Falcom se ha ganado un nombre de prestigio entre los jugones del rol japonés, pero es cierto que aún no ha llegado al gran público occidental, algo que, según los números de ventas, sí ha conseguido por ejemplo Atlus con Persona –hace una década todavía se consideraba de nicho y hoy alcanza ventas millonarias-. Y no será por falta de calidad o lanzamientos, pues quienes prefieran el rol de acción pueden elegir la fantástica saga Ys –sin ir muy lejos, el brillante Ys VIII: Lacrimosa of Dana- y quienes prefieran el rol por turnos disponen de cuatro The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel. En breve nos llegará la nueva aventura de Adol Christin, Ys IX: Monstrum Nox, un juego que promete mantener lo que tanto nos gusta de Ys pero acompañado de importantes novedades en la exploración. Ys IX se lanza en España el 5 de febrero en PS4 –más de un año de diferencia respecto a su salida en Japón- y a mediados de año lo hará en Nintendo Switch y PC.
Una de las premisas de Ys IX son las nuevas habilidades que conseguirá Adol al llegar a la ciudad de Balduq. Su historia ofrece nuevos misterios y amenazas que provienen de la dimensión oscura Grimwald Nox, pero de esto hablaremos más en nuestro futuro análisis, ya que la demo disponible en PS Store se centra únicamente en dar a conocer su sistema de combate y un puñado de nuevas habilidades en dos tipos de misiones.
Además está diseñada con una jugabilidad muy arcade, fomentando la rejugabilidad: 10 minutos de partida, sin límite de reintentos y hasta donde llegues –o hasta superar el jefe final de cada zona-. Puedes optar por jugar más "en serio", como lo harías normalmente, y derrotar a cada enemigo que se cruce en tu camino, o intentar un speed run para derrotar a los jefes que trae cada sección. Incluye diversos niveles de dificultad, por si quieres ajustar el desafío a tu gusto.
Un combate más libre y vertical
Las bases jugables de Ys son las que nos tiene acostumbrada la saga, con unos combates rápidos, casi comparables a un hack’n slash, donde nuestro equipo explora los escenarios, que en este caso son dos tipos de mazmorras. En cualquier momento podrás cambiar de personaje para aprovechar sus estilos de combate –unos más rápidos que otros-, habilidades o armas, pero en la versión que hemos jugado este grupo ya está predefinido así que no hay mucho margen para experimentar con ellos. La jugabilidad es adictiva y el control preciso, encantará incluso a quienes lo vean más como un juego de acción que un RPG –aunque obviamente, la obtención de equipamiento y gestión de recursos siguen siendo claves para el éxito a largo plazo-.
Lo que sí resulta interesante es ver cómo funcionan los dones de esta entrega, que cambian la mecánica de los combates y sobre todo de exploración. Heaven’s Run es una habilidad que se encuentra en las dos misiones de la demo y facilita correr por las paredes del escenario, es decir, avanzar por lugares inaccesibles de otra manera o descubrir tesoros un poco apartados a la vista. Lo cierto es que con estos laberintos que transcurren principalmente en lugares cerrados no resulta tan vistoso, pero Cloaca Maxima permite que su mapa juegue con la verticalidad de sus columnas y muros siempre y cuando no se agote la barra asociada a las habilidades. Los desarrolladores han aprovechado esto para esconder recompensas que descubrirán los jugadores más curiosos, y ayuda a hacer los mapas menos "pasilleros" –dentro de su linealidad-, lo que al menos da una sensación de más complejidad a lo largo de sus pisos.
La misión Dry Moat Ruins explota menos la posibilidad de caminar por paredes pero a cambio nos presenta Hunter's Descent, que no es otra cosa que planear durante un tiempo. El mapa de esta porción de la demo, además de sus mazmorras excavadas en las montañas, incluye unos barrancos insalvables con el salto o el doble salto, no así extendiendo las alas para llegar plácidamente a la otra parte del escenario. De nuevo, se trata de un movimiento que podríamos utilizar en combates –sobre todo si la arena es suficientemente grande- pero que ayuda especialmente a dar más libertad a nuestros personajes y cambiar el diseño de los mapas a los que estamos acostumbrados en Ys.
Hay algunas otras habilidades no menos importantes, como Crimson Line, que nos traslada a ciertos puntos del escenario con sólo apuntar a ellos –piensa en algo así como el garfio de Joker en Persona 5 Royal-. También podrás usarlo para viajar directamente junto a un enemigo –al estilo del brazo de Nero en DMC4-, así que los jugadores más experimentados podrán hacer virguerías con este recurso. Existen más dones en Monstrum Nox, desde Third Eye –localizar objetos importantes con facilidad- a Shadow Dive –pasar por zonas bajas o con sigilo- y Valkyrie Hammer – un golpe fuerte capaz de romper paredes agrietadas-, pero no todas se pueden probar en la demo.
Las batallas en Ys IX son frenéticas y se lucen contra los jefes, unos enemigos gigantescos contra los que hay que mantenerse en constante movimiento y demostrar que dominas las evasiones y ataques especiales. Sin embargo, como explicaremos ahora sobre el apartado gráfico, esta no parece la mejor demostración para vender Ys IX, pues la mayoría de los jefes de la versión de prueba tienen un comportamiento similar y la estrategia para derrotarlos es básicamente la misma. Veremos si esto se debe a que son secciones del inicio del juego o es un problema más profundo a lo largo de toda la aventura.
Un RPG que se sostiene por su jugabilidad
Hay algunos detalles más que podemos mencionar de la demo de Ys IX, y es que si en la parte positiva tenemos su jugabilidad, tan sólida como podríamos esperar en esta serie, lo cierto es que Ys IX volverá a echar atrás a muchos jugadores por su apartado gráfico, tan anticuado como siempre… e incluso algo más: en parte por las localizaciones escogidas o la dirección artística, Ys IX resulta menos llamativo que su predecesor Ys VIII, un juego de 2016. No es algo que deba tener un peso enorme a la hora de valorar su calidad, pero Falcom ha hecho muy poco por modernizar su tecnología mientras las generaciones avanzan, y las dos mazmorras de esta demo dejarán bastante fríos a muchos fans, es un retroceso respecto a sus últimos juegos. Lo hemos jugado en PS5 donde no hay problemas de rendimiento, pero os advertimos que en su lanzamiento original se criticó que el juego en PS4 sufría por mantenerse estable en la ciudad principal de su historia.
Por lo demás, esta demo de Ys IX: Monstrum Nox multiplica nuestras ganas de ver nuevos personajes, situaciones y enemigos donde probar los nuevos poderes, conocer el desarrollo de su historia y escuchar su cañera banda sonora. Incluso si Ys IX no fuese la entrega más brillante de la saga, los fans del rol japonés tienen muchos motivos para seguir la pista a uno de los primeros lanzamientos interesantes de 2021.
Hemos realizado estas impresiones en PS5 con la demo disponible en PS Store.