En Youngblood viajaremos hasta los años ochenta, y claro, en aquella época los disquetes eran imprescindibles y el eje de la informática. En el videojuego estos coleccionables se usarán para abrir puertas, avanzar y conseguir códigos especiales. Os contamos cómo funcionan.
Wolfenstein: Youngblood es un videojuego de acción en primera persona, en el que por primera vez en la saga, se incluyen ciertos elementos de RPG y de exploración a gran escala. Visitando una enorme ciudad de París ocupadas por las tropas del Tercer Reich, encarnaremos a las hijas de J.B.
Blazkowicz en su lucha contra la tiranía, ayudando a la resistencia francesa a expulsarlos del país. Sin embargo, y aunque todo lo haremos a tiros, de vez en cuando, deberemos usar ordenadores y disquetes, un aspecto que os explicamos su función.
Una puerta o un baúl cerrado y un código
Tras matar a un buen número de nazis, es probable que nos encontremos con una puerta con un código el cual, como es lógico, desconocemos. Para obtenerlo, deberemos encontrar un disquete, un terminal de disquete y descifrar su contenido. Con el número o la información que obtengamos de esta acción, podremos seguir avanzando o incluso abrir suculentos baúles llenos de armas y munición. Estos botines, por cierto, son muy cotizados.
Así se encuentran los disquetes en el juego
Wolfenstein: Youngblood tiene una gran extensión como videojuego, y sus escenarios son particularmente grandes. Los disquetes se pueden encontrar dispersos por los mapas y determinados niveles, y os avisamos, algunos están a la vista y otros están muy bien ocultos. Por norma general, estos disquetes son grises, de gran tamaño y están en habitaciones o zonas próximas a unos terminales o computadoras muy grandes, metálicas y de pantalla monocrómatica de un vivo color rojo llamadas terminal de disquetes.
Así funciona la decodificación
Cuando encontremos el disquete en cuestión, tendremos que acercarnos a uno de estos terminales de disquetes y descifrar su contenido. Es muy sencillo. Obtener la información de estos dispositivos de almacenamiento informático es cuestión de pulsar un botón que se nos indicará en la interfaz -varía según la plataforma-, esperar unos segundos y comprobar como los datos y los números se traducen y muestran ante nuestros ojos. Una vez tengamos el código, podremos ir a la caja fuerte o la puerta y seguir avanzando.