Análisis de ESPN NBA Basketball 2K4 (PS2, Xbox)

La última entrega de la saga 2K llega con las novedades suficientes como para ser un juego de baloncesto muy a tener en cuenta con respecto a sus rivales, ya que pese a mantener las bases sentadas en las versiones de años anteriores, incluye novedades e innovadores modos de juego que le hacen ser el mejor juego de la saga hasta el momento.

Jugablemente se asemeja mucho a lo ya visto en anteriores entregas de la serie, pero se han incluido jugosas novedades. Ahora es posible hacer amagos de pase pulsando ligeramente el botón correspondiente, o realizar pases medidos con una mayor facilidad. Pese a que estas novedades en el aspecto ofensivo puedan dar la impresión de que las defensas van a sufrir mucho, la realidad es todo lo contrario ya que para cada tipo de maniobra de ataque existe alguna maniobra de defensa que pueda contrarrestarla. Esto lo sufriremos en nuestras propias carnes ya que estas maniobras defensivas serán recurrentemente utilizadas por la CPU.

Por poner un ejemplo, realizar driblings es realmente complicado ya que la mayor parte de las veces que intentemos hacerlos veremos como el jugador contrario consigue bloquearnos, algo ilógico teniendo en cuenta que en el juego real no todos los jugadores son buenos en todos los aspectos. Otra de las cosas que han cambiado son los tiros libres, siendo ahora mucho más complejos que en otros juegos de baloncesto en los que encestar se convierte en un mero trámite. Quizás habría sido un acierto rebajar la complejidad de los tiros libres pese a que éstos entraran más fácilmente para que resultaran algo más divertidos.

El juego se decanta por una vertiente más de simulador que de arcade. Esto se puede apreciar en las estadísticas de tiros y aciertos, que serán similares a la realidad y en ningún momento exageradas como en juegos del estilo de Nba Jam, aunque no todos los jugadores tienen perfectamente ajustadas sus habilidades con respecto a la realidad y podremos ver cómo malos tiradores en la vida real realizan buenos porcentajes anotadores.

Una de las grandes innovaciones en cuanto al control es el nuevo modo de manejo del balón denominado Isomotion, que viene a ser algo similar al modo Free Style visto en juegos de EA como Fifa. Con el modo Isomotion y usando el stick derecho podremos realizar ciertos movimientos nuevos que ayudan a darle más realismo al juego. Por ejemplo, si a la hora de realizar un tiro un jugador contrario nos está bloqueando, es posible hacer un pequeño amago hacia algún lado para desplazar ligeramente al rival y que nos deje un poco de libertad para tirar más cómodamente. Pese a que parezca que Isomotion solo sirve para atacar, la realidad es que también puede ser utilizado para realizar diversos movimientos defensivos. Este 2k4 es el primer juego de la serie en utilizar el modo Isomotion, y eso es algo que se nota ya que su control no es todo lo preciso que debería ser y deberá ser perfeccionado si se incluye en futuras entregas ya que aporta una mayor libertad de movimientos, aunque como su uso no es indispensable para el desarrollo del juego, no influye negativamente en el apartado jugable.

Otro de los alicientes del juego es su nueva modalidad denominada 24/7. En ella tendremos la posibilidad de crear jugadores de forma personalizada y desarrollarlos para crear un jugador a nuestra medida, pero esto no se hace mediante el habitual método de definir los atributos del jugador dentro de unos límites, sino que deberemos ir derrotando a diversos jugadores de la NBA en partidos de uno contra uno para ir ganando atributos y objetos. En un principio no son demasiados ni muy originales los atributos para definir a los jugadores, aunque entre ellos hay algunos interesantes como tatuajes, o tipo de peinado. Una vez definidos los rasgos del jugador, hay que entrenarlo en pequeños partidos de 21 puntos donde dependiendo del atributo que se quiera mejorar se deberán cumplir unos requisitos, como mantener un porcentaje de tiro decente para mejorar la puntería del jugador. Después de los entrenamientos es el momento en el que deberemos retar a otros jugadores, que se distribuyen en varias zonas a lo largo de los Estados Unidos, a diferentes tipos de duelos uno contra uno y una vez que se les derrote podrán ser usados como pareja para partidos de 2 contra 2.

Pero quizás el aspecto más innovador de este modo, y el que le da nombre, es que hace uso del reloj interno de la consola. De esta forma algunos rivales solo aparecerán por la noche, otros solo juegan en días festivos (según el calendario estadounidense), o puede ser que en un mismo lugar aparezcan varios rivales en días diferentes. El hecho de usar el reloj de la consola no solo afecta a este tipo de detalles, sino que también afecta a la forma física del jugador, de forma que si no lo entrenamos durante varios días puede llegar a perder facultades progresivamente y habrá que entrenarlo de nuevo. Todos los jugadores que creemos pueden ser utilizados tanto en los modos offline del juego, como en partidos online en Xbox Live.

En el apartado gráfico destacan mayoritariamente los aspectos positivos, siendo la falta de un buen antialiasing el mayor de los negativos. Los modelados de los jugadores son muy buenos y se asemejan enormemente a sus homónimos reales, no solo en el aspecto físico sino también en los detalles propios de cada jugador como peinados o incluso tatuajes. Quizás no se haya evolucionado demasiado respecto a NBA 2k3, pero sí lo suficiente como para que se aprecien las mejoras. Esto se puede ver por ejemplo en las animaciones, ya que aparte de que las predeterminadas para todos los jugadores son muy fluidas y están bien logradas, los jugadores más destacados de la NBA poseen animaciones propias con su estilo particular, con lo que no solo podremos distinguirlos por su atuendo sino también por sus movimientos. Los estadios y el público también cuentan con un modelado correcto, aunque obviamente poco detallado dado el número de espectadores a renderizar, y en ocasiones podremos ver a personas levantarse para animar o hacer fotos a los jugadores, aunque también se levantará toda la gente en masa cuando se consigan canastas.

Quizás el sonido es lo que menos destaca del juego, y más para los hispanohablantes, ya que todos los comentarios están en un perfecto inglés, aunque vienen dados de la mano de dos famosos comentaristas de los Estados Unidos: Tom Tolbert y Bill Fitzgerald. La calidad de los comentarios es mediocre debido a que rápidamente se vuelven repetitivos puesto que por ejemplo ante situaciones adversas para un equipo, se suelen emplear reiteradamente un mismo comentario predeterminado. Durante los partidos no hay música de fondo, pero la cantidad y calidad de los efectos de sonido que acompañan el desarrollo de los encuentros es elevada. De esta forma podemos escuchar el clásico sonido de las zapatillas sobre el suelo, comentarios entre los jugadores y los entrenadores o las habituales melodías creadas con un órgano que amenizan los partidos reales.

En los menús sonarán canciones de marcado estilo Hip-Hop, que si bien no pertenecen a ningún grupo puntero, no desentonan con respecto a la elevada media de calidad del juego. Pese a todo, para quien no le guste este estilo de música siempre queda la posibilidad de crear listas de reproducción personalizadas gracias a la posibilidad de almacenar nuestra propia música en la consola.

En definitiva, se puede decir que este ESPN BasketBall 2k4 ha mejorado muchos aspectos con respecto a lo visto en anteriores entregas, pero desgraciadamente algunos detalles, sobre todo jugables, han visto mermada su calidad, por lo que habrá que esperar un poco más para poder disfrutar de un juego de baloncesto perfecto.