Análisis de Cyto (iPhone)
Vivir a tono con el constante ritmo de lanzamientos, nuevas aplicaciones, géneros y secuelas que llegan a la App Store, como jugadores habituales en las plataformas de Apple, es muy difícil de mantener. Habrá ocasiones -si es que no os ha pasado más veces- en las que entraréis en la plataforma digital de la manzana y acabéis abrumados ante semejante variedad de títulos y novedades. Cupertino, de manera bastante inteligente, dio luz verde a las listas de juegos recientes, así como a los lanzamientos auspiciados por su propio sello editorial.
De esta manera, se consigue que el jugador pueda focalizarse en algunos juegos interesantes, sirviéndonos a todos como una guía de referencia a la hora de jugar y pasarlo bien desde nuestro iPad, iPhone o iPod touch.
En Vandal hemos llegado así a Cyto, un juego de Room 8 que viene apoyado por el grupo editorial de Chilingo, y que nos ofrece una experiencia curiosa -aunque quizás, no demasiado original- basada en el género de puzles.
Recupera la memoria... ¡Y evita esas malvadas amebas!
En Cyto, nos veremos transportados a un implacable mundo biológico, microscópico, y completamente desconocido. En mitad de este universo pluricelular alienígena, encarnaremos a un adorable -y un tanto olvidadizo- organismo que, mientras viaja por diferentes fases -81 niveles distintos-, deberá encontrar y recuperar los distintos fragmentos de su memoria, a fin de convertirse en un ente biológico más completo. Cyto, coge como suyos elementos de juegos laureados, como el exitoso Flow, y los intercala con conceptos jugables más propios de Angry Birds, dando así como resultado, una mezcla divertida y curiosa en la pantalla táctil de nuestro dispositivo iOS. De esta manera, Cyto se desvela como un juego de puzles interesante, fácil de jugar y comprender, y que, tras unas partidas, nos enganchará sin remedio.
El objetivo de Cyto, por lo tanto, es fácil de comprender: tenemos que recuperar y coleccionar los fragmentos de memoria dispersos por los escenarios, utilizando nuestro ingenio, y nuestras habilidades, para ir "nadando" entre el citoplasma en el que nos encontramos. Jugablemente, Cyto nos recuerda, y mucho, a Angry Birds Space. En aquella app, lanzábamos a nuestros pájaros alrededor del espacio y a través de los diferentes planetas y satélites, que ejercían una particular gravedad en nuestros animales. Descontextualizando la ambientación especial del juego de los pájaros rabiosos, en cuanto a esquema y mecánica jugable, Cyto es muy parecido, cambiando planetas por células y organismos.
De esta manera, dirigimos a Cyto, que deberá ser lanzado de célula en célula, agarrándose a los filamentos externos de cada organismo. Para ello, tiraremos hacia atrás de Cyto, y lo lanzaremos buscando la trayectoria ideal para que se aferre a otra célula y así, repetir el proceso. Conseguir los fragmentos de memoria será fácil al principio y al comienzo, aunque a los pocos niveles, nos veremos rodeados de elementos externos, organismos virales y otros obstáculos y peligros, que nos pondrán las cosas muy difíciles.
El diseño de los niveles es un verdadero canto a la originalidad, con distintos y curiosos elementos únicos, como los citados virus -si se pueden llamar así- o los filamentos malvados de algunas células y amebas, que nos evitarán combos o caminos fáciles -elaborando verdaderos muros biológicos, por ejemplo-. Pensar antes de lanzar al bueno de Cyto será algo vital si no queremos caer al vacío o ser devorados. Cyto es un juego complicado, aunque no en exceso, ya que gracias a su consabida y habitual jugabilidad -heredera de algunos jugos similares, como hemos dicho anteriormente- podemos adaptarnos al poco tiempo, consiguiendo que jugadores extraños y veteranos, queden irremediablemente enganchados a su propuesta.
Entrando en el plano más artístico y gráfico, Cyto, pese a no ser ningún juego con excesivos con alardes visuales, llena por completo a cualquier jugador que se precie. Nos ofrece un adorable personaje protagonista -Cyto es una bola azul, sí, pero carismática- y un entorno curioso y visualmente atractivo. Tendremos células de casi todos los colores y formas, corrientes de líquido, burbujas, filamentos agresivos y amigables... Todo un espectáculo comedido que hará las delicias de los poseedores de un iPhone o iPad con pantalla retina. La banda sonora goza de temas musicales muy buenos, enfocados al relax y la reflexión, aunque el más nervioso acabará por desactivar el sonido para así concentrarse mejor. Pese a ello, Room 8 nos invita a que nos pongamos unos buenos cascos para lograr una experiencia mejor. La app tiene, a su vez, sincronización con Facebook, iCloud y Game Center -aparte de sus propios logros y puntuaciones-, con lo que los "piques", están asegurados.
Conclusiones finales
Cyto es una app de esas que divierten y enganchan, sobre todo gracias a lo accesible de su propuesta. Es entretenida, tiene una mecánica jugable ideal -muy fácil de asimilar y entender- y ofrece 81 niveles llenos de retos. Su estilo y diseño artístico ayudan a que todo encaje a la perfección, con detalles gráficos de producción grande -aunque eso sí, Cyto no tiene nada de fuegos de artificio en lo gráfico, no os confundáis-. Además, quizás, y como hemos dicho en el análisis, peque de ser poco original -Flow y Angry Birds son una fuente de inspiración obvia-, pero es un pequeño peaje a pagar. Por 0,89 €, si estás un poco cansado de pájaros rabiosos o juegos de gemas, Cyto te aportará una aventura amnésica de lo más absorbente.