Cuando miramos el apartado musical en videojuegos, no son necesariamente compañías grandes o muy conocidas las que más suelen destacar. Por supuesto hemos visto varias que tuvieron sound team estelares, pero por lo general es una cuestión que depende de la filosofía interna, o lo que es lo mismo, del papel que juegue la música en el desarrollo.
Natsume desde luego ha sido una de esas que ha cosechado buena fama sonora, y no es casualidad cuando vemos que junto a compositores filiales como Hiroyuki Iwatsuki tuvo a dos ex-Konami de la talla de Iku Mizutani (Metal Gear) y Kinuyo Yamashita (Castlevania, Parodius), con lo que parte de su catálogo se recuerda en especial por la banda sonora. Hoy recordaremos una selección de sus juegos más destacados en esta categoría.
Shadow of the Ninja / Blue Shadow
Blue Shadow puede decirse que fue una de las joyas de la corona. Se suele conocer por ser el máximo rival de los Ninja Gaiden de Tecmo en aquella época de NES, y si bien el juego no se puede considerar tan redondo, la música de Iku Mizutani y Kouichi Yamanishi no tiene nada que envidiarles, compitiendo entre los mejores repertorios de la consola.
El contrapunto del recital chiptune es muy similiar al de las aventuras de Ryu Hayabusa, siguiendo a su vez el manual de otros referentes cañeros como los Mega Man y los Castlevania, plagados de armonizaciones e intentos de hacer heavy metal en 8-bits, algo que prueban fraseos como el que abre la Fase 1, emulando claramente la nota pedal de un riff de guitarra. Entre su impecable listado tampoco es fácil olvidar la Introducción, el tema de Garuda y los jefes o el Ending, que pone el broche final con una potente rapsodia.
Chaos World
Este es quizás el más raro de todos, puesto que es un juego que no salió nunca de Japón, pero también es el único de la trayectoria de Natsume que recibió un álbum dedicado. Fue en 1991 a través de Tokuma Japan, y titulado simplemente Chaos World. La principal carga compositiva fue de Mizutani, aunque en unos pocos temas tendríamos también a Iwatsuki.
Al tratarse de un RPG la cantidad de música es considerable, y quizás fuese esa la razón por la que tuvo un CD entero antes que otros juegos de Natsume que destacan musicalmente. A pesar de todo mantiene un gran nivel, como era de esperar.
Shatterhand
La principal característica de este título de acción se encuentra en las distintas versiones en función de la región, y es que mientras en los mares occidentales es Shatterhand, en Japón fue conocido como Tokkyu Shirei Solbrain, pues adaptaba la serie tokusatsu Super Rescue Solbrain. Esto se traduce también en diferencias musicales en la intro y el Area C.
Iku Mizutani fue de nuevo en este caso el mayor responsable, tirando por un estilo mucho más similar al de Contra, latente en zonas como Factory, Submarine, Anti Gravity Search Center o la épica de Missile Command. El resultado es otro registro de NES muy querido.
Power Blade
La señorita Kinuyo Yamashita empezaría a trabajar para Natsume con este Power Blade tras dejar el listón bien alto en Konami. La música aquí es otra locura natsumiana de las buenas, sorprendiendo por los largos y cambiantes cortes que lo componen, que llenan fácilmente tres minutos de música sin abusar de bucles. "Space Center", "Bio Lab", "Water Tower", "Tanker", "City"… prácticamente no hay momento en todo el juego sin su gran tema.
Poco después, en 1992, hubo hueco para un Power Blade 2 y fue Yamashita también la encargada de componerlo. Por supuesto volvió a superarse con un repertorio a la altura.
The Ninja Warriors Again
La otra gran obra de ninjas de Natsume es este The Ninja Warriors que les encargó Taito y que no era otra cosa que un remake para Super Nintendo –motivo por el que se titula The Ninja Warriors Again en Japón– de su clásico de 1987. Hiroyuki Iwatsuki fue quien tomó el mando con una banda sonora que sustituye a la de Zuntata en el arcade original.
Lo primero que llama la atención es el importante cambio en el salto de NES al chip de Super Nintendo, ya que el enfoque variará a partir de ahora, aunque es más en el sonido que en las composiciones, que sí mantienen en cierto modo la esencia de Natsume. "City Center", "Parking Block", "Headquarter", "Port" o los temas de jefes son sin duda el punto fuerte.
Wild Guns
Uno de los que se mantienen más frescos es este clásico de Super Nintendo, que recibió hace bien poco su reedición Wild Guns Reloaded para PS4. En el original, Hiroyuki Iwatsuki y Haruo Ohashi se repartieron el trabajo para dar una genial banda sonora del oeste con temas como "Carson City", "Desolation Canyon" o "Armored Train". Resulta inevitable que por temática nos recuerde en algunos pasajes a la música de Motoaki Furukawa para Sunset Riders, pero lo cierto es que el sello Natsume está ahí bien claro desde el principio.
Natsume desarrolló muchos más juegos –aunque su labor luego se extendió mayormente a temas de distribución– en sus buenos años de actividad, donde entran S.C.A.T. , los Pocky & Rocky, varios juegos de Power Rangers y hasta gemas ocultas de otras regiones como el Ghost Sweeper Mikami de Super Famicom. Y en prácticamente todos veremos el sello de los mismos tres pilares: Hiroyuki Iwatsuki, Iku Mizutani y Kinuyo Yamashita.
El pasado año Natsume Atari publicó el que sin duda es el álbum definitivo de su historial, el llamado Natsume Game Sound History 1988-2009, pero lamentablemente no es fácil de conseguir, ya que no llegó a salir a la venta, se fabricaron apenas 200 copias que fueron sorteadas entre aquella gente que votó eligiendo sus juegos favoritos de la compañía.