Análisis de Pokémon Ranger (NDS, Wii U)
A la espera de que lleguen a Europa los ansiados Pokémon Perla y Diamante, Nintendo nos ofrece una divertida y novedosa aventura basada en este fenómeno de masas en la que, siguiendo la estela de lo visto en el resto de títulos aparecidos en la portátil de doble pantalla, dejaremos a un lado la caza y cría de Pokémon para dedicarnos únicamente a proteger y ayudar a los habitantes de las distintas ciudades que visitaremos en la región Floresta, lo que no implica que se abandone de raíz la esencia de la saga. Y es que a diferencia de lo visto en el resto de títulos de la serie aparecidos en Nintendo DS, como Pokémon Dash, Pokémon Link!, o el reciente Pokémon Mundo Misterioso, en Pokémon Ranger nos encontraremos con un juego de aventuras con un desarrollo de la acción muy similar al visto en la serie principal de la saga (los juegos de rol), con la salvedad de que en esta ocasión no seremos un entrenador de Pokémon, ni las capturas que realicemos, que se harán de una forma también novedosa, serán permanentes.
En líneas generales, en el juego nos encontraremos con dos facetas jugables bien distintas. Por un lado estará la exploración del mundo que se nos presentará en la aventura, y por otro los citados combate Pokémon, que como explicábamos deberemos resolver mediante el empleo de la pantalla táctil. En el primero de los casos, podremos controlar al protagonista de la acción con la cruceta y los botones de Nintendo DS, teniendo que usar después el stylus para solventar las peleas; mientras que también podemos optar por el control mediante la pantalla táctil, que resulta la opción más recomendable dado el gran trabajo llevado a cabo por los desarrolladores a la hora de implementar la sencilla interfaz de juego en pantalla.
En este caso, dirigiremos a nuestro avatar por el entorno pinchando sobre la pantalla táctil, mientras que podremos examinar la mayoría de objetos que se encuentran en los escenarios también pinchando sobre ellos. Del mismo modo, si queremos, podemos acceder a nuestra Capturadora pulsando sobre el pequeńo marcador que nos encontraremos en la parte superior de la pantalla, y que además de indicarnos el nivel de vida de nuestro artefacto, y la energía disponible para realizar movimientos especiales, nos marcará los objetivos a cumplir, nos presentará un importante mapa de la región, y nos facilitará toda la información necesaria acerca de los Pokémon "capturados".
Con todo esto, deberemos recorrer una gran variedad de localizaciones entablando constantemente conversaciones con los distintos habitantes de la zona, y en especial con el resto de miembros ranger que se encontrarán repartidos por las centrales ranger de la región, ya que mediante estas conversaciones iremos consiguiendo los distintos objetivos que deberemos cumplir. Estas misiones, que en principio serán de lo más sencillas para pasar después a objetivos mucho más complejos y complicados, nos propondrán la búsqueda de determinados Pokémon extraviados, el calmar los ánimos de algunas criaturas enfurecidas, e incluso el colaborar con los ciudadanos para apagar incendios, quitar obstáculos del camino, o destrozar barreras que impiden nuestro paso. En estos casos, se combinarán enfrentamientos con algunos Pokémon mediante el novedoso sistema de captura del que hablaremos a continuación, con otros momentos en los que deberemos aprovechar las habilidades de los Pokémon capturados para solventar los problemas.
