En una feria como el E3 con títulos tan importantes, al menos en lo que a ruido y atención mediática se refiere, a los juegos independientes les cuesta mucho asomar la cabeza y que se hable de ellos, y muy pocos lo consiguen cada año. ABZU ha sido uno de esos afortunados en el E3 2015, y con un argumento tan simple como rotundo: su belleza.
Sin saber nada del juego, lo primero que te viene a la cabeza al verlo en movimiento es que su estilo gráfico, e incluso su propuesta jugable, recuerdan mucho a Journey, el exitazo de thatgamecompany, solo que aquí ambientado en el fondo del mar. Y bueno, este parecido no es para nada casual, ya que detrás de ABZU se encuentra Giant Squid, un estudio dirigido por Matt Nava, quien fue el director de arte de Flower y Journey.
Volveremos a estar ante una aventura de exploración en la que su historia se nos cuenta a través de las imágenes. Manejando a un buceador que tiene que resolver pequeños puzles, encontrar el camino correcto, recoger artefactos, interactuar con distintos tipos de criaturas marinas, y todo con unos gráficos preciosos, que te dejan embobado. No solo por su buen gusto artístico, sino además por una ejecución técnica sin fisuras, perfecta, como pudimos comprobar en su versión para PlayStation 4, que se mueve como la seda.
El suave y accesible control y la libertad de poder movernos bajo el agua sin miedo a quedarnos sin oxígeno, proporcionan una experiencia relajante, podríamos decir incluso zen, aunque también habrá momentos de tensión, ya que no todas las criaturas que nos encontraremos en el fondo del mar serán amistosas. Las que no sea hostiles nos permitirán interactuar con ellas, y podremos agarrarnos a enormes peces o rayas, mimetizarnos con preciosos bancos de peces multicolor, o subirnos al caparazón de una simpática tortuga.
También en esta demo nos topábamos con unos drones submarinos que teníamos que ir "despertando", y que nos acompañaban a indicaban el camino, hasta que un peligroso tiburón se los quitaba del medio. No sabemos apenas nada de la historia, y al parecer será muy críptica, tipo Journey, tratándose de un "descenso emocional en el océano, un viaje personal", en el que esta vez no nos toparemos con otros jugadores, no habrá componente online.
Seguro que a muchos de vosotros todo esto os suena un tanto aburrido, pero el juego es tan bonito, tan relajante, que con el simple hecho de bucear e interactuar con las criaturas marinas, ya pasas un buen rato, entretenido y agradable. En una feria como el E3 con tanto ruido de disparos, coches y música estridente, poder jugar a un juego como este fue una tabla de salvación, que consiguió relajarnos durante unos valiosos minutos.
Por si los parecidos con Journey no fueran pocos, la banda sonora está compuesta por Austin Wintory, el prestigioso músico que todo juego independiente quiere tener entre sus filas. El sonido en un juego como este que se desarrolla íntegramente debajo del mar es muy importante, y Giant Squid ha dado en el clavo. Los sutiles sonidos de los animales, el eco y el silencio, y la bonita banda sonora, le sientan como un guante a los gráficos, consiguiendo que se te pase el tiempo volando explorando las profundidades marinas.
Si tanto eres fan de los trabajos de thatgamecompany, como echas de menos vivir aventuras submarinas como las que proponían hace ya muchos años los Ecco the Dolphin de Sega, seguro que este juego ya te ha llamado la atención. No es el primer juego que transcurre íntegramente debajo del mar desde entonces, pero muy pocos han conseguido crear una experiencia tan agradable y bella, en la que estar sumergido y evadirte de todo durante un puñado de horas.
Uno de los mejores indies del E3 2015
Muchos juegos independientes para sobresalir intentan ofrecer algo diferente, ya sea en lo jugable, en lo visual o en ambas facetas, pero muy pocos lo consiguen, en un mercado más competitivo que nunca, en el que salen toneladas de juegos todos los meses. ABZU no solo fue capaz de llamar la atención en el E3 como indie, sino que incluso rivalizó en belleza con cualquier triple A, y muchos estamos de acuerdo en que fue uno de los juegos más bonitos que vimos en toda la feria, sino el que más. Se lanzará a principios de 2016 para PlayStation 4 y PC, y si os gustó lo que propuso Journey, y os atrae el fondo del mar, deberíais esperarlo con muchas ganas.