Análisis de Las Crónicas de Spiderwick (NDS)

Las Crónicas de Spiderwick, película de Paramount Pictures que estos días veremos anunciada en la cartelera de los cines, basa su argumento en la serie de novelas infantiles escrita por Tony DiTerlizzi y Holly Black. Como ha ocurrido en otras ocasiones, véase cualquiera de las novelas del joven Harry Potter y su ulterior adaptación fílmica, la transformación de una saga novelesca infantil de éxito en una producción cinematográfica (generalmente, también con cierto éxito asegurado) viene acompañada, acto seguido, de su correspondiente adaptación al videojuego.

En este caso, no ha sido diferente. La película ha sido ya estrenada, y en lo que respecta al videojuego, lo podemos disfrutar ya en su versión correspondiente para todas las plataformas portátiles y domésticas. En el caso que nos ocupa, Las Crónicas de Spiderwick para Nintendo DS se presenta como un título enfocado, en principio, a un público infantil, creado sobre los preceptos del género de aventura, aunque con algunos toques de rol que le otorgan una mayor profundidad de desarrollo. El problema es que, posiblemente, el juego sobrepasa en dificultad y profundidad de concepto lo que debería haber sido en un principio, demandando una dosis de paciencia y tesón seguramente excesiva para dicho público. A pesar de todo, no deja de ser un título notable dentro del catálogo de la consola, sorprendente por su complejidad dado el hecho, precisamente, de que se trata de un título, como tantos otros hemos visto pasar por la portátil, basado en una franquicia cinematográfica para niños.

Argumento y sistema de juego.
El argumento del juego introduce desde el inicio la figura de Arthur Spiderwick, investigador y naturista que, durante sus frecuentes incursiones en los bosques colindantes a su casa, descubre la existencia de un mundo invisible, mágico y misterioso, en el que conviven seres fantásticos, como hadas, espíritus, goblins o trolls, ocultos al ojo humano. Gracias al uso de una lente mágica, el Anteojo Asombroso, el investigador será capaz de ver este mundo y los seres que lo habitan, con lo que decidirá recopilar todos sus conocimientos nuevos sobre este maravilloso universo en las páginas de un libro, a modo de guía, y así poder darlo a conocer al resto del mundo. Pero algunos de estos seres no desean para nada ser descubiertos, y pronto harán desaparecer al investigador en muy extrañas circunstancias. Dándolo por muerto, su mujer y su hija abandonarán la casa familiar, que comenzaba a ser también pasto de los malignos habitantes del mundo invisible.

Años después, tres hermanos, Jared, Simon y Mallory, se mudan junto a su madre Helen a una nueva casa junto al bosque. La casa, propiedad de su abuela Lucinda, no es otra que la casa encantada de la que la familia Spiderwick tuviera que huir tiempos atrás, como descubrirán pronto los tres hermanos, últimos descendientes del investigador desaparecido. Una serie de extraños sucesos en la casa darán pie al descubrimiento por parte de Jared de las crónicas de Arthur Spiderwick, hecho que provocará el rapto de su hermano, Simon, por un grupo de orcos y goblins liderados por el malvado troll Mulgarath. Presuntamente, fue éste el mismo troll que hizo antaño la vida imposible a la familia Spiderwick, haciendo desaparecer al investigador y hostigando sin cesar a su mujer y su hija, hasta que éstas abandonaran la casa, según nos relatará Dedalote, un duende amigo de la familia.

Así, ni corto ni perezoso, Jared se adentrará en el bosque, previamente habiendo recogido la lente mágica que permite a los seres humanos ver el mundo oculto, para rescatar a su hermano de las garras de los malignos seres que lo mantienen preso. Una vez rescatado Simon, los dos hermanos se unirán a Mallory, la mayor de los tres, en una singular aventura para descubrir la verdad que se oculta tras las crónicas de Arthur Spiderwick, así como tras la misteriosa desaparición del mismo.

Controlaremos durante el juego a los tres hermanos protagonistas, Jared, Simon y Mallory, en ocasiones por separado o en grupos de dos, en ocasiones los tres simultáneamente, según las conveniencias del guión. Manejaremos al grupo por los diferentes escenarios mediante el stylus, de manera semejante a como pudimos observar en The Legend of Zelda: Phantom Hourglass. De esta manera, si pulsamos con el stylus en cualquier punto de la pantalla, nuestro personaje se movera de manera automática hasta allí. Por otro lado, si arrastramos el lápiz táctil por la superficie de la pantalla, nuestro personaje seguirá el recorrido que tracemos. En todo momento podremos elegir cual de nuestros persones liderará el grupo, esto es, cual de los tres modelos manejaremos durante la partida, ya que sólo veremos a un personaje en pantalla durante nuestras aventureras incursiones en los diferentes escenarios del juego.



