Pocos cazadores de monstruos hay que sean más famosos que Van Helsing, cuyas aventuras ya han sido trasladadas a todo tipo de medios, a pesar de que no todas sus adaptaciones han conseguido mantener el nivel de calidad deseado por los fans, como la más que cuestionable película del 2004 protagonizada por Hugh Jackman y su consecuente videojuego. Ahora, NeocoreGames está preparando un nuevo juego que a diferencia de lo que su nombre podría indicar, no nos pondrá en la piel del famoso cazador, sino de su hijo.
The Incredible Adventures of Van Helsing nos llevará a un universo inspirado en la Europa del siglo XIX, donde los monstruos y la magia son algo muy real. En el papel del hijo de Van Helsing, al que podremos ponerle nombre, acudiremos a las tierras de Borgovia, un país ficticio que no tardará en verse amenazado por extrañas máquinas y unas abominaciones resultantes de terribles experimentos.
Para trasladar esto a nivel jugable, NeocoreGames ha decidido apostar por un estilo de juego al más puro estilo Diablo. Por lo tanto, desde una perspectiva aérea podremos controlar a nuestro personaje mientras nos enfrentamos a todo tipo de criaturas haciendo uso de toda clase de armas y magias.
Lo primero que nos ha llamado la atención es que ya desde el minuto uno los enfrentamientos resultan muy numerosos y masivos, dejándonos claro que siempre estaremos en amplia inferioridad numérica. Cuando veáis a un enemigo tened claro que no estará solo y que tendrá como mínimo a diez "amigos" más para respaldarle, obligándonos a estar siempre atentos a nuestro indicador de vida para tomarnos pociones o curarnos con magias cuando lo veamos necesario.
Por suerte, no estaremos solos en nuestra particular lucha contra el mal, ya que Katarina, la fantasma de una joven noble de Borgovia, nos acompañará durante toda la aventura, resultando ser uno de los mejores añadidos del título. Su comportamiento y forma de actuar podremos personalizarlo en un completo menú para decidir si queremos que ataque cuerpo a cuerpo, a distancia o se mantenga en forma espectral de modo que no pueda ser dañada. También nos permitirá escoger los tipos de objetos que queremos que recoja, mandarla al pueblo a comprar pociones y decidir los blancos que necesitamos que priorice.
Además de sus utilidades jugable, Katarina tiene mucha personalidad y no dudará en hacer todo tipo de comentarios jocosos e irónicos a la mínima que tenga una oportunidad, lo que combinado con el carácter serio de Van Helsing da como resultado una pareja atractiva, con mucha química y que conseguirá sacarnos más de una sonrisa con sus conversaciones.
Uno de los aspectos más importantes de este tipo de juegos suele ser el de la personalización. Aquí no decidiremos el aspecto de nuestro personaje, aunque sí guiaremos su evolución y desarrollo. Por cada nivel que subamos podremos repartir puntos entre nuestras cuatro estadísticas principales (cuerpo, destreza, voluntad y suerte) y escoger nuevos ataques y magias de nuestro árbol de habilidades. Este último a primera vista puede parecer muy complejo y lleno de opciones, aunque no tardaremos en darnos cuenta de que es más simple de lo que aparenta, ya que solo hay unas pocas habilidades principales y el resto de iconos solo nos servirán para añadirles potenciadores.
Eso sí, ofrece las suficientes alternativas como para diferenciar a nuestro Van Helsing del de otros jugadores de una forma más que notable. Además, cada vez que subamos nuestro nivel de reputación podremos adquirir una mejora permanente, como volvernos inmune durante cuatro segundos cuando nos vayan a matar, más daño o una página extra para el inventario. Por último, señalar que también tendremos que controlar la evolución de Katarina, decidiendo las estadísticas que queremos que suba, y escogiendo y mejorando sus habilidades pasivas, las cuales pueden llegar a resultar especialmente útiles.
En cuanto al equipamiento, tal y como cabría esperar en un juego de este tipo, todos los objetos que obtengamos tendrán estadísticas aleatorias, por lo que nos tocará valorar constantemente cuáles nos convienen más en nuestra búsqueda por alcanzar el equipo perfecto. Por otro lado, la organización y administración del inventario resulta muy clásica, ya que cada objeto ocupa un determinado número de casillas, aunque no nos tocará jugar al Tetris para optimizarlo, ya que existe un botón para tal fin que hará esto automáticamente por nosotros.
En lo que respecta al desarrollo de la aventura, esta está estructurada en misiones que o bien nos darán los habitantes de los pueblos o las encontraremos explorando los mapas. A pesar de que la mayoría de ellas consisten en ir a un determinado lugar, explorar una mazmorra, acabar con un jefe o recolectar objetos, el título suele apañárselas para ofrecer alguna que otra sorpresa en forma de puzle o de evento inesperado que ayudan a la hora de añadir variedad. Además, el ritmo de los combates está muy bien medido y al tener que enfrentarnos a tantos enemigos a la vez apenas nos quedará tiempo para aburrirnos.
Gráficamente no está nada mal, con unos buenos modelados de personajes, escenarios muy detallados, efectos gráficos resultones (nos ha encantado cómo reacciona la hierba a nuestro paso y al de los enemigos) y texturas de alta calidad. Artísticamente tampoco tenemos nada que reprocharle, ya que la ambientación oscura y gótica de la que hace gala le sienta perfectamente y el diseño de los monstruos (licántropos, arpías, etcétera) está muy conseguido. Como punto negativo, mencionar que hay algunos escenarios concretos en los que el motor gráfico se resiente, aunque la tasa de imágenes por segundo no suele dar demasiados problemas por lo general.
Finalmente, en lo que respecta al sonido, mencionar que cuenta con una banda sonora meramente ambiental, no demasiado inspirada y que se repite más de la cuenta, ya que las composiciones no son especialmente largas. El doblaje, en inglés, tampoco es gran cosa y las únicas voces rescatables son las de Van Helsing y Katarina, aunque no os esperéis unas interpretaciones de Oscar.
Este primer contacto con The Incredible Adventures of Van Helsing nos ha servido para darnos cuenta de que estamos ante un título muy conservador con el cual no se pretende revolucionar el género. Eso sí, de momento nos está pareciendo un producto muy correcto, entretenido y lo suficientemente divertido como para hacerse un pequeño hueco en el mercado. Todavía nos queda mucho más por ver, como su modo multijugador (la razón de ser de este tipo de juegos), pero todo apunta a que el hijo de este famoso cazador hará honor al nombre de su padre.