Análisis ENDER LILIES: Quietus of the Knights, la sorpresa indie del año (PC, PS4, Xbox One, Xbox Series X/S, Switch)

Corren buenos tiempos para ser fan de los metroidvania, un subgénero que ha proliferado en los últimos años gracias al sector indie y que no ha parado de darnos grandes alegrías con títulos de muchísima calidad. Sin embargo, cuando algo se pone tan de moda y el mercado se inunda de juegos similares, destacar resulta cada vez más difícil, por no hablar de lo complicado que se vuelve escarbar entre tantas propuestas para encontrar aquellas que realmente merecen la pena. Por eso, es completamente normal que, a veces, ciertas joyas se nos puedan pasar más o menos desapercibidas hasta el momento de su lanzamiento, tal y como nos ha ocurrido con Ender Lilies: Quietus of the Knights, un auténtico juegazo que ha llegado pisando fortísimo para convertirse, sin duda alguna, en la gran sorpresa indie del año y en el mejor representante de su género desde el magnífico Hollow Knight.

El Diluvio Mortal

Así pues, nos encontramos ante un soulsvania, es decir, un metroidvania con muchos toques de soulslike, en el que encarnaremos a Lily, una niña que despierta en un reino completamente devastado en el que la lluvia nunca cesa. A partir de aquí, nos tocará descubrir quiénes somos, qué ha pasado y cuál es nuestro papel en esta historia, unas preguntas que tendrán sus respuestas en los primeros compases de la aventura para dar pie a un viaje de los que no se olvidan.

La historia se nos narra, sobre todo, a base de textos opcionales, con las descripciones de las almas y reliquias que consigamos y a través de unas breves y bonitas secuencias de vídeo, por lo que el guion nunca entorpece y profundizar en él dependerá de las ganas que tengamos de saber más. Por supuesto, también hay muchísima narrativa ambiental, pero a diferencia de juegos como Dark Souls, aquí se nos cuenta todo de una forma bastante clara y nada críptica, de modo que no tendréis problemas para entender su precioso, interesante y trágico relato.

Un soulsvania sobresaliente

En lo que respecta a su jugabilidad, tenemos una aventura de acción, rol y plataformas 2D en la que deberemos explorar un gigantesco mapa que tiene todas sus zonas interconectadas. Por supuesto, para avanzar por él deberemos obtener nuevas habilidades que nos permitirán llegar a lugares previamente inaccesibles así que cuanto más juguemos, más se irá abriendo el mundo del juego y más importancia irá cobrando el backtracking.

Es precisamente aquí donde radica uno de los grandes puntos fuertes del título, ya que el diseño de niveles es sobresaliente y no hay nada que haya sido dejado al azar. Si por algo se caracteriza el mapa es por lo laberíntico y complejo que resulta: hay montones de salas, conexiones entre zonas, atajos, secretos muy bien escondidos, multitud de trampas y enemigos, palancas que activar y caminos que se abren de manera simultánea, por no hablar de lo mucho que nos tocará rompernos la cabeza para acceder a ciertos sitios. Es muy fácil perderse o atascarse por no saber muy bien a dónde ir, pero si algo os podemos asegurar es que la exploración es sumamente satisfactoria.

Otro aspecto que nos ha gustado mucho es su ritmo de progresión. A diferencia de otros metroidvania, aquí suele pasar bastante tiempo entre que adquirimos una habilidad y la siguiente, pero cada vez que nos hacemos con una se nos abren tantísimas áreas nuevas y atajos que se consigue que cada avance sea todo un acontecimiento en nuestro viaje.

Por su parte, la acción tampoco se queda atrás gracias a un sistema de combate flexible y muy interesante. Como hemos dicho antes, aquí encarnaremos a una niña pequeña que, a pesar de no ser especialmente ducha a la hora de pelear, puede invocar a los espíritus de antiguos héroes para que luchen por ella. De este modo, podremos equiparnos con dos sets de tres espíritus cada uno para así poder utilizar sus habilidades, como pegar espadazos, golpear con una contundente maza o lanzar hechizos a larga distancia. Estas técnicas las obtendremos derrotando minijefes y jefes, pudiendo adquirir hasta 26 distintas, cada una con sus propias peculiaridades y aplicaciones prácticas, lo que da pie a un sistema muy personalizable que nos permite desarrollar multitud de estrategias.

