Ubisoft ha demostrado que con talento y perseverancia, casi cualquier juego puede convertirse en un éxito. Es encomiable el esfuerzo que la compañía francesa pone en apoyar a sus juegos, incluso si su lanzamiento no es el mejor. Prueba de ello es el último Rainbow Six, que ya suma más de 50 millones de jugadores, o incluso Ghost Recon: Wildlands que, siendo una nueva IP, ha conseguido construir una notable comunidad con el paso de los años. Dentro de muy poco podremos disfrutar de su secuela, Ghost Recon: Breakpoint.
Gameplay comentado
Dispara con cuidado
Ghost Recon: Breakpoint es la nueva entrega de la saga de acción y combate táctico con énfasis en la tecnología militar de Ubisoft, basado en el universo de ciencia ficción militar de Tom Clancy, y con un importante enfoque multijugador para hasta cuatro jugadores; aunque, por supuesto, puede jugarse en solitario. Ante nosotros tenemos un extensísimo mapa en el que se alberga una, de igual manera, extensísima cantidad de misiones, aunque la beta que hemos probado apenas nos deja probar un adelanto: una principal, una secundaria y varias menores.
Lo más importante, para quienes no estén familiarizados con esta vertiente de Ghost Recon, es que se trata de un título mucho más exigente que otros similares, como The Division, ya que requiere un acercamiento táctico al combate. Es importante planear con antelación, estudiar el comportamiento enemigo, la mejor ruta de acceso al objetivo... Que nos se os ocurra meteros a pegar tiros alegremente porque, ni en la dificultad más fácil, aguantaríais vivos mucho tiempo.
Tenemos gran cantidad de herramientas a nuestra disposición para realizar la operación con éxito, que van desde drones para explorar y marcar objetos desde el aire (como buen juego de Ubisoft), gafas de visión nocturna, e incluso habilidades, como opciones para sincronizarnos con nuestros compañeros y realizar bajas simultáneas.
Es aquí donde brilla más Ghost Recon: Breakpoint. Cuando estamos en una misión propiamente dicha, con nuestros amigos, planeando la estrategia, buscando la mejor manera de entrar, infiltrándonos o incluso cuando nos detectan y tenemos que abrir fuego, nos lo pasamos genial. Todo lo demás, no nos termina de convencer tanto.
Lo que hemos podido ver nos ha parecido bastante genérico, con muchos momentos de desplazamiento en los que no pasa nada. Varias misiones se limitan a ir a un sitio y coger algo, algo tremendamente fácil si utilizas el sistema de indicaciones, y tremendamente tedioso si lo desactivas.
Y es que Ghost Recon: Breakpoint nos permite, como en Assassin’s Creed, desactivar los indicadores y, simplemente, recibir pistas para ir al siguiente objetivo. Y con un mapa tan absolutamente gigantesco, nos puede llevar fácilmente media hora ir de A a B y encontrar un coche escondido entre árboles. Aun así, entendemos que hay jugadores que disfrutan con este realismo, y está bien tener la opción.
La verdad es que, jugando con amigos, todo es mucho más llevadero. Estamos siempre hablando, e incluso haciendo el cabra, y los paseos y las misiones de relleno se hacen mucho más llevaderas. Por supuesto, podemos personalizar a cada personaje para tener una escuadra especializada en diferentes tareas.
Hasta donde alcanza la vista
Ubisoft ya le tiene cogida la medida a las consolas, y técnicamente es capaz de ofrecer gráficos increíbles. Ghost Recon: Breakpoint nos deja con la boca abierta constantemente gracias a sus entornos muy, muy detallados, unos sólidos efectos de iluminación y una increíble distancia de dibujado, algo particularmente destacable en un mapa tan gigantesco como éste.
Apenas hemos podido ver cuánto van a dar de sí estos entornos, pero hemos visto que, además de albergar las misiones, cuentan con recursos que podremos usar para crear elementos que nos ayudarán a sobrevivir, ya sean curando nuestras heridas o mejorando nuestras estadísticas temporalmente.
En Xbox One X, donde lo hemos probado, se mueve a 30 imágenes muy estables, salvo en el interior de la montaña, una especie de hub donde tenemos tiendas, misiones y, además, podemos encontrarnos con otros jugadores, algo habitual en muchos juegos actuales. Incluso si aquí hay caídas, tampoco nos parece un problema, ya que no vamos a disparar en esta área.
Ghost Recon: Breakpoint parece poner un gran énfasis en la narrativa, contratando a actores de renombre como Jon Bernthal para encarnar a uno de los personajes principales, y aunque el conjunto de la historia parece interesante, lo que nos van contando los NPC nos da un poco igual. Hemos visto sólo el inicio, pero cuando una historia no te atrapa desde el principio, suele ser difícil que lo acabe consiguiendo.
Más, más, más
Ghost Recon: Breakpoint es abrumador, para bien y para mal, y eso que no hemos visto todavía el JcJ. Estamos seguros de que jugando con amigos nos lo vamos a pasar genial, pero no podemos evitar tener la sensación de que Ubisoft está demasiado centrada en priorizar la cantidad antes que la calidad. Esto no quiere decir que el juego vaya a ser malo, ni mucho menos, sólo que, en lugar de ofrecer un mapa gigantesco sin personalidad, puede ofrecer uno más pequeño repleto de lugares icónicos; en lugar de ofrecer 200 misiones de las que sólo cinco son memorables, ofrecer 30 mucho más elaboradas.
Aun así, Ubisoft tiene su plantilla para hacer triple A y sabe que esa base es muy entretenida, y Ghost Recon: Breakpoint va a seguirla para ofrecernos una aventura en la que podremos invertir horas y horas para descubrir lo mucho que tiene que ofrecer.
Hemos realizado estas impresiones en Xbox One X descargando la beta de la Store.