Star Wars: El despertar de la Fuerza tuvo un camino algo complicado. El séptimo episodio cinematográfico de la saga de George Lucas, el primero bajo el amparo de Disney tras la compra del estudio, acabó generando ciertas fricciones entre J.J. Abrams y Lucasfilm. Director y productora tuvieron varios desacuerdos creativos sobre la trama de este capítulo de Star Wars, siendo la destrucción de uno de los planetas el punto álgido de estas discusiones. Pablo Hidalgo, ejecutivo creativo de Star Wars y responsable del Story Group, ha compartido una divertida anécdota (vía ComicBook).
Abrams y Lucasfilm discutieron sobre Coruscant, la capital de la Nueva República y su posible destrucción
Abrams y Lucasfilm tuvieron largas sesiones de debate de cara a ubicar la capital del Universo de Star Wars, ya que en el guion final este planeta debía ser destruido por la Primera Orden. Para la productora era una decisión importante, ya que condicionaría para siempre el futuro desarrollo de películas, series y productos creativos. En el canon de Star Wars, la ciudad capital de la República era Coruscant, algo que continuó cuando el Imperio Galáctico ascendió y Palpatine se proclamó Emperador. Tras este cambio político, el planeta pasó a denominarse Centro Imperial y así continuó hasta el final de la Segunda Estrella de la Muerte en El retorno del Jedi.
Sin embargo, cuando se trabajó en la nueva trilogía bajo el amparo de Disney y se le entregó a JJ Abrams el mando para el primer episodio cinematográfico en muchos años, el cineasta dejó caer que quería que Coruscant fuera reclamada como la capital de la Nueva República, solo para explotarla con la nueva arma de la Base Starkiller de la Primera Orden. Sin embargo, Lucasfilm tuvo miedo. Para ellos era un gran problema el lidiar con la destrucción de Coruscant por parte de Abrams, lo que llevó a un desacuerdo creativo que estuvo generando tensión durante semanas. "Básicamente, Bad Robot y JJ Abrams quería que Coruscant explotara. Lucasfilm no lo quería así", comenta Pablo Hidalgo.
"Así que Hosnian Prime fue el término medio insatisfactorio", añadió Hidalgo. "Debería decir 'algunas personas en Lucasfilm', porque las empresas no tienen puntos de vista únicos", concluye el creativo. El tema de Hosnian Prime, que se ha justificado como una capital diseñada para establecer un nuevo punto de vista dentro del gobierno galáctico, permitió que la República llegase de una forma distinta a los habitantes de todos los mundos bajo su mandato y amparo. Para muchos fue una decisión un tanto extraña, ya que no tenía sentido temáticamente pues se conquistó Coruscant con sangre, sudor y lágrimas. Se justificó de forma inteligente confirmando que Hosnian Prime fue una antigua planta de fabricación de armas y liderada por millones de esclavos atrapados por el Imperio, que se convirtió en la nueva academia de vuelo de Wedge Antilles cuando se liberó, un poco antes de ser votada como la capital.
La trilogía de precuelas de Star Wars ha sido objeto de una serie de cambios creativos muy traumáticos, con películas y conceptos que no vieron la luz y que, en otros casos, generaron mucha polémica y agrios debates. Por eso, como el propio Abrams dice, tener un plan a la hora de escribir y dirigir una trilogía es importante.
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