El día 23 de este mes, entre otros aniversarios, Sonic cumplió veinticuatro años, desde que a principios de los noventa vino para relegar a Alex Kidd como mascota oficial de la marca de Kioto.
¿Por qué recordamos hoy al erizo azul? Pues bien, como sabemos todos los que vimos nacer a Sonic, hoy contemplamos con algo de desazón el caminar del personaje a lo largo de los años hasta sus últimas entregas. Muchos de los que disfrutamos de su increíble primer plataformas recordamos con añoranza los años dorados de sus mejores aventuras, y muchas veces volvemos a revivir su primera vez, sacando el cartucho con cuidado y encendiendo nuestra MegaDrive, impasible al pasar de los años, y funcionando como el primer día.
Recordamos con una pequeña sonrisa la lucha encarnizada que Sega y Nintendo mantuvieron en aquella época, antes de que Sony y Microsoft irrumpieran en el mundo de los videojuegos. El primer Sonic sigue siendo el más vendido de todos, superando los 15 millones, sin sumar los 8 millones en sus versiones para móviles y descarga digital.
No solo fue la explosión del personaje, sino que además fue uno de los juegos que demostraba las capacidades de la nueva consola de 16 bits de Sega, significando un antes y un después en esta compañía. Ya que como sabemos, la empresa ideó el personaje ante la necesidad de crear una mascota con la que sus seguidores se identificaran, y fuera lo suficientemente atractiva como para hacer frente a los hermanos Mario y Luigi.
Mucho han cambiado los tiempos, y una entrega de Sonic para las consolas de la competencia en aquellos tiempo nos hacía soltar una carcajada a más de uno, ya que la rivalidad entre los dos personajes fue una de las formas en la muchos de nosotros elegíamos "bando", en una de esas guerras que todavía algunos mantienen al tener una u otra consola.
El sucesor de Alex Kidd en millones de hogares
Muchos de nosotros sabemos al completo la historia del "proyecto Needlemouse": AM8, encabezada por un jovencísimo Yuji Naka como programador, hizo muchas pruebas de diseño para la nueva mascota. Las ideas lanzadas nos hablaban de un conejo, de un zorro con una llamativa vestimenta, un perro con cara de malas pulgas y hasta de un personaje que parecía "un Mario malvado y más grande". Sin duda los conceptos que manejaba Naoto Ohshima y el equipo distaban de la idea de crear un antagonista del fontanero, hasta que el diseño de un erizo azul, que compartía el color de la empresa, se hizo un hueco al ser lo bastante diferente del pequeño y rechoncho Mario.
Sonic tenía 15 años, media un metro y pesaba 35 kilos, también era un erizo con la velocidad como identidad, y de ahí que se cambiase el nombre, más acorde y lógico al ser alguien capaz de correr a la velocidad del sonido, además de tener una cara desafiante, algo egocéntrico y confiado de sí mismo: Sonic el erizo acababa de nacer.
A pesar de que muchos asocian a Sonic con Yuji Naka, lo cierto es que el erizo azul es obra de Naoto Ohshima, que ideó además unos personajes que nunca llegaron a ver la luz, como Madonna, su novia humana, hasta llegar al concepto de animales convertidos en robots por el Dr. Eggman, llamado Dr. Robotnik en Europa. Además de esto, como podemos comprobar en las portadas, Sega of America decidió estilizar al personaje con una cabeza más pequeña y un Sonic más delgado, sin duda resultó en un acierto pues los siguientes diseños en sus secuelas llevaron el mismo estilo.
El concepto de los niveles también se esbozó con bastante detalle. Lo sabemos por los famosos bocetos que muchos conocemos, pero cabe destacar la cantidad de ideas en estos papeles que no fueron llevadas hasta posteriores entregas. Además de una pantalla claramente inspirada en el monte Fuji y una famosa torre situada en Kioto.
El diseñador, ¿pieza clave?
Los niveles de Sonic fueron ideados por el gran Hirokazu Yasuhara, quien se encargó del diseño de niveles de Sonic, Sonic 2, Sonic 3, Sonic & Knuckles, Sonic 3D Blast, Sonic Extreme y Sonic R. Después de esto Yasuhara decidió abandonar Sega para encontrar en Naughty Dog un sitio destacado en el que demostrar su tremenda habilidad en el diseño de niveles, con juegos como Jax and Daxter y Uncharted.
El juego constaba de 7 niveles, los cuales demostraban todo el poderío gráfico de MegaDrive, además de aprovechar la superior velocidad del procesador principal frente a su competidora para mostrar un scroll vertiginoso en el que nos encantaba perdernos a toda velocidad.
Todo esto aderezado por la descomunal banda sonora del mítico Masato Nakamura, un derroche de talento que hicieron de estas pistas unas melodías que muchos durante décadas seguimos tarareando.
Anillos y más anillos
Desde el icónico mundo Green Hill, hasta llegar a derrotar al Dr. Robotnik en su propia guarida, los escenarios por los que Sonic se movía demostraban porque el diseñador de niveles pudo ser una pieza clave que ya no está en el actual Sonic Team.
Hay partes veloces en las que los loopings nos hacen tomar la suficiente velocidad para que Sonic corra por ellos, pero también tenemos multitud de secretos que nos hacen rejugar los escenarios: monitores secretos, muelles que nos llevan hacia un lugar inalcanzable y la obsesión por recoger los anillos, siempre los anillos que en Sonic necesitábamos para alcanzar los suficientes y probar suerte en las fases de bonus, donde nos recompensaban con las esmeraldas del caos que hacían que en Moebius volviera a reinar la paz completa.
Sonic logró con este primer videojuego un plataformas capaz de mirar a la cara a Mario, de contener un concepto fresco, dentro de un género tan trillado cómo el de las plataformas, pero espejo en el que muchos se miraron para crear sus obras.
El legado fan que ha dejado Sonic durante estos 24 años ha sido increíble. En Internet podemos encontrar multitud de covers de la banda sonora, remixes, y un sinfín de pixel art que demuestran que muchos siguen amando aquellos "vetustos" píxeles que muchos veíamos con asombro en nuestros televisores de tubo.
Queremos destacar uno de esos trabajos, ya que precisamente uno de ellos es de producción totalmente española. La conocida artista Maya Pixelskaya ideó una de las escenas más recordadas de Sonic, y decidió plasmarlo en el sorprendente programa 24 quilates de Discovery Max, ¿quieres saber cuál fue su idea? (empieza en el minuto 5).
El resultado, al que agradecemos a la propia Maya por cedernos las fotos, es la mítica escena en la que Sonic es atacado y pierde todos los anillos, que en este caso son de oro real, y a pesar de que sea joyería, es una buena muestra de lo mucho que los fans recuerdan con cariño especial este primer Sonic. Recordarlo en el 24º aniversario parecía tener poco sentido, pero lo cierto es que todos los que añoramos las sensaciones que nos hizo sentir este primer juego, esperamos que Sega se saque de la manga un juego a la altura, ya que no todos perdimos la esperanza. ¿Quizás 25 años después?
