Si hay alguien que revolucionó a los fans de Marvel con su debut esa fue Florence Pugh y su divertida y descarada Yelena Belova, a quien pudimos conocer en Viuda Negra junto a Scarlet Johansson. Sin embargo, todo hay que decirlo, el nombre de Pugh no fue el primero en sonar para dar vida a esta viuda. Los primeros rumores hablaban de Emma Watson para sumarse al UCM con este papel... pero las cosas terminaron inclinándose en favor de la protagonista de Midsommar. ¿Por qué? Os contamos cómo Pugh consiguió ser nuestra Yelena.
Viuda Negra: Cómo el papel de Yelena Belova fue para Florence Pugh
Era el año 2019 cuando empezaron a sonar las primeras informaciones relacionadas con la producción de Viuda Negra, que estaba arrancando con su puesta en marcha. Es entonces cuando se dijo que Emma Watson era la opción preferida de la directora Cate Shortland para ser Yelena Belova, mientras que los ejecutivos de Marvel Kevin Feige y Brad Winderbaum parecían apoyar la idea.
Gracias a su experiencia en sagas como Harry Potter, así como en La Bella y la Bestia o la nueva versión de Mujercitas, los ejecutivos esperaban que Watson pudiera aportar a Yelena un giro distinto al personaje. Sin embargo... fue el nombre de Florence Pugh el que finalmente se puso encima de la mesa, superando a otras aspirantes al papel: Saoirse Ronan, Alice Englert y Dar Zuzovsky también estaban entre las candidatas.
Pero ninguna era como Florence Pugh
Hubo dos trabajos de Pugh que consiguieron convencer a los ejecutivos de Marvel para terminar de ficharla a ella como Yelena Belova: si bien a la directora Shortland se declaró fan de su Lady Macbeth, desde un sentido más técnico también valoraron muy positivamente su actuación en Peleando en familia, donde interpretó a Saraya-Jade Bevis. Su papel como la retirada luchadora profesional demostró que Pugh tenía la capacidad para lidiar con un papel muy exigente a nivel físico, al tiempo que mantenía la naturalidad y el carisma que hacen de Yelena un personaje único.
A su vez, era importante que Pugh fuera capaz de estar a la altura de la energía de Johansson, teniendo en cuenta que ambas interpretaban a dos personajes que mantienen una relación de hermanas. Es más: necesitaban a alguien que fuera capaz de soportar sobre sus hombros el legado de Natasha Romanoff. En este sentido, también jugó a su favor sus antecedentes para la gimnasia y el baile, lo que permitió que la joven actriz realizara la mayoría de sus escenas de acrobacia. En otras palabras: parecía que había nacido para encarnar un personaje así.
La propia Pugh también puso sus propias condiciones para interpretar a Yelena: por ejemplo, se negaba a seguir un estricto régimen para encajar en los estándares de Hollywood. Ella misma supervisó su propia dieta y entrenamiento, y se llevaba al set de rodaje comida casera. Con este temperamento, habilidades y sentido del humor, la convirtieron en la candidata idónea para ser Yelena Belova. Su actuación le valió incluso para ser considerada para los Oscars.