Los escenarios del juego nos sitúan en las diferentes ambientaciones y entornos que dan vida a la versión fílmica de la historia. Nos moveremos por los bosques mágicos que rodean la casa de los Spiderwick, conoceremos a fondo los recovecos de la misma casa, e incluso nos adentraremos en poblaciones enanas o guaridas de goblins y trolls. A lo largo de nuestras incursiones, mayoritariamente por los bosques que rodean nuestro hogar, podremos recoger diferentes bonificaciones en forma de diferentes espíritus, que nos permitirán, según el caso, recuperar salud, mejorar nuestro ataque o protegernos durante los combates.

Por otro lado, contamos con unos espíritus que permitirán mejorar el nivel de nuestros personajes, como si de un juego de rol se tratase, en tres categorías: salud, combate y afinidad con los espíritus, es decir, el poder que podremos desplegar al realizar ataques, curaciones o protecciones mediante el uso de espíritus. Cada vez que encontremos un espíritu de mejora de nivel, se nos permitirá únicamente mejorar una habilidad de un único personaje, con lo que mejorar las aptitudes para el combate de los mismos será, ciertamente, un proceso lento, largo y costoso.

Para encontrar los espíritus en los diferentes escenarios, deberemos remover arbustos, levantar piedras, buscar dentro de troncos de árboles vacíos, e incluso soplar al micrófono de nuestra consola. Cada tipo de espíritu tiene un comportamiento diferente, como diferente será la manera de capturarlos. En ocasiones, deberemos simplemente pulsar sobre ellos con el lápiz táctil. En otras, deberemos de engañarlos con suculentas bayas que recogeremos en determinados arbustos. El ingenio jugará a nuestro favor, en estos casos, y deberemos de descubrir cómo capturar a cada tipo de espíritu a medida que vayamos avanzando en la aventura.

Los combates en el juego se realizan por turnos: primero, generalmente, atacarán los miembros de nuestro equipo; posteriormente, nuestros oponentes. Entraremos en combate cada vez que entremos en contacto con algún personaje enemigo durante nuestras incursiones por el bosque, aunque en determinadas escenas los combates aparecerán sin más, como parte del hilo argumental. Veremos en los combates a nuestros personajes en la parte izquierda de la pantalla táctil y a nuestros enemigos en la parte opuesta.

Cada vez que nos toque atacar, podremos seleccionar si queremos utilizar algún espíritu o si queremos realizar un ataque especial, los cuales podremos invocar- en caso de haberlos adquirido previamente en la "tienda" del juego, representada por el trasno Cerdonio- cuando hayamos llenado el contador mostrado junto a la imagen de nuestro personaje en la pantalla superior de nuestra consola, debajo de nuestro indicador de salud. Este contador se llenará a medida que vayamos realizando ataques y bloqueando a nuestros enemigos en combate.

Si no elegimos ninguna de las opciones anteriores, nuestro personaje, simplemente, realizará un ataque directo. Cada personaje cuenta con un ataque determinado, según el armamento de que dispone, así como unas habilidades propias e intransferibles en el campo de batalla. Jared dispone de un bate de béisbol, Simon únicamente dispone de sus puños, y Mallory utiliza su florete de esgrima para dar cuenta de sus enemigos. Cada vez que realicemos un ataque con uno de los personajes, un minijuego se nos presentará en pantalla. Si lo realizamos correctamente, nuestro ataque inflingirá mayor daño a nuestros enemigos, con lo que tardaremos menos en eliminarlos.

Estos minijuegos serán diferentes para cada personaje: en el caso de Jared, deberemos de realizar un movimiento circular rápido en pantalla; Simon nos retará a pulsar unas marcas en pantalla en un orden determinado; y Mallory nos hará realizar un movimiento de rasgado con el lápiz táctil. En caso de que queramos realizar un ataque especial o utilizar algún espíritu durante los combates, deberemos de realizar también los minijuegos correspondientes, siendo estos de mayor dificultad cuanto mayor sea el poder del ataque que queramos realizar.



