Cuando uno piensa en Superman puede ver la enorme S en el pecho, la capa roja, superfuerza, que vuela... el kit completo de esos superhéroes cuyo ocaso cinematográfico parece próximo. Pero pocos igualan al Hombre de Acero en lo que a su catálogo de poderes se refiere, entre los que figura uno que muchos ni conocerán: el beso de la amnesia.
Superman puede borrar la memoria con un beso
En 1980 vio la luz Superman 2. Richard Donner venía de dirigir la primera película, y aún le faltaban un par de años para Lady Halcón (dadle una oportunidad, por cierto). Christopher Reeve y Margot Kidder repetían como Superman y Lois Lane en una historia muy lejana de las reinterpretaciones más oscuras del personaje. Aquí se enfrentaba al general Zod (Terence Stamp, uno de esos actores que nació con cara de villano) y otros dos kryptonianos.
Pero, yendo al meollo de la cuestión, uno de los momentos más polémicos de la cinta, en lo que a los fans se refiere; es el beso que borró la memoria de Lois.
Consciente de la carga que iba a suponer que conociera la identidad secreta de Clark Kent, éste decide besarla y, simplemente, hacer que se olvide de lo que sabe. Lo más increíble del asunto es que no fue una invención de la cinta... bueno, no del todo.
En 1963se publicaba Action Comics #306. En la aventura que se narra, de una manera similar, nos encontramos con que Lois sabe que Clark es Kal-El. Así que hace lo normal, fiesta navideña, muérdago y, en palabras del reportero, "le va a fundir los plomos" con un beso y lo consigue. Es una de esas historias de la edad de plata de los cómics que no creemos vayamos a ver en las próximas aventuras del kryptoniano.
No es tanto que sea "un superpoder" (al menos en esta viñeta) sino como el hecho que, de alguna manera, parece que el beso disuade a Lois de que realmente Clark y Superman son el mismo, al menos es la impresión que transmite. Como se trata de una de esas aventuras extrañas de hace décadas, suponemos que es algo que es mejor, simplemente, olvidar.