Road to BlizzCon 2015

Praga se convierte en la capital europea de los e-Sports de los juegos de Blizzard para ofrecernos un fin de semana al que no le han faltado grandes partidas y mucha emoción.
Road to BlizzCon 2015
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Este pasado fin de semana ha tenido lugar la European Road to BlizzCon 2015, el evento de e-Sports de juegos de Blizzard más importante de Europa, donde se han decidido los jugadores y equipos que asistirán a la BlizzCon el próximo mes de noviembre para competir por el ansiado título del mundo contra los representantes de América y Asia.

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Road to BlizzCon 2015

La competición tuvo lugar en el O2 Arena, un gigantesco y moderno estadio situado en la histórica ciudad de Praga (República Checa) con una capacidad de hasta 18.000 visitantes. Para la ocasión, Blizzard organizó múltiples actividades con las que los fans pudieron entretenerse más allá de la propia emoción que supuso ver competir en directo a los mejores jugadores profesionales de nuestro continente de World of WarCraft, Hearthstone: Heroes of WarCraft y el reciente Heroes of the Storm.

Las actividades

Entre ellas la más destacada y exitosa de todas fue la presencia de 120 ordenadores (divididos entre dos stands distintos) con Overwatch, el próximo y esperado título de acción en primera persona que la compañía californiana está preparando. Las colas para probar el juego fueron tan numerosas como ágiles, por lo que todo el que quiso jugar pudo hacerlo sin necesidad de esperar demasiado mientras de fondo tenían lugar los partidos.

Por otra parte, también pudimos participar en una peculiar caza del tesoro buscando Goblins del Tesoro por todo el recinto, aunque en nuestro caso concreto no tuvimos demasiada suerte a la hora de encontrarlos, por lo que no pudimos llevarnos ninguno de los muchos regalos y premios que esperaban a quienes fueran capaces de dar con ellos.

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Entre otras actividades, también hubo sesiones de firmas con los jugadores profesionales, cosplays (algunos realmente impresionantes), la posibilidad de hacerse una foto con el diseño de una carta de Hearthstone, una zona para crear pósters y pancartas de ánimo para los equipos, un stand para pintarse la cara y un desafío en el que se nos retó a conseguir cuatro brazaletes participando en eventos concretos.

Además, el sábado pudimos disfrutar de un partido de exhibición del prometedor StarCraft II: Legacy of the Void. En él nos permitieron echarle un vistazo al nuevo Modo Arconte (donde los dos jugadores de un equipo controlan al mismo ejército) y a las nuevas unidades Terran y Zergs (estos últimos se acabaron llevando ambas partidas). Por desgracia, la retransmisión sufrió algunos problemas técnicos que provocaron que todo se viera con constantes tirones y saltos en la imagen, aunque los enfrentamientos fueron realmente interesantes.

El camino a la BlizzCon

Pero centrémonos en lo verdaderamente importante del evento: los partidos oficiales.

El sábado pudimos asistir a las finales de la fase de grupos y a las semifinales de los tres juegos protagonistas del fin de semana: World of WarCraft, Hearthstone y Heroes of the Storm.

En el caso de las Arenas del popular MMORPG de Blizzard había 100.000 dólares en juego y de los ocho equipos en liza, solo los tres primeros conseguirían su deseado pase a la BlizzCon. La mayoría de ellos eran de Solari Gaming (la mitad de hecho), donde nos encontramos con que sus grupos Blue y Red consiguieron abrirse paso en duros y reñidos combates hasta la final, garantizando el pase de ambos a la fase internacional en California. El ticket restante para el esperado evento fue directo a las manos de Three Languages One Team, quienes consiguieron hacerse con el tercer puesto.

Si bien los partidos que se jugaron fueron muy emocionantes, tensos y con algunas resoluciones inesperadas, y los jugadores demostrando por qué son los mejores de Europa con jugadas realmente buenas y un dominio de sus clases que ya quisiéramos muchos de nosotros (por cierto, parece que los Druidas Resto siguen siendo los más populares entre los profesionales a la hora de escoger a un curandero para su equipo), a nivel de público ha sido el título que menos fans ha conseguido congregar (y con mucha diferencia), probablemente por la dificultad que entraña seguir estos duelos respecto a los otros dos.

En lo referente a Hearthstone, eran 25.000 dólares los que estaban en juego y de sus ocho contendientes serían los cuatro primeros los que obtendrían su pase a la BlizzCon. La mayoría de los enfrentamientos que tuvieron lugar se acabaron resolviendo con devastadores e incontrarrestables combos tras largos y tensos turnos en los que cualquier acción o jugada era rápidamente anulada. De todos ellos solo Neirea (sin duda, el jugador más imprevisible del torneo y el que más veces pilló por sorpresa a sus oponentes) y ThijsNL consiguieron llegar a la gran final, aunque Lifecoach y Ostkaka también se clasificaron para la BlizzCon a pesar de perder en semifinales.

Finalmente llegamos a Heroes of the Storm, indiscutiblemente el juego más exitoso del evento y el que más expectación ha generado, ya que se trata del primer torneo que se realiza sobre él desde que se lanzara de forma oficial el pasado mes de junio. Esta competición tenía 176.000 dólares en juego para repartir entre los diversos puestos y desde el principio hubo dos equipos que supieron dominar con mano firme cada partida: Team Dignitas y Natus Vincere (NaVi), por lo que no les costó demasiado llegar a la final y hacerse con sus respectivos pases a la BlizzCon. Destacar que rara ha sido la partida en la que no se ha optado por una configuración de equipo que incluyera dos tanques, lo que se ha traducido en unos resultados más que evidentes.

