Aunque las historias del universo de Star Wars sucedan en una galaxia muy muy lejana, Lucasfilm y sus equipos de producción no solo inventan planetas y lugares imposibles a través de los efectos especiales. Muchas veces, pese a que no lo parezca, diversos lugares reales son filmados para la ocasión. En España, por ejemplo, una de nuestras playas más bonitas fue el hogar de Han Solo hace algunos años, y más recientemente les ha tocado el turno a nuestros vecinos portugueses tras acoger en la hermosa isla de Madeira a los responsables de 'Star Wars: The Acolyte'.
La isla de Madeira, en Portugal, ha sido protagonista durante casi una cuarta parte de 'Star Wars: The Acolyte'
La primera temporada de 'Star Wars: The Acolyte' ya ha concluido en Disney+ cosechando un éxito de audiencia -aunque no tanto de crítica- y durante sus ocho episodios hemos podido admirar en casi una cuarta parte de esta producción varias localizaciones emblemáticas de Portugal, como la mencionada isla de Madeira.
Para esta historia ambientada en la época de la Alta República que sucede un siglo antes de lo narrado en 'La amenaza fantasma', la showrunner Leslye Headland y su equipo de filmación rodaron mayoritariamente en los estudios Shinfield de Berkshire, en Londres, pero también escogieron ciertos paisajes reales y exteriores de Europa. Precisamente, la isla de Madeira, situada al norte de las islas Canarias, es uno de los rincones que se convirtieron dentro de la ficción en el planeta Khofar o el hogar del maestro Jedi Kelnacca.
El propio productor de 'The Acolyte', Damian Anderson, explicó en su momento para Expresso la decisión de escoger Madeira como lugar de rodaje con estas palabras: "Madeira es un lugar increíble en muchos aspectos, no sólo por los lugares. La gente, el medio ambiente, la isla, [todo] es espectacular", reconocía el productor elogiando la localidad portuguesa y, tal vez más importante, afirmando que resultaba clave para ambientar la serie: "Rápidamente nos dimos cuenta de que Madeira era el único lugar que nos ofrecía la mayoría de los lugares que necesitábamos encontrar en una sola isla".
Localidades como el bosque de Fanal (declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO), Ribeira da Janela, Porto Moniz y Caniçal acogieron el rodaje de 'The Acolyte' e incluso provocaron que el clima subtropical impredecible de la zona contribuyese a la forma en la que el equipo narró la historia.
"Tuvimos días increíbles, nos levantamos al día siguiente con el cielo nublado y luego las nubes desaparecieron. Integramos eso en la historia. No era sólo una ubicación estándar, nos dio la capacidad de adaptarnos a la naturaleza en lugar de que la naturaleza se adaptara a nosotros", recuerda Anderson.
El rodaje de 'The Acolyte' también se llevó a cabo en islas cercanas y más pequeñas como Porto Santo, Desertas y Selvagens, aunque evidentemente la joya de la corona es Madeira, la segunda isla más grande de Portugal que se caracteriza por sus impresionantes montañas volcánicas, sus profundos valles y las costas empinadas. "El océano y el estilo de los lugares que elegimos retratan la soledad y el aislamiento de ciertos personajes", asegura Anderson.
En definitiva, un asombroso paisaje isleño, de los más populares y turísticos del país, que a partir de ahora seguramente lo será todavía más tras haber acogido una producción de Star Wars de tal calibre.