Por otro lado, podremos disponer a nuestros personajes en dos filas durante los combates. Los de la fila más cercana a los enemigos, posición en la que se pondrán nuestros personajes por defecto, podrán atacar y realizar cualquier acción sin problemas. Por el contrario, los que pongamos en la fila trasera se pondrán en actitud defensiva y no podrán realizar ataques directos. Sólo podrán atacar a distancia, mediante el uso de objetos arrojadizos o invocando a espíritus destinados al ataque. Por otra parte, si alguno de los personajes que se encuentran en la fila trasera es atacado, los personajes que se encuentren en primera fila contraatacarán acto seguido.

Podremos realizar movimientos de defensa para reducir considerablemente el daño recibido por nuestros personajes durante el combate, pulsando sobre ellos con el stylus cuando vayan a ser atacados por algún enemigo. Aún así, los combates son duros y en más de una ocasión nos veremos sobrepasados en número por enemigos de mayor nivel y fuerza. En más de una ocasión seremos derrotados, lo que significará reiniciar el camino desde el punto de control más cercano, el cual muchas veces no está tan cerca como quisiéramos. En fin, Las Crónicas de Spiderwick es un juego difícil, sin duda, y los pequeños de la casa pueden llegar a perder fácilmente la paciencia con él.

El juego cuenta con un añadido extra para aprovechar la conexión inalámbrica de nuestra consola. Cada tarjeta de juego contará con tres espíritus de alto grado de rareza exclusivos para ella, lo que permitirá a los jugadores intercambiar espíritus entre sí para irlos coleccionando y, posteriormente, utilizarlos en el juego. El título, por otra parte, no cuenta con más opciones multijugador y, teniendo en cuenta que no es demasiado largo, las horas de disfrute junto al mismo son considerablemente reducidas. Una verdadera lástima, ya que una vez hayamos completado la historia del juego- que, todo hay que decirlo, no es excesivamente larga- no tendremos ningún aliciente para volver a jugarlo.

Apartado técnico.
Los gráficos del juego son notables, aunque cuentan con algunas irregularidades que hacen bajar bastantes enteros al apartado. Si bien los escenarios están maravillosamente realizados, con algunos modelados en tres dimensiones, como los de la casa de los Spiderwick, y con algunos diseños notorios, como el del poblado de los enanos, en ocasiones pueden hacerse demasiado repetitivos, como es el caso de los entornos correspondientes a las cuevas y a los bosques, en los cuales nos veremos ocasionalmente desorientados, debido a que las diferentes zonas se parecen mucho entre sí. Por otra parte, los personajes están realizados correctamente, aunque en general cuentan con modelos bastante pequeños y carentes de detallismo. Teniendo en cuenta las fantásticas ilustraciones que adornan las novelas pertenecientes a la serie original, los gráficos del juego podrían haber lucido mucho más.

Otro cantar es la música del título. Melodías fantasmagóricas con instrumentaciones mágicas acompañan perfectamente toda la aventura. La Nintendo DS suena maravillosamente, como si de una caja de música se tratase, y la variedad de los temas ayudan al jugador a adentrarse aún más en el maravilloso mundo oculto de Las Crónicas de Spiderwick. Música de ambiente que deleitará al jugador, sin duda, aunque sin disturbar en ningún momento la atención del mismo.

La jugabilidad es otro aspecto muy notable del juego. Si bien los menús a los que deberemos de acceder durante la partida no responden demasiado bien a la precisión requerida en caso de optar por la opción de control táctil, en el resto del juego ésta ha sido muy bien implementada, y nuestros personajes responderán sin problemas a nuestras exigencias, tanto si decidimos manejarlos mediante el stylus como si elegimos la opción más tradicional de manejarlos mediante la cruceta de control y los botones de la consola. Las batallas contra los malignos personajes del mundo oculto son muy divertidas, aunque también difíciles, y los minijuegos que desarrollan dan un toque de variedad a la acción muy de agradecer. Por otra parte, posiblemente el mayor fallo con el que cuente el título sea la falta de mayor número de opciones o modalidades de juego, ya que una vez concluyamos con la aventura principal, el juego perderá casi todo su interés.

Conclusiones.
En pocas ocasiones podremos encontrarnos con una conversión realizada a partir de una franquicia infantil como la presente edición de Las Crónicas de Spiderwick. Sin duda alguna, es un juego notable, seguramente demasiado difícil y exigente para el público para el cual, en un principio, se ha destinado, pero muy destacable en su realización, frente a otros títulos con las mismas características, y con un desarrollo argumental muy interesante que le hace ganar muchos puntos frente a un público de mayor edad.