Si hay una saga exclusiva de Microsoft que destaque sobre las demás y brille con luz propia esa es Halo. Uno de esos nombres que justifican de por sí la compra de un sistema y que levanta pasiones allá por donde pasa. Su primera entrega llegó a España en el 2002 en la primera Xbox para convertirse automáticamente en el buque insignia de la consola. Dos años después llegaría Halo 2, una secuela que sin ser un mal juego, no estuvo a la altura del original, y es que ni la propia Bungie estuvo contenta con el resultado final, ya que no tuvieron el tiempo de desarrollo que les habría gustado.
Por suerte, la saga volvería a retomar el camino de la excelencia con Halo 3 en el 2007, concluyendo de esta forma la primera trilogía de las aventuras del Jefe Maestro por todo lo alto y llevando por primera vez la serie a Xbox 360. Los siguientes en llegar serían Halo 3: ODST y Halo Wars, ambos en el 2009. El primero se desarrollaba antes de los hechos de la tercera entrega, mientras que lo segundo era un juego de estrategia. Finalmente llegó Halo Reach un año más tarde, la obra cumbre de Bungie y con la que el estudio se despidió de la serie que les hizo grande. Además, con Reach la Inteligencia Artificial de los enemigos alcanzaba unos niveles de complejidad que todavía a día de hoy está a años luz de lo que se puede disfrutar en otros títulos.
Con estos precedentes no es de extrañar que cuando se anunció Halo 4 creara expectación y dudas a partes iguales, ya que como hemos dicho, Bungie no trabaja más en ella. Y es que por desgracia, no es algo poco habitual el ver cómo las sagas de videojuegos que cambian de manos se ven desvirtuadas y relegadas a títulos menores que no suelen estar a la altura de sus predecesores, como ha pasado recientemente con Ninja Gaiden 3 tras la marcha de Itagaki. En esta ocasión, la enorme responsabilidad de continuar con la historia del Jefe Maestro ha recaído sobre 343 Industries, quienes se han marcado como objetivo perpetuar el legado de Bungie aunque incluyendo su propia visión sobre este particular universo.
Cortana y el Jefe Maestro
En esta ocasión el argumento se situará en el año 2557, cuatro años después del final del tercer episodio. La guerra entre la humanidad y el Covenant ha terminado y el Jefe Maestro y Cortana se encuentran flotando en una nave a la deriva y en la Tierra se les da por desaparecidos en combate. Durante todo este tiempo nuestro protagonista se ha encontrado en estado de letargo, algo que Cortana ha aprovechado para incluir diversas mejoras en el traje del último Spartan mientras descansaba, lo cual explica algunos de los cambios visuales que muestra la armadura y que ya hemos podido ver en los tráilers. Estas serán apreciables desde el primer momento, ya que ahora la interfaz del casco (es decir, la del juego en sí) mostrará mucha más información en pantalla y estará mejor estructurada.
El título comienza en el momento que Cortana despierta al Jefe Maestro, ya que algo parece estar intentando abordar la nave. No tardaremos mucho en descubrir que los invasores son del Covenant, pero actualmente no se sabe si pertenecen a la misma facción a la que nos enfrentamos anteriormente o de una nueva, ni cuáles son sus auténticas motivaciones, aunque Cortana sospecha que se son simplemente unos bandidos espaciales. Finalmente, los eventos llevarán a nuestros protagonistas a estrellarse en un misterioso planeta llamado Requiem, donde se desarrollará gran parte de esta entrega. Este mundo cuenta con un escudo que lo protege del exterior y que fue construido como refugio contra los devastadores efectos de los Halos, que recordemos, fueron armas construidas por los Forerunners y que estaban destinadas a destruir toda la vida sintiente de la galaxia para prevenir la propagación de los Floods.
Considerando esto, existe la posibilidad de que todavía queden Forerunners vivos. Se sabe que el argumento estará estrechamente relacionado con la historia de esta raza, aunque su aparición no ha sido confirmada. Hace miles de años, fueron quienes acabaron con los Precursores y los que hicieron involucionar a la humanidad hasta la edad de piedra después de que esta perdiera la guerra contra ellos, por lo que la posibilidad de que sean los verdaderos antagonistas de esta nueva trilogía es bastante alta, además de que ciertas pistas desveladas en las últimas novelas también apuntan a ello. Lo que sí que se sabe ya es que habrá un nuevo tipo de enemigos, armados con nuevas armas y equipo y que no dudarán en ponernos las cosas difíciles. El equipo de desarrollo quiere que luchar contra ellos sea una experiencia nueva y diferente que los distinga del Covenant y los Floods más allá de las diferencias visuales.
