Es la niña de mirada macabra que, mientras un incendio se desarrolla al fondo de la imagen, ella observa tranquilamente a cámara. La protagonista de esta fotografía es Zoe Roth, y su meme se conoce como Disaster girl. Después de que la hayamos visto millones de veces por internet y las redes sociales, Roth ha podido ganar dinero gracias a los NFT, los Non-Fungible Token o la revolución del arte digital. Una moda a la que también se han sumado youtubers españoles como Willyrex.
Disaster girl ahora es un NFT
Zoe Roth, que ahora cuenta 22 años, tenía cuatro años cuando su padre Dave le hizo esa foto enfrente de una casa en llamas. La imagen ganó un concurso de fotografía que consistía en capturar emociones. Cuando la revista del concurso llegó a su casa y Zoe vio su propia cara traviesa estampada en la foto, le preguntó a su padre: "¿Soy famosa ahora?" Y nosotros le diremos: no, en ese momento no eras todavía Disaster Girl. Eso ocurriría a finales de 2008, cuando la expresión de Zoe serviría para ilustrar toda una ristra de chistes en internet.
El pasado mes de febrero, mientras Zoe termina sus estudios en la Universidad de Carolina del Norte en Chapen Hill, nuestra protagonista recibió la propuesta de vender su foto como un NFT. Este término se aplica a esas piezas de arte digital que, si bien no existen en la realidad y no son físicas, pueden comprarse, poseerse y distribuirse gracias a una serie de certificados digitales.
Zoe y su familia, tal y como apuntan desde The News & Observer, necesitaron algunas semanas para decidirse. Casos como la venta del meme Bad Luck Brain, que se vendió por unos 37.000 dólares; o el de Laina Morris y su Novia Psicópata, consiguieron que los Roth finalmente aceptaran convertir la fotografía en un NFT: así recuperan el control sobre la propiedad de la imagen y ganan dinero de paso.
La subasta para el NFT de Disaster Girl se llevó a cabo en la página web Foundation, el pasado 16 de abril. Estuvo en el aire 24 horas, hasta que un usuario llamado 3fmusic compró la imagen por un total de 180 Ether (la criptomoneda Ethereum), que se traducen en unos 470.000 dólares. Una cifra que no está nada mal teniendo en cuenta los años de chistes y bromas que ha protagonizado Zoe.
La jugada maestra de Disaster Girl
¿Lo mejor de la historia? Zoe y su padre Dave han codificado el token de Disaster Girl para que, cada vez que alguien revenda el NFT, ellos reciban el 10% de esa venta. Por primera vez, Zoe siente que tiene algo de control sobre su propia imagen: "Poder venderla solo nos muestra que tenemos algún tipo de control, algún tipo de agencia en todo el proceso”, dijo Zoe. Mientras nuestra protagonista está buscando una organización benéfica a la que donar el dinero, Dave usará las ganancias para arreglar el aire acondicionado de su Honda Civic.
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