Análisis de Los 4 Fantásticos y Silver Surfer (NDS)
Los Cuatro Fantásticos, ya desde su nacimiento allá por la década de los 60, se han convertido en unos de los personajes más populares dentro del mundo del cómic, y ahora también en la gran pantalla, por mostrar aventuras interplanetarias con un gran sentido del humor y sobre todo destacando valores como el de la amistad o la familia. Desgraciadamente, hasta la fecha muy pocos títulos basados en estos personajes de Marvel han logrado mostrar un mínimo de calidad, y en este caso estamos ante otra apuesta totalmente fallida que sin duda decepcionará a todos los aficionados que esperaban disfrutar de un duelo contra el terrible Galactus y otros tantos villanos de la serie en versión portátil.
Ben Grimm, conocido popularmente como La Cosa, disfrutará lógicamente de las misiones más movidas luchando contra todos los enemigos mientras demuestra su enorme potencial ofensivo. Esto, sin embargo, no significa que sus misiones se centren únicamente en los combates ya que como decíamos los elementos de plataformas estarán presentes siempre. De este modo, además de golpear a los enemigos, deberemos sortear una serie de obstáculos como las citadas plataformas móviles, u otras que cederán a nuestro peso.
Por último, la Antorcha Humana cambiará por completo de registro y en su caso disfrutaremos de misiones totalmente enfocadas en la acción al más puro estilo matamarcianos mientras esquivamos decenas de disparos y abatimos a los rivales con sus potentes bolas de fuego. Por norma, al finalizar cada una de estas misiones deberemos enfrentarnos a una especie de jefe de final de fase que nos pondrá las cosas un poquito más difícil.
Tras superar cada una de estas misiones los cuatro héroes se unirán para hacer frente al villano de turno que les aguardará al final del nivel, y será en estos combates donde se empleen las características de la pantalla táctil de Nintendo DS, ya que el resto de fases se superarán sin ningún tipo de problemas con el control tradicional. Como decimos, en estos combates los cuatro héroes permanecerán juntos en la pantalla inferior de la portátil, mientras que en la superior vemos al villano de turno lanzándonos cuatro tipos de ataques distintos que deberemos contrarrestar con una serie de movimientos en la pantalla táctil. Así pues, si el enemigo va a lanzarnos un potente rayo de energía, deberemos deslizar sin descanso el stylus sobre la táctil para crear una barrera, mientras que si nos lanza objetos pesados deberemos golpearlos sin descanso hasta que se vuelvan en su contra y le resten a él salud en vez de a nuestro grupo. Estos cuatro ataques del enemigo se solventarán siempre de la misma forma, pese a que su diseño variará lógicamente dependiendo del rival. Por lo tanto, en los primeros compases de la batalla observaremos sus rutinas de ataque, para después realizar los movimientos pertinentes sin necesidad de tener que leer los mensajes de texto que aparecerán antes de cada ataque indicándonos el movimiento a realizar.
Y aunque en principio todo este sistema de juego puede parecer muy divertido, en la práctica ocurre todo lo contrario. Las misiones de La Cosa, Mr. Fantástico o la Mujer Invisible con sus plataformas y enemigos clónicos resultan muy repetitivas y fáciles de superar, encontrándonos además con unos entornos y niveles muy poco inspirados. Además, el control no resulta todo lo depurado que cabría esperar, perdiendo la vida en más de una ocasión por los movimientos ortopédicos de algunos de nuestros héroes. Es el caso, por ejemplo, de tener que esperar unos segundos tras realizar un salto para volver a saltar sobre otra plataforma, algo realmente molesto cuando debemos llegar a un punto determinado en un espacio de tiempo breve.
Y aunque los desarrolladores han introducido en cada escenario tres cristales que deberemos encontrar, si queremos, para realizar un ataque especial sobre cada villano de final de nivel (tras cada villano deberemos encontrar otros tres cristales por cada personaje), por lo general optaremos casi siempre por dejarlos a un lado para llegar cuanto antes al final de cada escenario de lo aburridos que llegan a ser. Además, estos ataques espaciales tampoco resultan tan decisivos a la hora de eliminar a los jefes finales, puesto que por norma serán enfrentamientos bastante sencillos y de nuevo aburridos. Y lo peor es que también se tornan excesivamente largos, lo que nos mantendrá durante varios minutos realizando sin parar los mismos movimientos una y otra vez, lo que echa por tierra una idea interesante que los desarrolladores no han sabido llevar a la práctica con éxito.
