Con un pionero en F-Zero, las carreras futuristas se han popularizado en la anterior generación y no faltarán en ésta, como ya han demostrado Acclaim o Sony com Extreme G-3 y Wipeout Fusion, o Nintendo con su esperado F-Zero GC. Xbox no se quedará atrás, y este Otoño recibirá un título a la altura de las circunstancias, producido por la propia Microsoft y con el nombre de Quantum Redshift.
Desarrollado por Curly Monsters, creadores del más que decente NGEN Racing para Playstation, Quantum Redshift es un juego de carreras futuristas a bordo de unas naves voladoras similares a las del clásico Wipeout, ambientado 100 años hacia un futuro en el que este vertiginoso y peligroso deporte se ha convertido en un fenómeno de masas.
Habrá 16 pilotos, cada uno con su propia nave y circuito "local", pero esta característica no será anecdóticas, sino que influirá en el desarrollo del juego.
Cada piloto tiene su propia personalidad e historia y, lo que es más importante, sus propios sentimientos hacia los otros competidores, entre los cuales tendrá un archi-enemigo, ya sea por razones del pasado, por intereses políticos o por desengaños amorosos. Esta característica, que está comenzando a integrarse en muchos juegos de carreras (Total Inmersión Racing de Empire, por ejemplo), hará que la actitud de los demás corredores hacia nosotros influya en las carreras, intentando fastidiarnos la victoria o incluso hacer que nos descalifiquen y que nuestra nave (¡o incluso nosotros!) pase a mejor vida.
Algunos de estos personajes son Tara Vivas, una antigua estrella del pop para quinceañeras, Principe Yuri Galitz, un millonario ruso que asegura ser del linaje de los Romanov, Kumiko Nikaido, hija de uno de los mejores corredores en la historia del circuito y Zaki Shaheen, un corredor que cree que todo lo que es se lo debe a la diosa Osiris. Estos corredores, junto con Jordan Reynolds, Marcus Appleton y Leah Mathias, serán los siete que estarán disponibles en un primer momento.
Gráficamente hablando, todo lo mostrado tiene una gran calidad y logra ese ambiente futurista tan necesario en este tipo de juegos, con unos efectos de iluminación destacables y muy numerosos, procedentes de las turbinas de nuestra nave o de las propias luces de los escenarios, que por su parte son bastante grandes y están llenos de detalles. La gran duda será la sensación de velocidad que podrán conseguir los chicos de Curly Monsters, aunque esta crecerá según avancemos en el juego a mayores niveles de dificultad. Habrá cinco niveles de dificultad o de velocidad, a la sazón novato, amateur, experto, maestro y el más elevado de todos, "Quantum Redshift", donde se pueden alcanzar velocidades de más de 1.000 kilómetros por hora.
Los diferentes trofeos en los que participaremos en el modo Tournament están clasificados en los ya mencionados niveles de velocidad/dificultad, y como podéis adivinar, comenzaremos en el más bajo de todos. Una vez avancemos, conseguiremos tres tipos de mejoras: nuevos pilotos, nuevos circuitos –para el resto de modos de juego- y nuevos trofeos en los que participar, no necesariamente del mismo nivel que el que hemos ganado. Así se presenta el modo torneo o "carrera" del juego, donde la dificultad va subiendo gradualmente hasta el punto que para ganar los últimos trofeos, tendremos que quedar primeros en todas las carreras que compongan al susodicho trofeo.
Las carreras, por su parte, consisten en una mezcla de conducción a toda velocidad (utilizando giros y frenos lateral) y batalla campal, usando las armas que tendremos disponibles. El equipo de desarrollo le ha dado una especial importancia a este último punto, incluyendo un interfaz "holográfico" diferente para cada nave, y una buena cantidad de tipos de armas que podrán actualizarse con el dinero q ue ganemos en las carreras. Cada corredor tendrá mayor o menor afinidad con un tipo de arma y con los items en general; así, mientras que unos estarán mejor preparados para los turbos, otros manejarán mejor los rayos lasers, etc.. Las armas serán de diversa índole, desde los turbos o escudos (estos no son armas, pero entran dentro del cupo) hasta los lasers, los mísiles o las granadas con sensores de calor, pasando por las descargas de plasma o las bombas nucleares.
Aparte del modo campeonato, Quantum Redshift tendrá las típicas opciones de carrera simple, contrarreloj y multijugador, donde podrán participar hasta 4 jugadores a pantalla partida, y donde también habrá varios modos de juego. Siguiendo la tónica de los otros juegos de conducción futurista, Quantum Redshift también tendrá una banda sonora de música electrónica, que es obra del grupo holandés de progressive dance Junkie XL, cuyo trabajo más reciente –y popular- es el remix de "A Little Less Conversation" de Elvis Presley. Este grupo aportará 16 composiciones originales que irán alternándose en las carreras, según sea la situación.
Aunque el planteamiento no sea una cosa nueva y las novedades que aporte al género no sean numerosas, la inclusión de las rivalidades puede hacer brillar al título por la variedad que supone en la jugabilidad. XG3 y Wipeout Fusion han recibido buenas críticas en general pero también han cosechado sus detractores por la incontrolabilidad y por ciertas deficiencias gráficas en el caso de Wipeout. Si Curly Monsters consigue aunar una buena jugabilidad con un aspecto gráfico a la altura, podríamos estar ante uno de los juegos más interesantes de la temporada navideña para Xbox. La velocidad y la acción de Quantum Redshift llegarán a Xbox este mes de Octubre.