NVIDIA confirmó hace unos días los resultados explosivos para su tercer trimestre fiscal con ingresos de 54.900 millones de dólares, marcando un crecimiento del 56 por ciento interanual que supera todas las previsiones de Wall Street. Jensen Huang, el jefe de NVIDIA, presentó los números después de asegurar 500.000 millones de dólares en pedidos anticipados para las arquitecturas Blackwell y Rubin, una cifra que eclipsa los 130.000 millones en ingresos totales del año anterior. Las acciones se dispararon un 18 por ciento durante el trimestre mientras los inversores celebraban la consolidación del dominio absoluto en el mercado de los procesadores para IA.
El chip Blackwell representa el salto generacional que la industria necesitaba. Las ventas del nuevo procesador aportaron entre 8.000 y 12.000 millones de dólares solo en el tercer trimestre, triplicando las estimaciones iniciales de los analistas. "Blackwell es la plataforma de IA que el mundo ha estado esperando, entregando un salto generacional excepcional", declaró Huang durante la presentación de resultados. La división de centros de datos alcanzó 48.000 millones de dólares, representando el 88 por ciento de los ingresos totales. Microsoft, Meta y Amazon lideran las compras masivas de procesadores para entrenar sus modelos de lenguaje.
El contraste con la competencia resulta demoledor. AMD ofreció el 10 por ciento de su compañía a OpenAI hace tres semanas en un intento desesperado por ganar cuota, pero las acciones subieron apenas un 35 por ciento frente al 200 por ciento que acumula NVIDIA en 2025. Los chips TPU de Google y los procesadores de Intel compiten en márgenes mucho más reducidos sin lograr igualar el rendimiento de Blackwell. NVIDIA controla el 90 por ciento del mercado global de procesadores especializados para IA, dejando solo migajas para el resto de fabricantes que luchan por sobrevivir en un sector donde el segundo puesto significa pérdidas millonarias.
Jensen Huang proyecta ingresos de 207.000 millones para 2026 después de asegurar 500.000 millones en pedidos anticipados que eclipsan todo lo visto
Las proyecciones financieras apuntan a un 2026 explosivo. Wall Street espera que NVIDIA alcance 207.000 millones de dólares en ingresos durante el próximo año fiscal, aunque los analistas de Bank of America consideran estas cifras conservadoras dado el volumen de pedidos confirmados. La compañía mantendrá márgenes de beneficio superiores al 74 por ciento gracias a la arquitectura Blackwell Ultra que llegará en el primer trimestre de 2026, seguida por Vera Rubin a finales de año. Microsoft invirtió 40.000 millones en infraestructura con NVIDIA durante octubre para asegurar un suministro prioritario.
Sin embargo, el debate sobre la burbuja de IA se intensifica. Gene Munster, de Deepwater Asset Management, advierte que las previsiones sólidas podrían desencadenar muchos temores de un gasto excesivo por parte de las grandes tecnológicas. OpenAI comprometió más de 1 billón de dólares en infraestructura desde mediados de 2025, gran parte dirigida a chips NVIDIA, pero Sam Altman reconoció pérdidas de 8.000 millones este año con solo el 5 por ciento de usuarios pagando por ChatGPT. Los inversores se preguntan cuánto tiempo pueden sostener Microsoft, Google y Amazon estas inversiones multimillonarias sin retornos claros, aunque por ahora nadie apuesta contra Jensen Huang y su dominio absoluto del mercado.