A diferencia de la serie central de la saga, en Pokémon Ranger los combates no serán aleatorios, ya que en todo momento tendremos ante nosotros a los Pokémon que podremos "atacar" para capturar. En este sentido, destaca el sistema de emociones de las criaturas, ya que dependiendo de su estado, algunas saldrán enfurecidas hacia nosotros para atacarnos, mientras que otras huirán por temor. Nosotros, si lo que buscamos es a una criatura en concreto, deberemos dirigirnos hacia ella y pasar por encima, momento en el que la acción cambiará y se nos presentará en la pantalla inferior al Pokémon, o a varias criaturas a la vez, sobre la superficie en la que se encontraba. En ese momento, nosotros deberemos realizar círculos alrededor del Pokémon sin levantar el stylus de la pantalla, hasta que se nos indique que su nivel de energía ha descendido lo suficiente como para capturarlo. Tras esto, podremos levantar el lápiz de la pantalla para ver cómo el Pokémon es atrapado por nuestra Capturadora. El problema, lógicamente, radica en que este proceso no será tan sencillo como ponerse a mover rápidamente el stylus, ya que los Pokémon no dejarán de moverse de un lado para a otro, llegando incluso a realizar algunos de sus ataques más característicos (lanzar chorros de agua, fuego, golpear con ferocidad, etc.).
Para frenar a los distintos Pokémon contra los que combatiremos podremos contar con la ayuda de las criaturas que hayamos capturado, ya que en medio de una refriega podemos activar el comando Poké Ayuda, que nos trasladará a otra pantalla en la que se encontrarán todos los Pokémon que en ese preciso instante nos estarán siguiendo. En ese momento nosotros deberemos escoger a la criatura que queramos que nos ayude, teniendo en cuenta que cada una de ellas llevará a cabo un "ataque" distinto. De este modo, por ejemplo, podemos ralentizar los movimientos de los enemigos haciendo uso de un Pokémon de tipo planta, ya que éstos lograrán que durante unos segundos broten hierbajos del puntero impidiendo así que el rival pueda moverse con total libertad por el entorno; mientras que los de tipo agua pueden encerrar a los rivales en grandes burbujas, lo que sin duda nos facilitará mucho las cosas a la hora de atraparlos.
Sin embargo, como ocurre también con el propio proceso de captura de Pokémon, estos ataques no serán tan fáciles de ejecutar, ya que por ejemplo, volviendo al caso de los Pokémon de tipo agua, la burbuja que creemos deberá ser más grande que la criatura a la que pretendemos atrapar, y que cuando se la lancemos, la burbuja esté completamente terminada, ya que si el rival la toca antes de finalizarla explotará. También, aunque nuestras criaturas jugarán un papel importante en los combates, no debemos confiarnos ya que por mucho que uno de nuestros Pokémon de tipo psíquico hagan levitar a los enemigos, si nosotros no realizamos bien los movimientos con el stylus, al final lo único que lograremos será que perdamos energía, que será fundamental para poder ejecutar este tipo de movimientos, y salud.
En este último caso, la salud en Pokémon Ranger vendrá representada por la capacidad de aguante de nuestra Capturadora, ya que perderemos energía cada vez que un enemigo golpee la barrera que estemos dibujando con el stylus. Si nos encontramos con una criatura difícil de atrapar, podemos emplear las citadas Poké Ayudas para mejorar nuestras posibilidades, o escapar del combate para aumentar nuestro nivel. En este sentido, conforme vayamos ganando batallas iremos adquiriendo experiencia, lo que a la larga ampliará tanto nuestra capacidad para acumular una mayor cantidad de energía, como el nivel de vida de nuestra Capturadora.
También, mientras cumplimos todas las misiones que nos asignen las distintas centrales de ranger, nuestro protagonista ascenderá de rango en la organización, lo que también le conferirá distintas habilidades como la posibilidad de emplear los ataques de determinadas clases de Pokémon en las batallas, o la opción de poder ir acompańado por un mayor número de criaturas a la vez. En este caso, nuestro avatar siempre irá escoltado por un Pokémon amigo (Minun si escogemos chico, mientras que la chica dispondrá de un Plusle), al que se le unirán las capturas realizadas en las distintas zonas del juego, y que deberemos soltar cada vez que abandonemos dicho territorio (hay que mantener el equilibrio en la fauna Pokémon).
