflejar tan bien la confusión, la demencia y el estrés que supondría vivir una situación así. Sus mecánicas de luz y oscuridad, cómo nuestro protagonista empieza a ver cosas cuando las cosas se complican y el pánico que sufrimos estando indefensos es inexplicable.
Aunque cuando alguien lo hace ahora se nos antoja como la solución más sencilla para hacernos pasar miedo, en 2010 esta indefensión era de verdad algo nuevo, e incluso hoy en día pocos juegos han conseguido ejecutar esta fórmula con tanto éxito. Además, Amnesia: The Dark Descent sabe guardar muy bien sus cartas, y cuando las saca, echas a correr mientras rezas todo lo que sepas.
Sí es verdad que como juego independiente, de bajo presupuesto y con más de seis años a sus espaldas, ahora no tiene el mismo impacto que en su momento. Su desarrollo abierto a veces se hace confuso, y no sé si porque en nuestro caso ya nos las conocemos de haberlo jugado en su momento, las criaturas no nos dan tanto miedo. Al menos la experiencia sigue siendo muy buena, con una narrativa muy bien planteada, que te descoloca y te mantiene interesado a partes iguales.
Aunque quizás no ha envejecido tan bien como quisiéramos, hemos vuelto a disfrutar mucho con Amnesia: The Dark Descent, y sigue siendo nuestro favorito de esta particular trilogía. Además, a pesar de su veteranía, sigue guardándose varios trucos en la manga que muchos desarrolladores deberían aprender.
Amnesia: Justine
Amnesia: Justine no es lo que mucha gente espera. Dentro del survival horror esta especie de spin-off hace más hincapié en los puzles o pruebas, inspirándose (según sus creadores) en sagas cinematográficas como Saw o personalidades como Elisabeth Báthory, una aristócrata obsesionada con la belleza a la que se le vincula con 650 muertes, generalmente de sus sirvientas, de las que usaba su sangre porque pensaba que la mantenía joven.
Como juego es ciertamente interesante, aunque es bastante más breve que los otros dos de la colección y su propuesta también es diferente. De todos modos, hemos notado que, a pesar de que vamos a seguir pasando miedo (sobre todo por la muerte permanente, que nos mantiene bastante tensos), es algo que se agradece, ya que nos permite romper con lo visto en el original y "descansar" de sus mecánicas antes de sumergirnos en la tercera aventura. Un título igualmente recomendable, sobre todo si sabéis a lo que vais.
Amnesia: A Machine for Pigs
Como decíamos, esta saga es un tanto extraña, ya que todos los juegos tienen muchos puntos en común, pero son experiencias diferentes. Amnesia: A Machine for Pigs es un juego mucho más centrado en la narrativa, más guiado y menos "confuso" que el original. Si en Amnesia: The Dark Descent el objetivo principal era darnos un infarto y el secundario contarnos una historia, aquí se invierten los papeles.
Sí, da miedo y la ambientación es genial. De hecho, se agradece que sea más variada que en The Dark Descent, donde a veces se antojaba demasiado opresora. En esta falta de opresión también influye la escasez de enemigos y lo fáciles que son de evitar. Para que nadie se decepcione, es importante mencionar que en Amnesia: A Machine for Pigs nos vamos a llevar más de un susto, pero según progresamos la narrativa va ganando protagonismo, hasta casi hacerse por completo con el control del juego.
Por último, comentar que los tres juegos se han trasladado directamente de sus versiones de PC directamente a PS4, por lo que lucen igual de bien que lo hacían en su momento, y los tres a 1080p y 60 imágenes por segundo. Hemos analizado esta colección en PS4 Pro, pero Frictional Games asegura que no hay mejora para esta consola, por lo que deberían verse igual en la PS4 normal.
Una colección diferente
Esta colección es difícil de clasificar, ya que a diferencia de otras, los tres juegos incluidos aquí son diferentes entre sí. Podríamos clasificarlos como tres interpretaciones diferentes de una serie de mecánicas jugables. Puede que te encante Amnesia: The Dark Descent, pero que Amnesia: A Machine for Pigs te parezca el tedio hecho juego. Nosotros somos bastante flexibles y hemos disfrutado con los tres, pero es importante entender qué ofrece. En cualquier caso, si te gusta Amnesia sin importar sus variantes y quieres disfrutar la saga en PS4, Amnesia: Collection es para ti.
Hemos escrito este análisis con un código de descarga que nos ha proporcionado Evolve PR.