Análisis de Pixel Heroes: Byte & Magic (PC)
Si algo han hecho los juegos independientes en los últimos años, es innovar y recuperar géneros y/o experiencias perdidas en el tiempo. El título que hoy nos ocupa es de los segundos, y viene a ofrecernos un juego de rol ambientado en las estéticas y mecánicas point & click de finales de los 80 y principios de los noventas. Como buen juego que quiere tener éxito recuperando una jugabilidad "desfasada", también tiene que introducir mecánicas actuales. Pero vamos demasiado rápido... os contamos todo con detalle.
Los hijos del alba
"¡Oiganme! ¡El fin está cerca! ¡Escuchen lo que digo y prepárense! ¡Un culto ha llegado a nuestras tierras! Se hacen llamar ‘Los hijos del alba’, y dirigen sus oraciones a un oscuro dios ancestral. Han comenzado a reclutar gente para su causa por todo el país.
Temo que que quieran intentar despertar algo que deberían dejar dormir. ¡Algo peligroso y siniestro! Algo que podría destruirnos a todos. Pasad vuestros últimos días sabiamente...".
Así comienza Pixel Heroes: Byte & Magic, un juego de rol roguelike que apuesta por combinar mecánicas tradicionales con algunas algo más novedosas, encontrando bastante bien el equilibrio. Básicamente, cuenta con una estructura dividida en tres partes que se entrelazan entre sí, y que podríamos dividir en "el pueblo", "el viaje" y "los combates", partes que detallaremos a continuación.
El pueblo y los héroes
El primer sitio que pisaremos será la posada del pueblo. En ella tendremos que elegir a tres de los héroes que en ella se encuentran. Al principio será una elección un poco trivial, basado en nuestra intuición y lógica más que en otra cosa, pero poco a poco nos iremos dando cuenta de la importancia que tendrán los héroes en el desarrollo del juego.
Cada uno de los héroes es diferente, y comenzaremos con ocho diferentes para elegir. Según avanzamos podremos llegar a desbloquear hasta treinta héroes, y, por mencionar algunos, tenemos el wolfrider, el bárbaro, la encantadora, el rōnin –un samurái sin amo–, el luchador, el pícaro, la guerrera, el aventurero, el mago guerrero, el herborista o el cazador. Y así hasta 30.
Estos héroes tienen su raza, su clase, su biografía, dos habilidades únicas para usar en el combate, y cinco estadísticas o atributos diferentes que podemos mejorar a nuestro antojo asignando los puntos que ganamos al subir de nivel. Las estadísticas mencionadas tienen diferentes usos. Por ejemplo, la vida y la salud afectarán al combate, pero la destreza nos servirá para abrir cofres y sortear trampas, algo de lo que hablaremos más adelante.
Aparte, cada personaje tiene cinco ranuras de equipo que podemos modificar con objetos que compremos o consigamos en la batalla. Éstos son dos armas o conjuros (o uno de cada), un objeto para el torso, un amuleto para el cuello y un casco o sombrero para la cabeza. En función del tipo puede ofrecernos movimientos nuevos, más ataque o defensa, o inmunidad contra algún posible estado, por ejemplo.
El pueblo nos servirá también de lugar de paso. En diferentes estancias podremos realizar diferentes actividades. En el templo podremos comprar opciones y revivir héroes que hayan podido caer en la batalla –ya que, cuidado, la muerte es permanente, e incluso tendremos un cementerio para ver los guerreros caídos–; en el herrero podremos comprar armas; en la biblioteca libros que mejoren nuestras estadísticas o nuevas magias, etcétera, etcétera. En el pueblo será también donde recibamos misiones, lo que nos lleva a nuestro siguiente punto: los viajes.
Los viajes
Para cumplir las misiones que se nos encargan tendremos que llegar a una mazmorra, no necesariamente representada como tal, pero sí como una serie de habitaciones rematadas por un jefe final. Durante el camino nos encontraremos con una serie de personajes, los cuales, habitualmente, nos harán una pregunta con tres respuestas posibles además de, muchas veces, la posibilidad de huir. En teoría hay una respuesta que nos permitirá conseguir botín fácilmente, otra que nos permitirá conseguirlo previo enfrentamiento, y otra que nos dejará con las manos vacías.