Estos Pokémon también nos serán útiles fuera de los combates ya que habrá momentos en los que nos encontraremos con diferentes obstáculos o problemas que únicamente podremos solucionar con su ayuda. De este modo, por ejemplo, podemos apagar un incendio con un Pokémon de tipo agua, o destrozar unas rejas a golpetazos para poder proseguir en la aventura. En este tipo de situaciones, deberemos pinchar con el stylus sobre el obstáculo en cuestión para averiguar cómo sortearlo, y luego usar al Pokémon correcto para eliminarlo. Destaca en este punto el sencillo y claro interfaz creado por HAL Labs, ya que la mayoría de Pokémon contarán con un movimiento de campo concreto y un nivel determinado en el mismo que será lo que nos permita sortear los citados obstáculo, y que quedará reflejado en la pantalla superior de la portátil cada vez que pinchemos sobre una de las criaturas.
Del mismo modo, cada vez que seleccionemos uno de los obstáculos que nos impidan el paso, aparecerá en este mismo interfaz el tipo de movimiento de campo necesario para sortearlo, y el nivel de esta habilidad requerido. Tras conocer la debilidad del obstáculo, deberemos ir en busca de un Pokémon, en caso de no tenerlo ya en el equipo, capaz de solventar el problema, lo que en más de una ocasión nos hará revisar los escenarios a fondo hasta dar con la criatura en cuestión. Con todo esto, cuando estemos listos, simplemente tendremos que seleccionar al Pokémon y arrastrar el stylus hasta el obstáculo en cuestión, momento en el que nuestra criatura realizará el movimiento necesario para terminar con nuestros problemas.
Con todas estas opciones, deberemos ir solucionando una gran cantidad de misiones que irán desde las más sencillas, ir en busca de determinados Pokémon por ejemplo, a las más complicadas, como limpiar una zona repleta de criaturas descontroladas, o hacer frente a los miembros del grupo criminal de turno. En este sentido, destaca el buen trabajo llevado a cabo por los desarrolladores en el apartado artístico, ya que nos adentraremos por paisajes de lo más coloristas siguiendo el estilo ya marcado por los títulos centrales de la saga, con una gran variedad de entornos que irán desde las ciudades más pobladas, a selvas frondosas u oscuras cavernas. No obstante, como el resto de título de Pokémon en la portátil, estamos ante un juego que no destaca en exceso en lo referente al apartado técnico, ya que no nos encontraremos con personajes y escenarios excesivamente detallados, ni disfrutaremos de unos combates espectaculares. Aún así, como ya es habitual en la serie, el acabado gráfico será más que correcto. Del mismo modo, las melodías que nos acompańarán a lo largo de la aventura serán de lo más agradables, pero Nintendo continúa haciendo uso de los arcaicos rugidos para representar los gritos de los Pokémon, lo que ya resulta algo increíble si tenemos en cuenta que ésta parece una situación que la compańía japonesa parece no querer cambiar.
En definitiva, Pokémon Ranger se trata de un notable juego de aventuras con un divertido sistema de batallas y el siempre adictivo elemento de recolección de Pokémon, que de nuevo será una de las partes que más horas nos llevará a cabo completar (no nos quedamos a las criaturas, pero sí quedan registradas sus capturas). También, pese a que el modo historia no resulta excesivamente largo, nos encontraremos con diversos campeonatos y minijuegos en la aventura que dotarán al juego de cierta variedad en su desarrollo, aunque en este sentido cabe destacar que estaremos ante una aventura bastante lineal, ya que deberemos ir superando las distintas misiones que se nos propongan para poder proseguir en la aventura. Como principal defecto nos encontramos con que estamos ante un juego muy simple, lo que en cierto modo puede echar para atrás a determinados usuarios. Y es que aunque estemos ante un sistema de batalla de lo más divertido, tanto las misiones que nos propondrán, como el propio sistema de captura de Pokémon, no destacarán precisamente por su complejidad. Por lo tanto, todo aquel que decida hacerse con este divertido juego deberá hacerlo sabiendo que se encontrará con una aventura muy desenfadada en la que no habrá puzles excesivamente complicados, ni batallas imposibles de ganar.
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