El fenómeno conocido como 'Barbenheimer', que ha llevado a millones de espectadores a los cines para ver Barbie -la película más taquillera del año- y Oppenheimer, el nuevo éxito de Christopher Nolan, ha arrasado en julio y agosto. Ambas cintas han conseguido sus objetivos y han hecho ganar millones de dólares a Warner y Universal, respectivamente. Pero una de las grandes perjudicadas por este binomio fílmico ha sido Misión Imposible: Sentencia Mortal Parte 1, la séptima entrega de la licencia liderada por Tom Cruise, que no ha logrado sus objetivos comerciales y que le ha faltado el brillo de otras secuelas anteriores por la competencia que se ha librado en salas. Así lo ve su director, Christopher McQuarrie, que cree que todo esto es bueno para el cine en términos generales.
Tom Cruise se rinde ante Margot Robbie: La séptima entrega de Misión Imposible no brilla como debería pero su director no le echa la culpa a Barbie
"No podría estar más encantado. Tom y yo hablábamos muy en serio cuando dijimos que salimos y compramos las entradas. Y lo volví a repetir en Twitter, en mi última publicación", relata McQuarrie en declaraciones recogidas por ComicBook. "No podría estar más contento por Margot Robbie, quien creo que tiene un talento extraordinario, una megaestrella. Y estoy encantado por la forma en la que Barbie confirma todo esto", continúa. "Espero que más de uno tome nota", asevera.
"No podría estar más contento por Greta. Y por Chris Nolan... ¿quieres hablar de alguien que lo tenía difícil? ¿Quieres hablar de un tipo cuya película duraba más de tres horas? Un drama con clasificación para adultos y con desnudez que te deja "devastado", entre muchas comillas. Es difícil de vender. Es una estrategia de marketing increíble. Y ganó. La golpeó como Babe Ruth y ganó. Dios lo bendiga. Felicitaciones. Es fantástico", proseguía el director, que piensa que ha tenido algo de competencia este verano, pero que es bueno para la industria. "Y es un triunfo para las películas originales. Es un triunfo para las películas que no son secuelas. Y en el caso de Oppenheimer, un drama. Lo que solían ser las películas antes. Tom y yo, cuando la vimos, nos miramos y nos dijimos: 'Todo es cuestión de calidad'", concluía.
Lo cierto es que Misión Imposible: Sentencia Mortal, que sufrió durante el rodaje los efectos del coronavirus, problemas con Paramount y más, no ha brillado como se esperaba. Aunque la cinta atesora calidad, no ha rendido en taquilla. Ha recaudado unos 560 millones de dólares con un presupuesto que supera los 300 millones más publicidad, algo que ha llevado a la major a perder unos 40 millones de dólares, a lo que habría que sumar otras cantidades anexas en términos de distribución y costes adicionales. Entre las explicaciones radica la falta de interés en una cinta que se ha dividido en dos, la mala fecha escogida para su llegada a cines y un agotamiento general de la saga entre el público. Cruise no ha logrado repetir el éxito de Top Gun: Maverick, su último gran triunfo en salas.
