En los últimos años, hemos sido testigos de un resurgimiento notable en la popularidad de los videojuegos de skate. Este renacimiento, impulsado por una combinación de nostalgia y una nueva generación de jugadores, ha llevado tanto a recuperar clásicos como la saga Tony Hawk's Pro Skater o su rival más directo, Skate, como a la creación de títulos independientes que buscan ofrecer simuladores, como Session o experiencias más locas, como este Helskate que hoy nos ocupa.
El caballero sobre cuatro ruedas
Helskate es un título de monopatines y acción en tercera persona que, básicamente, calca la propuesta de los Tony Hawk's Pro Skater clásicos y le añade un componente de acción y un formato roguelike similar al de Hades. Esto significa que en cada nivel, además de desafíos de puntuación, alcanzar una zona concreta, conseguir las letras de HELSK8 o destrozar ciertos elementos, nos esperan enemigos a los que tendremos que derrotar. Por supuesto, si los derrotamos podremos elegir qué ventajas queremos obtener de cara al siguiente nivel, que pueden ser temporales o pueden ayudarnos a conseguir mejoras permanentes.
Entre pelea y pelea, también tenemos tiempo para patinar. Una vez derrotamos a los rivales podemos dedicarnos a explorar los escenarios y completar los desafíos de manera prácticamente idéntica a los juegos de Neversoft, con la diferencia de que no tenemos tiempo límite. Cuando estemos listos podemos pasar al siguiente nivel y cuando, llegado el momento, muramos, iremos al centro comercial que sirve de zona central.
Aquí iremos descubriendo la historia de Anton Falcon (sí, no es broma) junto a la de otros personajes que nos ayudarán a lo largo de nuestro periplo por derrotar a los dioses del Vertheim. Durante nuestras incursiones conseguiremos diferentes recursos, como materiales para fabricar nuevas tablas, o diamantes que podemos usar para comprar tatuajes que mejorarán a Anton de manera permanente. Cuanto más lejos lleguemos, más recursos y más raros serán, como os podéis imaginar.
¿Como agua y aceite?
Rollerdrome demostró que se puede hacer un título que combine la jubabilidad de Tony Hawk's Pro Skater y la acción y que salga bien, pero Helskate tiene una propuesta diferente. Aquí tenemos un botón para esquivar, uno para atacar con la espada y otro para hacer una especie de tornado, también con la espada. Luego, podemos obtener diferentes trucos que nos permitirán mejorar nuestros ataques básicos o hacer ataques especiales.
El combate es, generalmente, cuerpo a cuerpo, y los controles de THPS no son precisamente precisos en este sentido. Lo que han hecho los desarrolladores de Helskate es aumentar la capacidad de maniobra, girando 180 grados si pulsamos abajo en vez de frenar. El problema con esto es que la cámara no acompaña, y dar media vuelta al final te descoloca por completo, dejándote con la sensación de que se han invertido los controles.
Curiosamente, donde sí que eran precisos los THPS era en la detección de los trucos, con una respuesta prácticamente perfecta. Aquí hemos tenido algunos problemas para enlazar trucos o para hacerlos rápidamente. Teniendo en cuenta que a veces es necesario poder hacer un truco rápidamente para atacar, creemos que todavía queda por pulir un poco la respuesta de los controles. Pero bueno, el juego debuta en acceso anticipado por una razón.
Por lo demás, el combate es muy interesante y divertido, animándonos poco a poco a combinar habilidades y trucos ya no sólo para derrotar, sino para alcanzar a los enemigos que cada vez aparecen en sitios menos accesibles. Hay una buena variedad de escenarios (que podemos desbloquear para el modo libre completando los desafíos de cada uno) y de enemigos, incluyendo jefes finales gigantescos que requieren llegar hasta sus puntos débiles para derrotarlos.
Explorando el Helskate
En lo técnico, Helskate es un título muy sencillito, pero con una dirección artística muy buena que no sólo le da personalidad, sino que sabe contar una historia según progresamos entre niveles. Esta versión en acceso anticipado nos ha funcionado genial en el ordenador que veis bajo estas líneas, y aunque los desarrolladores nos han pedido que no juguemos en la Steam Deck porque ahora mismo es un poco inestable (de nuevo, comprensible al ser un juego en desarrollo), lo hemos probado por curiosidad y no sólo va genial sino que tiene una opción gráfica para adaptarlo a la portátil de Valve.
En lo sonoro, tenemos una banda sonora bastante punkarra y los sonidos que caben esperar de este tipo de juego. Nada del otro mundo, pero que cumple perfectamente su cometido. Además, todos los diálogos tienen voces, si bien, por ahora, el juego está completamente en inglés. Suponemos que, según avance en su desarrollo, se incluirán otros idiomas, pero con un nivel basiquísimo de inglés se puede jugar perfectamente.
El infierno sobre el patín
Estas primeras horas sobre el patín de Helskate han sido muy positivas y divertidas. Creemos que hay que pulir un poco los controles para hacernos sentir más en control de Anton Falcon, pero si durante su fase en acceso anticipado sus creadores consiguen mejorar este apartado, Helskate puede ser un imprescindibles para los fans de Tony Hawk's Pro Skater. Por ahora, lo que tenemos entre manos es un título muy disfrutable que incluso podemos recomendar siempre y cuando no os importen las carencias mencionadas.
Hemos realizado este análisis en PC (Ryzen 7 3700X, GeForce RTX 2070 Super, 32 GB RAM) gracias a un código de descarga proporcionado por PopAgenda.