En cuanto a las fases de la Antorcha Humana, que se complementarán con las misiones a bordo del Fantasticar, resultan algo más divertidas, pero también a la larga se tornarán pesadas por lo repetiditas que llegarán a ser. En este caso, tanto el flamígero héroe como el coche volador de la familia mostrarán un único tipo de ataque, lo que le resta un gran atractivo a este tipo de fases: al final todo consiste en moverse de un lado a otro mientras esquivamos los disparos enemigos y les intentamos abatir. Y aunque como decíamos habrá determinados jefazos entre medio de estas fases, sus enfrentamientos serán idénticos a los del resto de enemigos, aunque con más vida lógicamente. En todas estas misiones el sistema de control resulta bastante sencillo, pese a que como decíamos su implementación resulta algo pobre en determinadas situaciones. Del mismo modo, pese a que los combates contra los súper villanos aprovechan de forma correcta las características de la pantalla táctil de Nintendo DS, al final el resultado tampoco es el esperado por lo repetitivas que serán las rutinas de ataque de cada enemigo. Si en estos casos el equipo desarrollador hubiera trabajado en más tipos de ataque, o combinaciones más interesantes, el resultado sería totalmente distinto.
En lo referente al apartado técnico, Los 4 Fantásticos y Silver Surfer tampoco destaca con respecto a otros títulos de corte similar. Y si bien su apartado sonoro resulta bastante notable dado el buen repertorio de temas musicales que nos acompañarán, a nivel gráfico estamos ante un título muy pobre con unos escenarios demasiado repetitivos y poco destallados, y unos personajes y enemigos igualmente carentes de detalles. Sí podemos destacar las secuencias introductorias, que nos presentarán la base argumental del juego, que se nos mostrarán a modo de dibujos al más puro estilo cómic mientras que en la pantalla inferior de la portátil aparecen los mensajes de texto junto al rostro del personaje cinematográfico que habla en ese momento.
En este sentido, cabe mencionar que el uso de las dos pantallas tampoco resulta el más impresionante visto hasta el momento en Nintendo DS, ya que la superior se usará para mostrarnos toda la acción, mientras que en la inferior tendremos un sencillo y parco menú con el rostro del personaje que estemos controlando en ese momento, y los dos posibles objetos que podremos llevar durante las misiones, un corazón para sanar las heridas y un dispositivo para ser invencibles durante unos instantes, junto a los tres espacios que deberemos cubrir con los ya mencionados cristales a recolectar en cada fase. En las batallas contra los jefazos y en las misiones de la Antorcha Humana y el Fantasticar, como decíamos, se hará uso de ambas pantallas. Por desgracia, como decimos, a nivel de detalles estamos ante un título mediocre, con unos escenarios que se repetirán hasta la saciedad, hecho que cobrará su máxima expresión en las fases de acción de la Antorcha Humana o el Fantasticar, donde veremos una y otra vez los mismos elementos decorativos.
En definitiva, estamos ante un mal juego de acción y plataformas que usa a los cuatro héroes de Marvel como mero pretexto para presentarnos una serie de entornos y enemigos basados en su universo. Se echa en falta, además de unas misiones más elaboradas y divertidas, que esta popular familia haga un mayor uso de sus poderes, ya que por ejemplo La Cosa simplemente pegará puñetazos de la misma forma que Richards hará lo mismo pero estirando un poquito más sus brazos. Son dos personajes tan distintos en los cómics, no solo a nivel de apariencia, que resulta prácticamente un insulto el ver como se comportan de forma casi idéntica en el juego (esto pese a que cada héroe cuenta con un poder especial que activarán tras llenar una barra de energía). A todo esto, para colmo, nos encontramos también ante un título mediocre a nivel gráfico que no incitará a prácticamente ningún jugador a continuar con la historia. Tal vez lo más destacable sea la posibilidad de desbloquear portadas originales de la serie tras conseguir buenas puntuaciones en cada escenario (cogiendo los cristales, matando enemigos, etc.), pero esto es algo que prácticamente nadie se atreverá a realizar dada la calidad del título. Una pena.