Eso sí, algunos espíritus tienen usos limitados y no se recargarán hasta que descansemos en un punto de guardado, lugares que sirven como equivalente a las hogueras de Dark Souls: recargan nuestras oraciones curativas, sanan nuestras heridas, nos permiten configurar nuestros sets de espíritus y mejorarlos con los recursos que hayamos obtenido, y también provocan que reaparezcan todos los enemigos que hayamos eliminado. Y sí, también podremos teletransportarnos entre ellos para viajar rápidamente por el mapa.

Como podréis intuir, los combates tienen un ritmo pausado y táctico, favoreciendo el que estudiemos bien a nuestros enemigos y sus patrones para combatirlos de la forma más eficiente posible. Esquivar es fundamental, así como realizar bloqueos y contraataques, aunque también es un juego que premia la ofensiva para reducir el medidor de resistencia de nuestros rivales y dejarlos aturdidos. De esta manera se ha conseguido alcanzar un equilibrio muy bueno entre ataque y defensa que le sienta de maravilla y que nos ha convencido bastante, especialmente cuando entran en escena los jefes para desafiarnos a unas batallas muy duras, largas y con varias fases que nos han encantado.

Hablando de dificultad, no podemos olvidarnos de comentar lo bien medida que está la progresión de la misma. Al principio nos encontraremos con un juego muy asequible y sencillo, pero a medida que pasen las horas notaremos cómo el nivel de reto va subiendo de forma lenta pero constante hasta llegar a un último tercio que nos ha hecho sudar sangre para poder ver su verdadero final, con enemigos capaces de quitarnos más de la mitad de la vida con tan solo rozarnos. Lo bueno es que el desafío se incrementa de forma paralela a nuestra habilidad con los mandos, así que nunca hemos tenido la impresión de sufrir picos injustos para los que el título no nos había preparado previamente.

En lo que respecta a su duración, llegar a los títulos de créditos es algo que nos llevará entre 12 y 15 horas, aunque si lo que pretendemos es conseguirlo todo, la cifra puede sobrepasar fácilmente las 20 horas, una duración que nos parece perfecta para el tipo de juego que es y que os debería permitiros haceros una buena idea de la gigantesca escala de su mapa.

Belleza oscura

A nivel gráfico también consigue destacar gracias a un apartado artístico precioso en 2D con unos fondos trabajadísimos y repletos de detalles, un diseño de personajes y enemigos magnífico, y una ambientación muy lograda que nos sumerge de lleno en su siniestro y fascinante universo. Lo único que no nos ha terminado de convencer son unas ligerísimas y breves caídas en la tasa de imágenes por segundo que se producen de vez en cuando en Nintendo Switch. No son graves ni llegan a tener un impacto real sobre el juego y su disfrute, pero es algo que está ahí y no podemos obviar.

Finalmente, el sonido nos deja con una banda sonora dinámica muy bella y melancólica que huye de la épica incluso a la hora de enfrentarnos a los jefes, algo que encaja perfectamente con su narrativa y la historia que nos quiere contar, aunque no le habría venido mal una mayor variedad de temas o un mejor aprovechamiento de los mismos, ya que muchas de sus melodías llegan a cansar tras horas y horas escuchándolas. Los efectos se limitan a cumplir sin grandes alardes y no existe doblaje de ningún tipo, mientras que los textos nos llegan perfectamente traducidos al español.

Conclusiones

Ender Lilies: Quietus of the Knights es una aventura sobresaliente que no para de mejorar de principio a fin y que acierta en todo lo que hace, desde su espectacular diseño de niveles hasta sus emocionantes combates y su precioso apartado audiovisual. Quizá no haga nada realmente nuevo, pero sí que sabe cómo combinar muchos elementos conocidos para hacerlos suyos y darles su propio toque distintivo, dejándonos para el recuerdo con un soulsvania imprescindible que se ha convertido automáticamente en uno de nuestros indies favoritos de los últimos años. Sin duda, toda una joya que haríais bien en no dejar escapar.

Hemos realizado este análisis gracias a un código de descarga para Nintendo Switch que nos ha facilitado Player Two PR.