- Crítica de Dungeons & Dragons: Honor entre ladrones - Una aventura de pura fantasía
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Dungeons & Dragons: Honor entre ladrones esta cada vez más cerca de estrenarse en salas de cine. Paramount Pictures tuvo un 2022 de escándalo y sigue demostrando ser una de las compañías cinematográficas más punteras en lo que respecta a elegir proyectos de éxito. Tras charlar con John Francis Daley y Jonathan M. Goldstein, directores del largometraje, y con Jeremy Latcham, productor del proyecto, tuvimos la oportunidad de sentarnos frente a Chris Pine, Michelle Rodríguez, Justice Smith y Sophia Lillis, los principales protagonistas de esta nueva historia de Dragones y Mazmorras que aterriza en salas el 31 de marzo. Del mismo modo que con los cineastas de la película, nos aventuramos a preguntar si han jugado alguna vez al juego de mesa de Hasbro, y ante eso Pine toma la iniciativa y responde de forma muy explayada.
Los protagonistas de la película de John Francis Daley y Jonathan M. Goldstein jugaron juntos al juego de Wizards
"Sí, totalmente. He jugado mucho con mi familia, mi sobrino es un gran jugador, ha jugado con el mismo grupo de chicos durante seis años y escribe sus propias campañas y dibuja sus propios mapas. Yo juego con mi familia; con mi madre, mi hermana y mi sobrino. También hemos jugado entre el elenco en esta película. Así que he tenido contacto con él. Ciertamente no soy un experto, pero he jugado bastante, sí", nos decía Pine con bastante ímpetu. El conjunto de actores del filme pasaron bastantes horas jugando juntos para comprender las dinámicas del juego, conocer las diferentes clases, su naturaleza, sus motivaciones, etc. Eso nos llevó a plantear lo siguiente: habiendo jugado al título y conociendo cómo son las diferentes clases, ¿pudieron desarrollar libremente el carácter de sus personajes aportando su experiencia de juego?
La respuesta se desvió un poco, pero Michelle Rodríguez aseguró que Chris Pine sí había podido trabajar bien ese aspecto (bromeando), puesto que ella había tenido que ponerse muy en forma y comer una dieta centrada en proteínas para dar vida a su bárbara: "Creo que Chris divirtió más con eso que yo, lo mío fue más físico", empezaba explicando Rodríguez. "Con Holga se trataba más de construir su masa porque pesa más que yo y es todo músculo. Tuve que hacer mucho ejercicio y comer, a lo cual no estoy acostumbrada", concluía la actriz, asegurando que tuvo que trabajar muy duro para poder encarnar a Holga. Aunque eso tuvo su recompensa, puesto que protagoniza en la película algunas escenas de acción espectaculares. Chris Pine mantiene el tono de comedia de su compañera y entonces desvela lo que él hizo para preparar a su bardo.
"Yo tuve que sentarme un montón y ver cantidad de dibujos animados. Así que mientras ella estaba en el gimnasio yo solo estaba pasando el rato", añadía Pine. "Sí, es muy bueno con las palabras", respondía Rodríguez. En corto, parece que los actores lo pasaron de maravilla preparando el proyecto, pero igual que los directores sienten mucho respeto por ese increíble universo de fantasía en el que se ven envueltos, catalogándolo como el verdadero protagonista de la historia: "Lo divertido de esto es que creo que realmente la estrella del espectáculo es el mundo y lo mejor que podemos hacer los actores es estar al servicio de la historia con los personajes", aseguraba Pine.
"No interpreto un papel que esté tan lejos de mí mismo y creo que, en muchos sentidos, se representa ese espíritu de lo que es jugar. Creo que al final hay muchas cualidades en estos personajes que son muy humanos y muy normales. Es como un grupo de niños jugando Dungeons and Dragons que han sido absorbidos por una partida y vuelven con una armadura y una capa", concluía. Dungeons and Dragons: Honor entre ladrones ha apostado por escribir una partida normal y corriente y pasarla a la gran pantalla. Se han tomado los elementos básicos del juego de mesa y se han traducido al lenguaje cinematográfico, lo que no es sencillo porque, como bien indica Pine, al final cada jugador pone mucho de sí mismo en cada encuentro y Dungeons and Dragons puede tornarse una obra muy personal.
Honor entre ladrones estira tanto como puede de efectos prácticos y artesanales y rechaza abusar del CGI
De hecho, el propio Justice Smith destacaba también que le había encantado interpretar al hechicero de la historia porque cumplía su sueño; poder mover cosas con la mente (aunque fuera dentro de una ficción): "Fue muy divertido. Me sentí como un niño. Siempre quise hacer un gesto vago en una dirección hacia un objeto que reaccionase a mi magia. ¿Sabes que cuando estás sentado en el sofá con el mando está demasiado lejos y querrías tener telequinesis para cogerlo? Eso es lo que siempre he querido hacer". A su vez, tanto Smith como Sophia Lillis, aseguraron que en Honor entre ladrones no se usó tanto CGI como se cree.
En un momento donde el CGI está siendo criticado bastante, sobre todo a causa de los largometrajes y series de Marvel, los artistas dejaron claro que se ha realizado mucho trabajo artesanal con animatrónicos y decorados situados en el set: "Hubo muchos efectos prácticos, John y Jonathan [los directores] realmente priorizaron los efectos artesanales aquí", explicaba Smith. "Obviamente hay un procedimiento para esos momentos en los que simplemente no tienes más remedio que usar CGI, como con el gran dragón, pero solo era necesario para eso", continuaba Smith junto con aportaciones de Lillis. "Muchas de las cosas que ves en la película en realidad estaban en el set gracias a los animatrónicos".
Dungeons and Dragons: Honor entre ladrones se estrena el 31 de marzo en cines y por el momento la crítica está bastante contenta con la nueva ficción de los responsables de Noche de juegos. Chris Pine, Michelle Rodríguez y el resto del reparto se prepararon mucho para poder dar vida a las diferentes clases del juego de Hasbro de la mejor forma posible.
