CRC (Cross racing championship) 2005 se caracteriza por ser uno de esos juegos que aparecen por sorpresa y de la misma manera que aparecen se va de las tiendas sin que los usuarios se hayan percatado de sus existencia, para ponerle un poco de remedio a esto esperemos que nuestro análisis colabore a que todos los conozcáis un poco más y así decidir si comprarlo o no, desde luego siempre será mejor a que pase inadvertido.
Desde luego es un genero no muy prolífico en el PC donde cualquier juego de coches es bien visto (o casi todos). CRC no se asemeja a ninguno de los grandes conocidos, ya sean los Colin Mcrae en su vertiente de rally o a los TOCA en la vertiente de coches de competición en asfalto, es una especie de híbrido que más que probablemente no terminará de gustar a ninguno de los dos sectores debido a su acusadísimo concepto arcade del que hace uso hasta las últimas consecuencias.
El juego arranca con una intro con música bastante normalilla en la que veremos imágenes con el propio motor gráfico del juego, más bien de sus repeticiones como las que tendremos opciones de apreciar al finalizar cada una de las carreras. En el menú podremos ver los modos de siempre de sobra conocidos eso sí en perfecto inglés ya que el juego solo se encuentra en inglés, francés y alemán, así que los del sur de Europa nos toca jugar sin nuestro idioma nacional. Algo muy triste tratándose de algo tan simple como unos menús, pero por otra parte poco trascendental para un juego de coches, aun así si fuese en español mucho mejor, de eso no hay duda. Por lo menos el manual sí nos los encontraremos en nuestro idioma, algo es algo.
Los modos de juego de siempre
Modos de carrera libre, contrarreloj, online, más luego opciones y créditos, intentan que parezca que haya muchos tipos de carrera dividiéndolos lo máximo posible pero la realidad es que a pesar de sus muchas opciones el juego tiene poco donde escoger para el usuario, esas carreras contra otros jugadores – entre 3 y 7- es un numero decente pero dadas sus acentuadas características arcades, si hubiesen sido más, mejor, y claro, esta circunstancia no se da por el despliegue gráfico del juego que se queda en terreno de nadie por encima del aprobado. Un modo que hemos visto hasta la saciedad en los últimos años es el Carrera, en el cual crearemos un piloto e iremos pasando por las distintas carreras y con nuestras victorias podremos ir consiguiendo mejoras para el coche, desde el escape, transmisión o suspensión, mejorando un poco el pobre control que nos encontraremos al comenzar las primeras partidas.
Puntualizando esos fallos
El comienzo de las carreras recuerda a los Sega Rally y Screamer Rally de hace años situándose la cámara detrás del coche y acelerando cuando el semáforo se pone en verde, también hace mucho el aspecto grafico para traernos tal recuerdo, lo primero que apreciaremos una vez que el coche coja velocidad es que el motor gráfico tiende grandes problemas, muy serios, no es normal ni por asomo que con la misma configuración con la que jugamos al Crónicas de Riddick con antialiasing este CRC 2005 nos dé unos tirones de escándalo, y lo peor de todo es que bajando increíblemente los detalles siguen los problemas aunque en menor medida.
El detalle de los coches es bueno y, junto con la configuración de texturas, calidad de sombras y demás aparece la opción de lejanía de terreno, y es sin duda lo que provoca en mayor medida los "petardeos" pero aunque esté al máximo apreciaremos popping, en cantidades industriales para ser más exactos. Como no todo es malo las texturas son decentes y el diseño es muy proclive a su temática arcade lo que permitiría echar unas partidas online muy divertidas en caso de arreglar esos problemas.
Los efectos de partículas son decentes y la física de los golpes no está mal implementada aunque hay cosas a mejorar, porque como su nombre indica en el 2005 que tenga que haber un botón de recuperar coche cuando esté boca abajo -o en una posición que impida seguir corriendo- se nos hace un poco extraño. Como efectos interesantes que pudiésemos apreciar en partida está el efecto de blur para cuando llevemos algún piñazo y está bastante conseguido pero no es que aporte demasiado a la jugabilidad.
Sonido y música
Pudiendo ser el punto fuerte del juego, como ocurre en casi todos los casos en este tipo de juegos, no podríamos destacar nada, unas músicas bastante buenas y pegadizas que mezclan sobre todo temas de rock y guitarreo con efectos bastante pobres, estos últimos en carrera pasan desapercibidos, sobre todo porque cuando vamos jugando nuestro cerebro esta muy ocupando intentando asimilar las ralentizaciones o en el arcaico control arcade para fijarse en algo más, pero este aspecto aprobado se podría decir que está, porque cumple su cometido, y eso en algunas ocasiones no es poco. Como detalle a destacar aparte de lo que el juego nos presenta podremos importar nuestras canciones MP3 al juego, lo cual es de agradecer, aunque sustituir tal vez lo mejor del juego es un poco extraño.
El problema de ser poco variado
Sin una gran cantidad de coches o de circuitos -y lo más importante, sin publicidad- estos juegos deben jugar bazas fundamentales, la primera es el precio el cual debe ser bajo para conseguir llegar a los usuarios menos exigentes que son los que podrán realizar la compra porque sin publicidad un usuario experto no se va a molestar en mirarlo. La otra es ofrecer una experiencia divertida y gratificante con unos rendimientos lo más efectivos posibles en sistemas más bajos que los que tenemos los últimos micros, giga y medio de RAM y una gráfica de gama media o alta. Lamentablemente CRC 2005 no sabe sobreponerse de ninguna de las maneras y mucho nos tememos que pasará desapercibido no solo por falta de publicidad sino por los méritos que hace para que así sea. Su control anticuado y la falta de diversión condenan a un juego desconocido a seguir siéndolo.
