Cada vez está más claro que Konami no va a hacer grandes esfuerzos para lanzar nuevos juegos, pero todo lo que sea relanzar parece ser de su agrado. Además de los juegos que está llevando a la retrocompatibilidad de Xbox One, la compañía nipona ha anunciado que va a lanzar varias colecciones para celebrar sus 50 años de historia. Estas colecciones abarcan títulos lanzados en recreativa, varias entregas de la saga Contra y varias de Castlevania.
Castlevania Anniversary Collection incluye ocho juegos, de los que por ahora se han revelado sólo cuatro (Castlevania (1987, NES), Castlevania III: Dracula's Curse (1990, NES), Castlevania II: Belmont’s Revenge (1991, Game Boy), Super Castlevania IV (SNES, 1991)). Con este anuncio, nos hemos acordado de un título bastante interesante que podría haber tenido relación con esta serie. Os contamos la historia de Cryptid Hunter: The Legend of Kipling McKay, un título de acción y aventuras originalmente previsto para PlayStation 3.
Este juego iba a estar desarrollado por Saffire Corporation, un estudio fundado en los años 90 que no pasaba por su mejor momento. Saffire había desarrollado juegos de sagas muy importantes, como Starcraft, Oddworld o Rainbow Six, además de haber trabajado con licencias como 007 o Xena: la princesa guerrera, pero con la llegada de la década de los 2000 la cosa cambió.
La calidad tanto de sus juegos como de sus licencias eran cada vez más irregulares. Hablamos de alternar El Hobbit con La vuelta al mundo en 80 días –la película de Jackie Chan–; Van Helsing con Peter Pan –la película de imagen real–. Saffire estaba, aparentemente, en problemas financieros y, como último recurso, decidió apostar por un ambicioso proyecto ¿inspirado? en las novelas para adolescentes de Roland Smith: Cryptid Hunters.
La premisa de Cryptid Hunter: The Legend of Kipling McKay era la misma que la de los libros, aunque no había relación oficial entre ellos. Así, nuestro objetivo era explorar lugares remotos con el objetivo de encontrar críptidos, animales cuya existencia no está demostrada o, en su defecto, supuestamente extintos pero que seguían vivos en ciertas partes del mundo. Nuestro protagonista, Kipling McKay, se ganaba la vida cazando estas peligrosas bestias, y esta vez nosotros teníamos que ponernos a los mandos para guiarlo.
La gente más rica del planeta utiliza todo lo que está a su alcance –científicos, armas, mercenarios– para capturar a los críptidos, pero una sociedad secreta de criptólogos ha contratado a McKay para que los ayude en su aventura por adelantarse a los multimillonarios en la búsqueda de estas criaturas, capturándolas y rescatándolas de su, de otra manera, trágico final.
Uno de los aspectos más interesantes era la ambientación, que nos llevaba a la época victoriana del steampunk; ambientación que muchos recordaréis gracias a La liga de los hombres extraordinarios o Atlantis: el imperio perdido. Si a esto le añadimos viajes temporales, acabamos con caballeros templarios, vikingos o gente del futuro (es decir, nuestro presente) formando parte de la historia.
No está muy clara cuál sería su jugabilidad, pero todo apunta a que se convertiría en un título de acción en el que tendríamos que enfrentarnos a los secuaces de los multimillonarios mientras intentábamos encontrar a las criaturas antes que ellos, al estilo Uncharted y sus múltiples tesoros. Es por eso que se especula con una propuesta relativamente similar a la de Monster Hunter, pero con un gameplay más ágil que la saga de Capcom.
El componente de Castlevania llega por un rumor que asegura que Saffire intentó proponerle a Konami convertir este proyecto en el nuevo título de la saga cuando la compañía japonesa estaba buscando un estudio occidental que se encargase de retomarla, y que, como sabemos, acabó siendo Mercury Steam. Esto nos da a entender que su jugabilidad tampoco podría haber estado muy lejos de la de la mítica saga.
Saffire Corporation sabía que era todo o nada. Habían invertido tres años únicamente en intentar darle forma a Cryptid Hunter: The Legend of Kipling McKay, pero ninguna editora se había interesado. El estudio tenía grandes planes, y quería adaptar la licencia a la televisión, el cine, los cómics, el merchandising… De hecho, la primera parte del cómic llegó a hacerse, y podéis leerla a continuación.
Pero nadie se interesó en este título, y es difícil juzgar las razones si tenemos en cuenta que no se ha mostrado nada de su jugabilidad. Sí hay un montón de materiales que nos dejan ver la cantidad y la calidad de muchos de los artistas que trabajaron en él, con algunos de primerísima línea como Frank Frazetta, Mike Mignola, Simon Bisley, Alex Horley o Weta Workshop.
En 2007, tres años después de su último juego, Saffire Corporation se declaraba en bancarrota. Con ella, desaparecía Cryptid Hunter: The Legend of Kipling McKay y cualquier otro proyecto que pudieran tener en marcha. Queda esperar que, quizás algún día, podamos ver algún vídeo de la jugabilidad de este proyecto que podría haber sido bastante interesante, con una premisa que podría dar lugar a un bien título aún hoy en día.
Apéndice:
Para ver más material gráfico, podéis visitar la página de uno de los antiguos responsables del proyecto, Mick Todd.