En el segundo día del E3, ya todo el mundo habla de sus juegos favoritos, de aquellos que más le están gustando o le han impresionado, y uno de los que más ruido está haciendo es Titanfall, el primer trabajo de Respawn Entertainment, un estudio formado por antiguos miembros de Infinity Ward, creadores de Call of Duty. Presentado por primera vez en la conferencia de Microsoft del pasado lunes, nos bastó con ver unos pocos minutos de jugabilidad para comprobar las similitudes con el juego de Activision, del que no se puede negar que es un claro heredero.
El sello Infinity Ward se ve en cada poro del juego, y en sus intenciones, por ejemplo con unas irrenunciables 60 imágenes por segundo, una marca de la casa. Titanfall es en cierta medida una evolución lógica de lo que crearon anteriormente, un juego de acción en primera persona exclusivamente multijugador online, no se podrá jugar solos o sin conexión a internet.
Algo que ahora puede sonar un tanto extraño y arriesgado, pero que parece se convertirá en algo bastante habitual en la nueva generación, sin ir más lejos otro de los títulos más importantes del E3 como Destiny, solo se podrá jugar online.
Por si no habéis podido ver la demo que se mostró durante la conferencia de Microsoft, y sin dar demasiados rodeos, podríamos decir que Titanfall es un Call of Duty con robots gigantes –o mechas- en los que nos podemos montar. Puede sonar exagerada o demasiado simple esta afirmación, pero el parecido con una partida multijugador de Call of Duty es enorme. El recuadro del mapa, el comportamiento de las armas, las puntuaciones, el diseño de los escenarios, las armas, el movimiento de los personajes, todo recuerda al multijugador más exitoso de los últimos años. Y nadie les puede culpar de copia o plagio, ya que detrás de Titanfall están los padres del éxito de Activision.
La demostración que hemos podido ver en la feria a puerta cerrada era un combate Hardpoint, en el que dos equipos tenían que luchar por conquistar tres zonas del escenario. Antes de empezar el combate, durante la cuenta atrás, nos encontramos en una nave en el espacio, que se teletransporta a un planeta, para luego saltar hasta el suelo, comenzando la batalla. Este circunstancia, como las conversaciones que se producen durante la acción en los la laterales de la pantalla, son algunas pistas de por dónde irá la narrativa de un juego exclusivamente multijugador, que ya nos han dicho tendrá una historia detrás.
Los personajes cuentan con unos jetpak que les permiten elevarse unos metros del suelo, y además pueden realizar una especie de movimientos de parkour -algo que se ha vuelto a poner de moda en los videojuegos-, para apoyarse sobre las paredes y poder saltar más alto. Pero lo que hace diferente a Titanfall de cualquier otro juego de acción multijugador son precisamente los titanes, esos robots o mechas que son los grandes protagonistas.
Hay un número limitado de ellos por equipo en cada combate, y en el momento que están disponibles podemos reclamar su presencia pulsando arriba en la cruceta digital. Nos lo lanzan desde el cielo, cayendo en el sitio que hayamos indicando, aunque como pudimos ver, en este desplazamiento por el aire pueden ser destruidos por los rivales, aunque no parece que vaya a ser fácil dispararles a toda velocidad, pero sí posible como vimos en la demo. Una vez que tengamos nuestro robot, podemos bajarnos y subirnos a él en cualquier momento, y nuestra potencia de fuego evidentemente aumenta, teniendo disponible una potente ametralladora, un lanzacohetes, o incluso una pistola magnética que atrae y dispara proyectiles.
Estos robots también pueden realizar golpes cuerpo a cuerpo, si es a un soldado le propina un tremendo puñetazo que lo revienta en mil pedazos, literalmente, en el caso de otro robot, podemos sacar al piloto de sus entrañas, y aplastarlo entre nuestras manos. Cuando lo mechas han sufrido un gran daño, será momento de abandonarlo antes de que explote, pulsando arriba en la cruceta para salir propulsados. Aquí los jugadores más hábiles podrán incluso disparar a un soldado en el aire, algo que nos mostraron y que nos pareció tremendamente espectacular.
En caso de salir airosos de la eyección, podremos caer encima de un mecha enemigo, disparándole en el cuello y rompiendo sus conexiones principales, una acción que tarda un rato en realizarse, proceso en el que estamos muy expuestos al fuego enemigo, que debería intentar proteger su robot de este tipo de agresión. En todo momento vemos la cantidad de vida de los mechas, que se pueden reparar, y que serán además de un elemento clave en la acción, también un interesante componente estratégico de las partidas, dependiendo de cómo gestionemos su inestimable ayuda, o la amenaza que suponen en manos enemigas.
Puede que parezca que siendo un soldado raso estamos en clara inferioridad frente a estas bestias de metal, pero esto no es así del todo, ya que los personajes cuentan con una gran agilidad, al contrario que los mechas, más lentos y torpes. La cantidad de elementos en pantalla, la fluidez con la que se mueve todo, los disparos, explosiones, los robots lanzando misiles que dejan dibujada en el aire una bella estela de humo, unos escenarios muy detallados con un horizonte inmenso, Titanfall es sencillamente espectacular.
Es de esos pocos juegos en los que como espectador no te aburres viendo una partida, pero que a la vez es tan divertido lo que está ocurriendo en pantalla, que desearías poder estar cogiendo el mando. En este E3 no han dejado jugar a Titanfall, eran varios miembros de Respawn los que jugaban una y otra vez partidas al modo Hardpoint, poniéndonos la miel en los labios a todos los asistentes a la feria.
Utilizando el motor Source, muestra un aspecto fantástico, atractivo a la vez que funcional, y con un cuidado diseño artístico, no demasiado llamativo, pero sí más trabajado de lo que puede parecer a simple vista. Previsto para 2014, llama la atención lo fluido y estable que se mueve para tratarse de una versión inacabada, algo que no pueden decir otros juegos de la feria. Parece que su objetivo de llegar a los 60fps lo llevan a rajatabla hasta en las versiones beta, y todo lo que muestra en pantalla se mueve con una fluidez admirable, por más soldados y robots que se encuentren disparando y causando todo tipo de explosiones. Como curiosidad comentar que Respawn se están encargando de la versión de Xbox One y PC, no de la de Xbox 360, que está desarrollando otro equipo con su apoyo, y que veremos cómo sale teniendo en cuenta lo ambicioso de la propuesta.
Uno de los posibles bombazos de 2014
Cuesta explicar por qué nos ha parecido tan bueno Titanfall, teniendo en cuenta que nos han mostrado y explicado muy poco, pero todos aquí en el E3 coincidimos en que es uno de los mejores juegos de la feria, y que puede convertirse en todo un bombazo. Partiendo de la base del divertido y adictivo multijugador de Call of Duty, añade suficientes novedades como los robots, los jetpak, los movimientos de parkour y una particular estética futurista, que consiguen que aunque recuerde fuertemente a lo creado siendo Infinity Ward, se sienta como algo fresco y original, y sobre todo, muy rotundo. Pocos juegos de los que hemos visto durante estos días dejan tan pocas dudas, así que seguidle la pista a Titanfall, ya que apunta a caballo ganador.