Con motivo de las olimpiadas de Pekín, Sega, además del videojuego oficial de dicho evento, decidió sacar para las consolas de Nintendo un juego que sorprendió a muchos por sus protagonistas. Y es que es que lo que parecía imposible ocurrió: los mundos de Mario y los de Sonic se mezclaron en un juego, Mario y Sonic en los Juegos Olímpicos. Ahora, tras una exitosa primera parte, la competición entre los das dos mascotas vuelve, esta vez con la nieve de fondo.
Nos vamos a la nieve
Si la anterior Olimpiada sucedía en Pekín, ahora el juego nos traslada a la ciudad canadiense de Vancouver, donde jugaremos se celebrarán los Juegos Olímpicos de Invierto en 2010. La versión que pudimos probar no es la final, sino una demo con cinco deportes, con lo que tan sólo hemos podido echar un vistazo a una parte de lo que nos ofrecerá el juego, pero ya podemos hacernos una idea de tendremos con este Mario y Sonic en los Juegos Olímpico.
Las pruebas a las que jugamos fueron el descenso de esquí, bobsleigh, hockey sobre hielo, carrera de esquí fantasía y carrera de snowboard fantasía. Veamos más en detalle cada una de estas pruebas, que probamos con el mando (el juego puede controlarse también con la Wii Balance Board).
La primera de ellas es la de descenso de esquí, donde deberemos bajar por una montaña teniendo cuidado de pasar entre las banderas (puestas a bastante distancia entre sí, para que no tengamos demasiados problemas para cruzarlas). La forma de controlar el juego es inclinando el mando de control y el nunchuck como si inclináramos el cuerpo (a los lados para girar, delante para acelerar y atrás para frenar). Se controla bastante bien, y aunque en principio es bastante sencillo, si queremos mejor nuestros tiempos y apurar al máximo para ir a la máxima velocidad, las cosas se complican y será fácil dejarnos alguna bandera (con la consiguiente penalización). Esta prueba tenia modo multjugador para dos jugadores a pantalla partida.
Tras este deporte, probamos el bobsleigh, un juego para hasta 4 jugadores (todos irán en el mismo coche). Para controlarlo, usaremos el mando de control pegado al pecho, y, moviendo nuestro cuerpo será como si nos balaceáramos dentro del bobsleigh para coger las curvas mejor. Si a un jugador es divertido, cuando lo hacemos con otros amigos lo es aún más, aparte de más complicado, pues deberemos sincronizar los movimientos de todos. En general un juego entretenido que a buen seguro requerirá práctica para conseguir los mejores tiempos.
A golpes si hace falta
El siguiente fue el hockey sobre hielo, en el que nos enfrentaremos al rival en un equipo de cuatro jugadores (uno de ellos el portero). En esta prueba, nos moveremos con la palanca de control del nunchuck, pasaremos con A y tiraremos a gol o pegaremos al equipo contrario agitando el mando de control. El juego es bastante frenético, y enseguida estaremos pegándonos para conseguir el disco, aunque la verdad es que el faltan algunos ajustes. El primero es el tema de los golpes, y es que cuando pegamos a alguien, la "víctima" estará unos segundos fuera de combate, pero el que ha dado el golpe no tendrá ninguna penalización, porque lo que enseguida podrá seguir golpeando. Esto hace que en ocasiones un miembro del equipo contrario noquee a todos nuestros jugadores en un momento, y nos quedaremos unos valiosos segundos sin poder hacer nada. Creemos que la solución de este problema sería penalizar también los empujones, añadiendo un tiempo de recuperación, pues tal y como esta ahora es poco equilibrado. La IA también necesita algún que otro retoque, pues de vez en cuando veremos a nuestros compañeros parados sin hacer nada, lo que unido a que el portero tampoco va muy fino, hace que se vea afectada la experiencia de juego. Admite juego para hasta cuatro jugadores.
Con el siguiente juego nos sentimos dentro de Mario Kart, y es que se inspira enormemente en el juego de Nintendo (también la siguiente prueba, aunque ya hablaremos más delante de ella). En carrera de esquí fantasía que jugamos tuvimos que dar dos vueltas al circuito de Mario (suponemos que habrá más circuitos en la versión final) mientras tratamos de quedar en primera posición. Para ello, además de esquivar obstáculos como plantas pirañas o a Chomp Cadenas, podremos coger ítems (los interrogantes típicos del juego de carreras de Mario) para usarlos en nuestro provecho o para fastidiar a nuestros rivales. El control es como el de descenso de esquí, por lo que no tendremos ningún problema. En general nos ha parecido un juego bastante divertido que gana en compañía (hasta dos jugadores) y nos resulta muy gracioso escuchar de fondo todos los sonidos del juego de carreras de Nintendo.
Siguiendo la misma línea tenemos carrera de snowboard fantasía, en el que en lugar de esquís, como dice su nombre, iremos encima de una tabla de snow. En esta ocasión el escenario está basando en los mundos de Sonic, con algunos elementos como anillos o muelles. La mecánica es la misma, avanzar consiguiendo ítems y esquivando a los obstáculos que pueden hacernos perder el tiempo. El único problema es que el control (se mueve inclinando el mando de control como si moviéramos el cuerpo) no funciona tan bien, y no es tan divertido como la anterior prueba. Esperamos que terminen de pulir el control, pues este modo promete ser también muy divertido, tanto el solitario, como para dos jugadores.
Dos mundos en uno
Gráficamente el juego sigue en la línea de su antecesor, aunque ha mejorado en todos los aspectos. Donde es más evidente es el las pruebas que siguen el estilo de Mario Kart, ya que son las que presentan unos escenarios con más detalles. El juego es bastante colorista y han conseguido encajar muy bien los mundos de Mario y Sonic, haciendo que los personajes no desentonen unos con otros. En cuanto a los menús y demás, nos ha gustado mucho la limpieza de los mismos, lo que le da muy bien aspecto.
Hemos de mencionar el apartado sonoro, pues nos hemos llevado una muy grata sorpresa. Las melodías, la mayoría de ellas orquestadas, son muy pegadizas y acompañan estupendamente la acción. Por otra parte, el juego estará doblando (en la versión que jugamos los textos estaban en inglés con voces en nuestro idioma, por lo que damos por hecho que los textos vendrán en castellano) con una voz bastante desenfadada que le queda estupendamente.
Los deportes que hemos visto de este Mario y Sonic en los Juegos Olímpicos nos han parecido sencillas y accesibles, además de divertidas. En general el control funciona muy bien en todas ellas, y prometen ser rápidas de jugar, pero difíciles de dominar. Además, la inclusión de juegos más profundos como las carreras fantasía le dan mayor variedad al juego. Tenemos que probar el resto de los deportes para ver que nos ofrece el juego, pero en general nos parece una más que digna continuación que promete encantar a aquellos que jugaron a la primera parte y, porque no, a aquellos que no le dieron una oportunidad.