Julie Uhrman, directora de Ouya, la compañía responsable de la miniconsola Android homónima, admite que han cometido "montones de errores" en todo el proceso de la consola, pero se ha comprometido a corregirlos y a aprender de ellos, aunque no descarta que cometan más.
En una línea de declaraciones poco habitual en la industria del videojuego, Uhrman admite que "hemos hecho muchas cosas mal. Hemos cometido montones de errores".
Atribuye estos problemas a, sobre todo, la inexperiencia, la juventud y lo novedoso del proyecto que habían planteado. "Algo que creo que es único de nosotros mismos, es que vamos a seguir cometiéndolos porque somos jóvenes, somos pocos y estamos avanzando rápidamente. Estamos creando este producto junto a vosotros. Hemos empezado con vosotros. Nos hacemos mejores cada día porque os escuchamos", afirma Uhrman.
La ejecutiva reconoce particularmente los problemas con la distribución inicial de la consola, problemas con el diseño del mando y algunas de sus líneas promocionales.