Las finales

Con los equipos y jugadores que se habían ganado su pase a la BlizzCon ya decididos, solo quedaba una cosa por resolverse: los campeones de Europa. Las finales de los tres juegos tuvieron lugar el domingo y a diferencia del día anterior, estas no coincidieron en el tiempo para que nadie se perdiera ninguna de ellas.

El día comenzó con las finales de las arenas de World of Warcraft, enfrentando a Solari Gaming Blue y Red. Las partidas fueron larguísimas y muy sufridas, con muchísimos momentos en los que parecía que alguien iba a morir y con algunas jugadas maestras que consiguieron poner al público de pie ante la coordinación y la habilidad que los jugadores demostraron. De hecho, el ganador no se decidió hasta la última ronda, ya que ambos equipos llegaron a un agónico dos a dos.

Al final, Solari Gaming Blue consiguió alzarse con la victoria tras una ronda final sorprendentemente corta y que duró un suspiro tras conseguir quitarse de en medio a uno de sus tres rivales en un devastador ataque coordinado, sentenciando de este modo la final más reñida y emocionante de este Road to BlizzCon.

Neirea y ThijsNL tampoco nos decepcionaron en la final de Hearthstone: Heroes of WarCraft, con un duelo muy interesante en el que ambos jugadores usaron mazos de Druida, Brujo y Guerrero. De hecho, ambos empezaron la primera ronda con este último mazo, ofreciéndonos una batalla muy igualada hasta que Neirea le dio la vuelta de una forma espectacular al realizar en un solo turno un brutal ataque de casi 40 puntos de vida, destrozando a ThijsNL en este primer round.

Sin embargo, lejos de desmoralizarse y de perder la concentración, ThijsNL consiguió llevarse la siguiente partida y a partir de ahí ya no volvería a perder ninguna más gracias a una serie de jugadas y estrategias que dejaron prácticamente sin opciones a su oponente, a quien nada terminaba de salirle como pensaba que lo haría, lo que le valió para acabar llevándose la copa del campeón y el primer premio.

Blizzard dejó para el final la atracción principal del evento: la gran final de Heroes of the Storm, un partido que consiguió llenar hasta los topes los asientos de la zona en la que se celebraba (es decir, medio estadio) y en el que se respiró muchísimo más ambiente que en cualquier otro momento de la competición.

La batalla entre Team Dignitas y Natus Vincere prometía ser muy igualada, con "bans" muy bien escogidos por ambos equipos para asegurarse de que sus rivales no pudieran sacar sus mejores armas. La primera ronda tuvo lugar en La Tumba de la Reina Araña, probablemente el mapa más largo y lento de todo el juego. Nada más comenzar, NaVi consiguió anotarse una baja, y a partir de ahí empezó a encadenar varias cada poco tiempo de la partida, algo que le permitió situarse en una posición ventajosa sobre sus rivales y dominar los objetivos del mapa para invocar arañas con las que presionar las líneas.

Team Dignitas luchó para evitar la derrota y no fueron pocos los momentos en los que estuvieron a punto de darle la vuelta a la situación con unas muy buenas batallas de equipo (team fights), pero al final se vieron obligados a pasar a la defensiva ante el agresivo estilo de juego de sus enemigos, algo que acabó por sentenciar su derrota en un espectacular combate en su propia base.

Si bien en esta primera partida dio la impresión de que Dignitas podía remontar en cualquier momento con una buena jugada, esta sensación desapareció completamente en las dos siguientes rondas, donde los chicos de NaVi arrollaron a sus rivales y no les dejaron hacer prácticamente nada, machacándoles sin piedad, dominando todos los objetivos de los mapas (Santuario del Dragón y Conflicto Eterno) con mano de hierro, sacándoles tres niveles de ventaja y, en definitiva, castigándoles con una paliza histórica y de las que duelen de verdad en una final.

El mejor combate, sin duda alguna, fue el último, cuando los chicos de NaVi nos sorprendieron a todos con una configuración de equipo tremendamente peculiar: Uther, Kerrigan, Carnicero, Falstad y Abathur. No sabemos si querían probar algo en concreto, dar espectáculo para satisfacer a su público o simplemente confiaban mucho en su victoria, pero lo cierto es que Team Dignitas tampoco tuvo nada que hacer y recibieron tortas hasta en el DNI, demostrando que no hay necesidad de recurrir a los mismos personajes de siempre para ganar (el torneo estuvo plagado de Leorics, Uthers, Jainas, Kael’thas, Johannas y demás personajes considerados "potentes").

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Con esto se puso punto y final a un fin de semana en el que los fans de Blizzard hemos disfrutado de grandes partidas, de un gran ambiente, de una puesta en escena espectacular y que demuestra lo en serio que va la compañía con hacer de sus juegos unos grandes del mundo de los deportes electrónicos y de mucha diversión y emoción.

Si os perdisteis el evento, como ya habréis visto, en este artículo podréis encontrar los vídeos con todos los partidos que se disputaron, por lo que si sois jugadores habituales de algunos de estos juegos, os recomendamos que les echéis un ojo, ya que os aseguramos que se aprende mucho de ellos. Mientras tanto, no nos queda otra que esperar a la BlizzCon para descubrir qué nuevas sorpresas nos tiene Blizzard reservadas (crucemos los dedos para que desvelen por fin la fecha de la beta de Overwatch) y de paso, animar a nuestros equipos favoritos para que se proclamen como los campeones mundiales en la que será su gran prueba final.

Carlos Leiva
Redactor
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