Hollywood, eje del entretenimiento cinematográfico, está siendo consciente de lo que se juega en esta crisis. En Vandal hemos ido ofreciendo una cobertura sobre el impacto del coronavirus en la industria del cine y a comienzos de mes, publicamos un pequeño artículo en el que, tras el agujero económico dejado en China, se esperaban más de 2000 millones de pérdidas. Ahora las majors, tras programar retrasos y aplazamiento en los principales estrenos, comienzan a ser conscientes del perjuicio económico que la crisis sanitaria mundial puede hacerles.
Unas pérdidas de más de 20.000 millones de dólares
Son números muy grandes, pero según medios como The Hollywood Reporter, plausibles. Hollywood tendría que afrontar a la mayor crisis de su historia reciente, teniendo en cuenta que muchos de los grandes estrenos previstos para los próximos meses, muchos de ellos de Disney, se retrasan o aplazan de forma indefinida. Rodajes como Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings se han paralizado, con su director puesto en cuarentena. Para una empresa como la del ratón, cada día de aplazamiento en el rodaje le supone pérdidas de entre 300.000 y 350.000 dólares. Films como Un lugar tranquilo 2, o la nueva entrega de James Bond, harían a sus respectivas productoras dilapidar millones de dólares tras su retraso.
La taquilla mundial y estadounidense, que ha registrado el mínimo histórico en las últimas dos décadas, habla de pérdidas en los pasados dos meses de 7000 millones de dólares. Si la situación continúa hasta mayo, las pérdidas estimadas por Hollywood y la industria ascenderían a los 20.000 millones de dólares o incluso más. "Ahora mismo miles de nuestros empleados en todos los sectores de la industria del entretenimiento están sufriendo grandes reveses financieros debido a las medidas del gobierno", explicaba Matthew D. Loeb, directivo de la IATSE (Alianza Internacional de Trabajadores de Cine) al citado medio.
No obstante, aunque los ingresos en taquilla son una parte clara y evidente, la destrucción de empleo en la industria del cine puede ser desoladora en los próximos meses. Mientras las cadenas de cine cierran o suspenden parcialmente sus proyecciones, miles de trabajadores y empleados pueden perder sus puestos por la paralización absoluta.
"El cine y la televisión inyectan 49.000 millones de dólares cada año en el negocio local, y toda la industria del espectáculo aporta 2,1 millones de trabajos en la economía estatal", explica Loeb, que defiende el medio audiovisual como un músculo que en muchos estados como el de California es vital para mantener la economía.
"Los estudios económicos demuestran que los gastos en entretenimiento se extienden más allá de nuestra comunidad", añade en relación al tejido de la industria cinematográfica en muchas regiones de Estados Unidos. Si la situación sigue así, con una paralización total de las industrias, cines y rodajes, los números de Hollywood pueden quedarse muy cortos.
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