Virtual Toys
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Virtual Toys fue una desarrolladora española de videojuegos fundada en 2002 y con sede en Madrid. A lo largo de más de una década, se especializó en la creación de títulos para diversas plataformas, desde consolas portátiles como PSP y Nintendo DS hasta dispositivos móviles y consolas de sobremesa. Su propuesta combinaba el desarrollo de juegos originales con la adaptación de licencias populares, convirtiéndose en un referente del sector en España durante los años 2000.
Entre sus trabajos más destacados se encuentran títulos como Torrente: El Juego, Falling Stars, VT Tennis, Cars: Radiator Springs Adventure y varios proyectos para Disney y otras grandes marcas. También participó en la creación de juegos de acción, deportes y aventura, logrando presencia tanto en el mercado nacional como en el internacional. Su enfoque versátil y su capacidad para trabajar con franquicias conocidas le permitieron hacerse un hueco en una industria altamente competitiva.
Con el paso del tiempo, Virtual Toys amplió su experiencia hacia el desarrollo en móviles y colaboró con distintas editoras internacionales. Sin embargo, la compañía cesó sus operaciones a mediados de la década de 2010. A pesar de ello, dejó un legado como uno de los estudios pioneros de la industria española moderna del videojuego, contribuyendo a dar visibilidad al talento creativo nacional en un momento clave de su evolución.
Entre sus trabajos más destacados se encuentran títulos como Torrente: El Juego, Falling Stars, VT Tennis, Cars: Radiator Springs Adventure y varios proyectos para Disney y otras grandes marcas. También participó en la creación de juegos de acción, deportes y aventura, logrando presencia tanto en el mercado nacional como en el internacional. Su enfoque versátil y su capacidad para trabajar con franquicias conocidas le permitieron hacerse un hueco en una industria altamente competitiva.
Con el paso del tiempo, Virtual Toys amplió su experiencia hacia el desarrollo en móviles y colaboró con distintas editoras internacionales. Sin embargo, la compañía cesó sus operaciones a mediados de la década de 2010. A pesar de ello, dejó un legado como uno de los estudios pioneros de la industria española moderna del videojuego, contribuyendo a dar visibilidad al talento creativo nacional en un momento clave de su evolución.
