Análisis Remnant 2, un buen shooter, un excelente RPG y un gran juego (PC, Xbox Series X/S, PS5)

Remnant: From the Ashes se estrenó sin mucho revuelo en verano de 2019, pero su calidad y las buenas críticas de medios y fans lo convirtieron en uno de esos tapados que poco a poco fue calando gracias a las recomendaciones entre usuarios. En poco más de dos años, la aventura de Gunfire Games –hasta entonces generalmente asociados a Darksiders- acumuló más de tres millones de copias, lo que garantizó una secuela.

Remnant 2 va camino de repetir la jugada, e incluso de superarla. Es un juego excelente por méritos propios y esta vez se apoya en el prestigio de su predecesor, lo que permitió superar el millón de copias en su primera semana e incluso convertirse en el juego más vendido durante el pasado mes en Estados Unidos, por delante de Diablo 4, Final Fantasy 16, Pikmin 4 o Street Fighter 6.

El soulslike con armas de fuego

Ya el primer Remnant fue comparado en multitud de ocasiones con los Dark Souls de FromSoftware pero sustituyendo espadas y escudos por armas de fuego. Es fácil pensar que la definición la ganó simplemente por una elevada dificultad, sin embargo la inspiración llegaba mucho más lejos. Remnant 2 repite la jugada, y de nuevo nos presenta un juego de rol y acción en tercera persona con algunas mecánicas soulslike y tímidamente de looter shooter en un mundo postapocalíptico que se distancia del rol de magia y fantasía. Descansar en un punto de control para recuperar munición y reliquias, pero también recuperará a los enemigos básicos de la zona. ¿De qué nos suena esto?

Ambientado tras el último contenido descargable de Remnant: From the Ashes, esta secuela nos presenta a un superviviente de este extraño mundo corrupto poblado por monstruos. Remnant 2 se encarga de presentar a los personajes y detalles clave de la historia, de manera que no es imprescindible jugar a Remnant o su precuela Chronos: Before the Ashes, pero obviamente quien disfrutase de ellos sabrá exprimir mejor su contexto y reconocer a los personajes que regresan.

Hablamos de un juego de rol y acción donde las dos piezas tienen su peso. Por supuesto que hay muchos tiroteos y la puntería es vital, pero un acertado equipamiento y las habilidades correctas nos pondrán las cosas más o menos fáciles. Eso sí, a diferencia de otros soulslike, aquí encontraremos varios niveles de dificultad para que todos los jugadores tengan opciones para divertirse: superviviente, veterano, pesadilla y apocalipsis, o el modo extremo con muerte permanente y limitaciones concretas en el multijugador.

Una de las primeras decisiones importantes será el tipo de clase inicial de nuestro protagonista –creado con un sencillo editor-. Los nombres son diferentes al de un RPG clásico, pero en esencia tenemos lo básico en estos casos: médico para apoyo y curación, cazador para daño a largo alcance, contrincante –un tanque para combate a corta distancia-, domador –acompañado de un perro con diversas estrategias- y el gunslinger –pistolero para daño directo y ahorro de munición-. Hay algunas diferencias aquí respecto al primer Remnant, y progresando en el juego desbloquearemos más de una decena de arquetipos y una segunda clase, lo que siempre da juego a moldear nuestro estilo de juego a nuestro gusto. ¿Un personaje completamente orientado a maximizar el poder ofensivo? ¿O un segundo arquetipo que cubra las debilidades para estar listos ante cualquier situación? Tú decides.

Esta personalización va acompañada de otros muchos aspectos, como el impacto de las decisiones, la creación, mejora y modificación de armas con los materiales que vamos consiguiendo o las diferentes piezas del equipo. Puedes jugarlo en solitario, pero en este caso suele ser más divertido jugar en compañía con usuarios que complementen nuestro arquetipo; Remnant 2 está diseñado con esto en mente y muchas de sus habilidades sólo tienen sentido en compañía, así que tenlo en cuenta. También te ayuda a hacer el viaje más asequible, ya sea porque varios jugadores pueden distraer a un jefe o enemigo potente o porque es más fácil evitar las emboscadas y proteger los flancos.

Como os contamos en nuestras impresiones, de nuevo utiliza una generación por procedimientos que cambian el diseño de las mazmorras y la aparición de enemigos. De hecho, este componente aleatorio se ha expandido, afectando por ejemplo al tipo de enemigos, NPC y misiones. Normalmente no somos muy amigos de esta herramienta que ha sido abusada en multitud de roguelikes indie, en demasiadas ocasiones para crear mapas monótonos y fríos, pero en este caso está bien aplicada gracias a la ingente cantidad de contenido que maneja; rara vez tendremos sensación de repetitividad. ¿Cómo terminará la mazmorra? No necesariamente con un jefe, quizás se trata de un evento especial. En buenas manos, la aleatoriedad es una gran idea.

La acción es divertida y la manera de afrontar los enfrentamientos cambia dependiendo del arquetipo elegido. Si bien los tiroteos están lejos del pulido de los mejores shooter puros –en cuanto a movilidad por el mapa, por ejemplo- y la acción a corta distancia flaqueé más, aquí normalmente se recomienda una estrategia conservadora, haciendo uso del movimiento evasivo constantemente. Al final, todas sus virtudes son resultado de la libertad con el estilo de juego y el peso de los elementos roleros. Incluso la duración nos ha parecido más que correcta: aproximadamente 20 horas para lo principal –casi el doble que en Remnant-, muchas más si así lo deseas con el contenido extra o la rejugabilidad en partidas online.

Diseñado para la actual generación

Remnant 2 ha dejado atrás la pasada generación de consolas, algo que probablemente será la norma en adelante con las superproducciones y juegos "AA" como este. Si bien no es un título que saque músculo técnico, Gunfire Games ha mejorado diversos aspectos en iluminación, texturas y número de enemigos para que se aprecie el salto respecto a Remnant. Lo mejor sigue siendo el apartado artístico, con esos mundos que van desde las civilizaciones en ruinas a biomas mucho más surrealistas; puede que en alguna ocasión parezca poco homogeneizado, pero también podríamos considerarlo un punto positivo. Además, ese elemento procedural termina por hacer tu partida única y que sea muy difícil de ver todo lo que ofrece Remnant 2 con un único vistazo -o sin colaborar en la partida de otros usuarios-.

El diseño de las criaturas –muy, muy variado, en aspecto y comportamiento- también merece ser destacado porque se sale de los tópicos más manidos de la fantasía oscura. En la parte menos brillante, algunas animaciones o la escasa expresividad de los personajes durante los diálogos, pero nada fuera de lo normal. Al igual que su predecesor, llega con voces en castellano.

Conclusiones

Remnant 2 no revoluciona lo visto en el original, pero hace todo lo que se puede esperar de una secuela. Pulir la base, mejorar aspectos jugables, más espectacularidad, flexibilidad a la hora de evolucionar al personaje y decenas -o centenares- de horas en solitario o compañía, con un divertidísimo RPG de acción que viene a demostrar que los aciertos de Remnant: From the Ashes no fueron fruto de la casualidad. Mucho tendría que torcerse la saga para no convertirse en la licencia clave de Gunfire Games de cara al futuro.

Hemos realizado este análisis en su versión de PC con un código que nos ha proporcionado fortyseven communications.