De planteamiento poco habitual, Afrika y su peculiar jugabilidad destilan un entretenimiento que difiere en demasía con la tónica habitual de lanzamientos entre las consolas del mercado. Exento de los recurrentes géneros que regularmente visitan las listas de los más vendidos, el título que nos ocupa dispara unas posibilidades virtuales algo más educativas que de costumbre. Tanto es así, que la obra de Rhino Studios propone una experiencia repleta de exploración, mediante unos valores de producción profusamente didácticos, y donde la única violencia visual a la que tendremos acceso solo correrá a cargo de las implacables pero inevitables leyes de la naturaleza. Bella y cruda, la sabana africana electrónica nunca estuvo tan cerca.
Sin demasiados detalles acerca de nuestra profesión en el juego, lo cierto es que deberemos controlar a un personaje que bien podría pasar por un explorador empedernido que realiza reportajes para una cadena de televisión, así como un científico entregado al estudio y conocimiento de la estepa africana.
De una manera u otra, el título nos irá marcando una serie de objetivos a modo de desafíos en los que deberemos salir a la búsqueda de diversos animales, para posteriormente grabar sus comportamientos y confeccionar fichas con valiosa información.
Debido a la cantidad ingente de especies africanas, cada animal seguirá unas pautas calcadas a las de su homólogo en la realidad, por lo que de querer tomar instantáneas de una fiera peligrosa para nuestra integridad, deberemos agazaparnos entre la maleza e ir aproximándonos a nuestro objetivo poco a poco. Entre el material más preciado, optaremos a tomar imágenes de cómo cazan, se alimentan de sus presas, o incluso se aparean ajenos a las miradas de un extraño.
Por supuesto, el número de especies que presentará el safari será de los más completo, yendo desde los omnipresentes leones, jirafas, zebras, o hienas, hasta los buitres negros, facoqueros, guepardos, y los divertidos suricatos. Así, la lista se agrandará hasta el punto de que cualquiera que sea nuestro animal favorito de la llanura africana tendrá su representación en el juego. Recientemente, y a través de una serie de vídeos promocionales, hemos podido ver el uso de un jeep en el transcurso de la aventura, por lo que es de prever que se nos dará la posibilidad de recorrer ciertas distancias en busca de determinados animales. La libertad de la que gocemos entorno a ese elemento para trazar kilómetros, es ya otra cuestión todavía sin resolver.
Tal y como comentábamos, la idea ya no es solo la de bonificarnos en función de nuestras instantáneas sobre el terreno, sino de cómo sin apenas darnos cuenta, se nos ofrece la oportunidad de compartir la rutina diaria de multitud de animales. Y es aquí, donde aquel componente educativo al que hacíamos alusión reclama su auténtico protagonismo, haciéndonos partícipes de lo visual en la jerarquía de las distintas clases de animales, de cómo se organizan pacientemente para cazar, así como de su aprendizaje y evolución al tratarse de los ejemplares más jóvenes de la camada. Todo aquello que podríamos ver en algún canal de televisión sobre el mundo animal será susceptible de aparecer en esta creación atípica de Rhino Studios, acercándonos a un mundo salvaje y repleto de detalles por asimilar.
De nuevo, el importante grado de deleite visual que acompaña al título le valdrá para plasmar unas animaciones específicas para cada especie y cada situación, resultando fantástico contemplar cómo una manada de zebras salen huyendo en estampida alertadas por un hambriento y voraz enemigo. Por su parte, los distintos escenarios se fundirán en un bello marco donde los animales verán ponerse el sol, o cómo cae la noche y los atardeceres transcurren sin remedio, todo ello bañando los entornos con una iluminación nuevamente espectacular. A todas luces, el conjunto global del que podremos disfrutar bien sería mecedor de constar en cualquier enciclopedia sobre la misma temática.
Visto lo positivo pero, lo cierto es que en la otra cara de la moneda, Afrika sigue sin tener una fecha concreta para el mercado europeo, siendo los japoneses los únicos privilegiados que podrán disfrutar de la entrega a partir de agosto de este verano. Quizás, se hecha en falta más detalles concretos sobre el transcurso del safari, así como de que manera influirán nuestros progresos a la hora de elaborar un sistema de bonificaciones que sea capaz de recompensarnos, quedando en el aire si existirán distintos ítems para ir coleccionando (como el coche teledirigido del último vídeo sobre el que montar nuestra cámara) y perfeccionando tal vez nuestro equipo de reporteros. Finalmente, el uso de las capacidades online para compartir fotografías o fichas de los animales sigue siendo una incógnita, dejando patente que ha existido un pequeño hermetismo a la hora de aclarar ciertos aspectos.
Sin apenas compañeros dentro de su concepción (el más reciente lo encontramos en el mundo submarino de Endless Ocean para Wii), Afrika nos recuerda que tras batallas para salvar a la humanidad, guerras recurrentes a la par que rentables, y partidos de fútbol que se repiten hasta la saciedad, existe la posibilidad de viajar hasta la mismísima llanura africana, y no descuidar la diversión al tiempo que aprendemos conocimientos dignos de un libro de texto especializado. Cámara en mano, el sol de la sabana brilla con fuerza.