Durante la tarde de ayer se produjo el primer ataque de una guerra ya abierta entre la FIFA, EA Sports y algunos de los fútbolistas más importantes del mundo (y sus representantes) por la gestión y el uso de los derechos de imagen de los jugadores en videojuegos como FIFA 21 que, cada ciertos años, acuerdan la cesión de los derechos de imagen de estos futbolistas con FIFPro (federación de futbolistas afiliada a la FIFA) y con los propios equipos o competiciones de todo el mundo.
Ayer Ibrahimovic acusaba a EA Sports de utilizar su imagen en FIFA 21 sin su consentimiento y apuntando a que él no conocía ninguna entidad llamada FIFPro y ahora este conflicto sigue adelante con la intervención de los agentes de los dos futbolistas que más ruido hicieron ayer con este asunto (Ibrahimovic y Bale) con Mino Raiola y Jonathan Barnett saliendo al paso para protestar contra las políticas de EA Sports con el uso de los rostros o nombres de los jugadores mientras que EA se defiende acusando a estos futbolistas y a sus agentes de utilizar su videojuego en una guerra de terceros contra FIFPro y FIFA.
FifPro and AC Milan do not have players individual rights as I’m sure you know and as we’ve told you many times @easports pic.twitter.com/dDT9LZ9Y5B— Mino Raiola (@MinoRaiola) November 24, 2020
Vayamos por partes, tras la polémica de ayer y la respuesta a Ibra de EA Sports (podéis leerla aquí) Mino Raiola ha salido a la palestra para asegurar que FIFPro y el ACMilan no poseen los derechos de imagen de los jugadores y que por lo tanto, la negociación de EA SPorts con estas entidades no es válida para incluirlos en FIFA 21, algo que Raiola comenta que es bien sabido por la desarrolladora de videojuegos ya que se lo han "dicho múltiples veces. Hace 10 años que me estáis esquivando en cuestiones de derechos de jugadores. ¿Quizás vais a responder ahora o solo en los juzgados", comenta el representante de Ibra en un tuit.
Por su parte Jonathan Barnett, representante de Bale, otro de los futbolistas que cargaba en el día de ayer contra EA, la FIFA y FIFPro, asegura que los jugadores no están recibiendo dinero por estos derechos de imagen aunque quita importancia al uso de EA y responsabiliza a la FIFA que está "publicando muchas reglas y regulaciones que dicen que velan por el interés de los jugadores pero obviamente no lo hacen".
@EASPORTS it is 10 years you are dodging me on the rights of players questions. Maybe now you will reply, or only in Court? @Ibra_official @GarethBale11 @footballforum01 @EASPORTSFIFA— Mino Raiola (@MinoRaiola) November 24, 2020
EA Sports apunta a que todo es un intento de "involucrar FIFA 21 en una disputa entre terceros"
Ante las diferentes acusaciones de futbolistas y representantes EA Sports ha emitido un comunicado en el que se defiende asegurando que tiene todos los derechos para utilizar la imagen de estos jugadores y apunta a que los agentes están utilizando FIFA 21 en una guerra que mantienen con la FIFA:
"Estamos al tanto de los distintos debates sobre la concesión de licencias a los jugadores en EA SPORTS FIFA. La situación actual que se desarrolla en redes sociales es un intento de involucrar FIFA 21 en una disputa entre una serie de terceros y en la que nada tiene que ver EA SPORTS. Para ser muy claros, tenemos los derechos contractuales para incluir el parecido de todos los jugadores actualmente en nuestro videojuego. Como ya dijimos, adquirimos estas licencias directamente de ligas, equipos y jugadores individuales. Además, trabajamos con FIFPro para asegurarnos el poder incluir tantos jugadores como podamos para crear el videojuego más realista. En estos casos, nuestros derechos de semejanza con los jugadores se otorgan a través de nuestro acuerdo de club con el AC Milan y nuestra asociación exclusiva que aún perdura con la Premier League, y que incluye a todos los jugadores del Tottenham Hotspur", sentencia EA Sports.
Los representantes de los jugadores, en contra de la nueva regulación de la FIFA
El origen del conflicto no parece estar relacionado con la nueva reglamentación que está preparando la FIFA y que tiene a los representantes en el punto de mira, ya que regulará y reducirá las comisiones que estos representantes pueden llevarse por los traspasos de jugadores, algo que no ha sentado nada bien entre los representantes de las estrellas más importantes del mundo.