No hay una respuesta clara, así que tendremos que tirar de suerte. Para que os hagáis una idea, un personaje nos pregunta que si podemos vigilarla mientras, ahem, evacúa tras unos arbustos. Si amablemente aceptamos, nos veremos asaltados por unos enemigos mientras esperamos. La verdad es que es algo que le sienta bastante bien a la aventura, y que le da un componente original. Eso sí, el juego sólo está en inglés y en alemán, lo que puede ser una barrera para algunos.
Los combates
La parte más decisiva del juego es el combate. Sus mecánicas se basan en un enfrentamiento tradicional por turnos, aunque tiene un sistema de alcance similar al del rol por casillas, sólo que representadas sobre un único eje. Dicho de manera más sencilla, los combates se producirán, como máximo, en batallas de tres contra tres. Cada tipo de golpe tendrá un alcance, por lo que el que esté más alejado del grupo de enemigos, lo tendrá más difícil para hacerles daño, salvo que utilice armas de largo alcance o armas. Con los enemigos es exactamente lo mismo.
Esto tiene más profundidad de la que parece, ya que no sólo tenemos que pensar qué héroes elegir, sino en qué orden los ubicamos. Esto podemos hacerlo antes de cada batalla, pero no durante. Eso sí, si el que está más cerca de los enemigos o el del centro muere, el resto de los héroes se acercará una "casilla" a éstos, y viceversa. Nos disculpamos si no queda claro, pero os aseguramos que tras el primer combate habréis entendido esto.
Más complejo es el sistema de daños, los tipos de magia, los tipos de golpe, los tipos de enemigo... Aquí ofrece mucha más profundidad, y aunque nos iremos acostumbrando poco a poco, también tenemos una completa y explícita guía que nos explicará lo fundamental al respecto. Por último, el sistema de ataque es muy sencillo. Tenemos dos tipos de ataques (uno por cada arma, que mencionamos previamente), y dos habilidades. Los ataques pueden usarse cada turno, y pueden ser tanto ofensivos como defensivos; las habilidades requieren un tiempo de recuperación.
Otros aspectos
Pixel Heroes: Byte & Magic es un juego que no se toma en serio, y se apoya en el sentido del humor y muchas referencias a la cultura contemporánea. Algunas serán más fáciles de comprender, como encontrar a personajes llamados "Miyamoto y Sakaguchi" o ver a personajes gritar "Adventure time!" antes del combate; otras apuestan por juegos de palabras que, sin un nivel de inglés más elevado, pueden pasar desapercibidas.
Audiovisualmente, pues poco más podemos deciros que no veáis aquí. Es un juego muy, muy sencillo en lo gráfico –quizás demasiado–, pero al menos muy bien diseñado, con una interfaz clara, intuitiva y cómoda para jugar con ratón. Eso sí, sólo se mostrará en formato 4:3, apostando por "rellenar" la imagen con franjas grises si jugamos en 16:9 u otro aspecto. La música es correcta y acertada, también de corte retro, y si bien es cierto que ambienta, hay veces que puede llegar a hacerse muy machacona y llegar a cansar.
Comentar también que es un título pensado para ser rejugado. No será difícil que muramos bastante pronto en la aventura la primera vez que juguemos, pero tranquilos, ya que cada vez que empecemos habrá nuevas misiones esperándonos. A efectos prácticos, éstas varían bien poco más allá de la "excusa" para realizarlas, pero bueno. Por último, señalar que tiene tres niveles de dificultad. El primero viene desbloqueado por defecto, y los otros dos se desbloquearán al completar la historia en la dificultad anterior.
Sabor retro, aroma actual
Pixel Heroes: Byte & Magic es un juego que se asienta en mecánicas clásicas del rol, pero lo adereza con algunas características más actuales, además de humor y referencias a la cultura popular actual. Completar su aventura más básica no os llevará mucho (puede que un par de días, en función del tiempo que le dediquéis), pero si queréis exprimirlo puede dar mucho más de sí. En cualquier caso, Es divertido y adictivo, y si os gusta lo que habéis leído, probablemente no os arrepintáis de darle una oportunidad.