Rockstar es una creadora de videojuegos de sobra conocida por todos los aficionados al mundillo que últimamente está en el foco de la actualidad porque en unas pocas semanas vamos a poder ver el primer tráiler de GTA 6 (o como finalmente quiera llamarse su próximo Grand Theft Auto).
Esa conocida saga y, en general, la mayoría de los juegos del estudio americano, siempre se han visto rodeado de polémica por ser muy explícitos, su violencia, lenguaje malsonante y situaciones extremas aunque el pico máximo de la polémica de Rockstar no está vinculado con GTA sino con Manhunt, un videojuego que hoy cumple 20 años desde que llegó a convulsionar el mundo.
20 años del juego más polémico de Rockstar
No es difícil imaginar por qué Manhunt es un juego que se convirtió en polémico desde el minuto uno comenzando por su trama en la que encarnamos a un violento preso que iba a ser condenado a la inyección letal y al que, tras un soborno a las autoridades, perdonan la vida para convertirlo en el protagonista de una película snuff, teniendo que sobrevivir a lo que tiene preparado El Director si quiere ganar su libertad, iniciando una trama bastante interesante, cruda y que ya es violenta de por sí.
Esto, unido a la violencia explícita que realizamos durante toda la partida (sobre todo con las ejecuciones en forma de ahogamientos, contusiones graves...) incluso recompensándonos con mayor puntuación al finalizar cada nivel o capítulo en función de esta violencia y a todo el look de película snuff que evidentemente casa perfectamente con la trama del título de Rockstar North, hicieron que un muy buen juego de sigilo y terror se convirtiese en un título tremendamente polémico que no tardó en ser criticado tras su lanzamiento, con la propia Rockstar confesando que habían cruzado una línea y que en ocasiones esta violencia explícita les había incomodado.
De hecho, el videojuego también estuvo vinculado a un asesinato en el Reino Unido, el conocido caso de Warren Leblanc que arrebató la vida de un amigo de 14 años, con los padres de la víctima y la prensa asegurando que Manhunt habría estado relacionado con el asesinato, algo que finalmente se demostró que no era cierto con las autoridades apuntando a que el móvil del delito fue el robo e incluso asegurando que precisamente la víctima y no el agresor era la que tenía una copia de Manhunt.
Por otro lado, Rockstar se defendía de las acusaciones populares esgrimiendo que el juego estaba catalogado para mayores de 18 años por lo que los menores no podrían jugarlo. Aun así, pese a la defensa de Rockstar y que las autoridades exculparon el juego, tiendas como GAME lo retiraron de forma temporal de sus estanterías y la polémica volvió a reavivarse de forma notable cuando se anunció su secuela: Manhunt 2.