Uno de los objetivos que se han fijado en 343 Industries es el de mostrarnos el lado más humano del Jefe Maestro, por lo que veremos sus dudas y sus miedos al verse ante una situación que le sobrepasará. Este es un punto bastante delicado, ya que los miles de fans de la saga tienen una imagen formada y muy concreta de este legendario Spartan, por lo que si no se ejecuta con cuidado y maestría puede no ser del gusto de todos.
Por si esto no fuera poco, la relación con Cortana será otra pieza clave de la historia. Como muchos sabréis, las Inteligencias Artificiales de este tipo pueden procesar una ingente cantidad de datos, pero esto es también su condena, ya que después de siete años aproximadamente, comienzan a entrar en declive hasta que acaban sucumbiendo a la locura. En Halo 4 veremos cómo se desarrolla este proceso en Cortana y cómo esto la afecta tanto a ella como al Jefe Maestro. A pesar de ello, puede que no esté todo perdido, especialmente si consideramos las circunstancias tan especiales y concretas bajo las que se creó esta carismática IA.
Infinity y Spartan Ops
De la campaña no se ha desvelado mucho más, aunque sí de uno de los apartados que han llevado a la serie a donde está hoy: su multijugador online. Con esta entrega, quieren que su vertiente para varios jugadores no esté separada del modo individual, por lo que han decidido en hacer algunas conexiones claves entre ambos. Por ejemplo, el hecho de que dos equipos se enfrenten entre ellos responderá a nivel argumental a que son batallas que usan los nuevos Spartan IV para entrenarse entre ellos dentro de la nave UNSC Infinity (por lo que se descarta la presencia de Élites como personajes jugables), donde disponen de campos de entrenamiento de realidad virtual. De momento, los dos mapas que se conocen se llaman Wraparound y Warhouse.
Como novedad, en esta ocasión se incluirá un sistema de rangos y de recompensas por cumplir diversos objetivos o acciones que nos ayuden a sumar puntos de diferentes formas. Estos puntos no solo estarán de adorno, ya que nos servirán para comprar diversas mejoras y armas con las que podremos personalizar a nuestro personaje. En anteriores juegos de la saga, la personalización afectaba principalmente a nuestro aspecto visual y poco más, por lo que ahora también tendrá repercusiones bastante importantes en nuestras posibilidades jugables.
Otros cambios algo menores (aunque no por ello menos importantes), los encontraremos en la posibilidad de unirnos a cualquier partida aunque esté ya empezada o en la aparición aleatoria de las armas más poderosas, que ahora no se quedarán fijas en un solo punto, sino que irán apareciendo por todo el mapa. Además, ahora podremos reaparecer automáticamente una vez nos maten.
En cuanto a modos de juego, el más novedoso dentro de la saga será Spartan Ops, que es el que viene a sustituir al modo tiroteo. En él tendremos que superar diversas misiones en cooperativo para hasta cuatro jugadores. Además, para alargar su vida útil y mantener a los jugadores pegados a la pantalla cada semana se actualizará con cinco nuevos desafíos. Otro modo de juego que confirma su aparición es Regicidio. En él una persona será el rey e irá acumulando puntos. Si alguien lo mata, recibirá los puntos que el rey haya acumulado y se convertirá en el nuevo rey.
Finalmente, en cuanto a su apartado audiovisual, se sabe que volverá a correr sobre el motor gráfico usado en Reach, aunque con ciertas modificaciones para hacerlo más potente, cosa que ya se ha podido comprobar en sus nuevos efectos de iluminación, una de sus características gráficas que más ha mejorado. Respecto a la banda sonora, Martin O'Donnell y Michael Salvatori ceden la batuta a Neil Davidge. Solo hemos podido escuchar un par de nuevas canciones, aunque lo que hemos oído nos ha gustado y mantiene un buen nivel.
Todavía quedan muchísimas dudas que rodean al esperado regreso del Jefe Maestro, pero todo apunta a que estamos ante un título muy prometedor incluso con el cambio de desarrolladores. Probablemente en el E3 de este año conozcamos nuevos detalles, pero no podemos más que contar los días que faltan para que llegue el 6 de noviembre y comprobar de primera mano si la nueva apuesta de 343 Industries continuará perpetuando el legado de los Spartan como se merece.