Mayo de 2006. La selección española de fútbol jugaba con la estrategia del patapum pa'arriba, Dover aún era un buen grupo de música y un sitio llamado Youtube empezaba a ser conocido entre los usuarios de Internet. PlayStation 3 ni siquiera estaba a la venta en Japón cuando Square Enix anunció mediante una secuencia generada por ordenador, en el E3 2006, Final Fantasy Versus XIII. El proyecto se encontraba en las primerísimas fases de desarrollo pero nadie habría podido creer en su momento que el proyecto se eternizase lo suficiente como para reaparecer en el inicio de otra nueva generación –PlayStation 4 y Xbox One-, en pleno 2013, rebautizado como Final Fantasy XV.
Algo que sin embargo era previsible desde hace meses: ya no tenía sentido la referencia a XIII ni quedar a la sombra de las nuevas máquinas -aunque por la base de consolas pudiera ser muy apetitoso mantenerlo en PS3-. La compañía también está poniendo a prueba su nueva herramienta, el Luminous Studio, que será la base de muchos proyectos venideros. ¿Qué mejor que debutar por la puerta grande con su saga más superventas?
Gran parte del trabajo en diseño o jugabilidad ya estaba avanzado cuando el equipo de Tetsuya Nomura decidió cambiar de sistemas, algo que sucedió en 2011, coincidiendo con el rebautizo de Final Fantasy Agito XIII –por Type-0- y la presentación a los estudios de los primeros prototipos de las nuevas consolas. Durante algún tiempo la idea fue lanzar el juego en las dos generaciones, una estrategia que seguirán varios títulos de lanzamiento a finales de año como Assasin´s Creed IV o Battlefield 4, pero la idea fue desechada cuando se empezó a ver la complicación de realizar dos versiones tan diferentes a nivel gráfico y con motores incompatibles.
Final Fantasy XV utiliza un motor propio que hace uso de DirectX 11 y herramientas de Luminous Studio, especialmente aquellas relacionadas con la iluminación –que parece ser uno de sus puntos fuertes-. El desarrollo de esta tecnología ha evolucionado según las necesidades de XV, así por ejemplo se incluyeron entornos destruibles o una cámara que en las cinemáticas simula mejor los efectos de los vídeos generados por ordenador. La escala y nivel de detalle a corta distancia demuestran que no se trata de una adaptación directa de la versión original, al menos a grandes rasgos.
La presentación ya como Final Fantasy XV permite a la compañía hablar abiertamente del juego y desvelar nueva información que durante años se había guardado en secreto. No mucho sobre la jugabilidad por el momento, que se mantiene lo conocido del viejo Versus XIII, pero sí sobre el argumento y personajes principales, que gira en torno al único cristal –el elemento que daba conexión con XIII- del Reino de Lucis bajo el mando de Regis Lucis Caelum.
Tras un periodo de paz con el estado Niflheim, éste desactiva el sistema de protección para lanzar una invasión que probablemente culmine con la escena del tráiler del E3 2013, una ciudad en caos, la enorme invocación marina Leviatán y el Príncipe Noctis Lucis Caelum formando la resistencia junto con un grupo de fieles amigos. Tenebrae, Solheim y Accordo son otros territorios conquistados por Niflheim, reinos que tuvieron sus propios cristales pero que los perdieron por las guerras. Debido a ello, estas civilizaciones han decantado sus esfuerzos al armamento en lugar de progresar culturalmente, siendo Lucis el único reino con tecnología avanzada mientras el resto se mantiene casi a nivel medieval.
Noctis es el héroe de esta historia, un joven rebelde que no se comporta tal y como se esperaría de su clase social. Su diseño parece poco alterado desde su primera presentación –en el diseño de la ropa, pero sigue siendo completamente oscura-, al igual que sus habilidades con la magia y las armas. Tras un accidente en su juventud, el protagonista tiene el don de predecir la muerte de otras personas, algo que podría darle una ventaja al conocer de antemano el ataque al reino. Según la mitología de XV, Noctis ve una luz proveniente de los cielos que representa a la diosa Etro abriendo las puertas del mundo de los muertos cuando se aproxima un fallecimiento. Noctis se tomará este poder casi como una maldición.
Sus compañeros son Gladiolus, un leal noble algo más adulto que Noctis; Ignis, que representa la inteligencia y la razón, estaba destinado a ser parte del consejo del futuro Rey; Prompto, socialmente de menor rango y se describe como un playboy que seguirá a sus amigos allá donde vayan; Cor Leonis es otro miembro por encima de la media de edad del grupo, un jefe de la élite militar que ha jurado lealtad al Rey, y por tanto al Príncipe, –lo que no impide que se mantenga un poco distante del resto de la banda, con los que no tiene obligación laboral de protección-.
Hay otros personajes menos perfilados hasta la fecha. Stella Nox Fleuret es la chica rubia que pudimos ver en varias secuencias de Versus XIII, que pertenece a la familia Fleuret del reino Tanebrae. También tiene el don para presentir la muerte de otras personas, y suponemos que en algún punto de la trama se unirá al equipo. A diferencia de Noctis, Stella considera el don como algo positivo y lo acepta. Su personalidad parece ser un contraste claro con Noctis: es maneras educadas y no teme enfrentarse a los problemas directamente.
En cuanto a la jugabilidad, no parece haber grandes cambios respecto a la idea original. Es un Final Fantasy mucho más enfocado al rol de acción que los anteriores, una clara tendencia por agilizar los combates que ya tuvo en Final Fantasy XII un cambio importante, de ahí que a XV/Versus popularmente se le haya comparado con un Kingdom Hearts sin personajes Disney. Nomura ha confesado que en algún momento se planeó que la acción llegó a desplazar el rol hasta el punto de ser un juego de acción puro, eliminando la interfaz rolera –puntos de vida- y restringiendo el personaje jugable sólo a Noctis. Finalmente se optó por algo intermedio ya que el equipo tenía claro que "no hay que olvidar que es un Final Fantasy antes que un juego de acción".
Durante las luchas en tiempo real disponemos de comandos de ataque, magia, objetos e incluso saltos dobles, con hasta tres personajes de nuestro grupo en acción que podemos pasar a controlar manualmente –el resto es de imaginar que funcionarán con un sistema de inteligencia artificial tipo "gamits"-. Noctis será siempre obligatorio en el grupo, y es el único que ofrece flexibilidad en cuanto a tipo de combate y armas –espadas, armas de fuego, lanzas, hachas, algunas con opción de ser usadas como protección-, mientras que los secundarios están especializados en una tarea concreta. Será posible realizar combos tanto cambiando las armas en tiempo real como por ataques conjuntos, robar armas, mechas y vehículos de los enemigos. Noctis tiene una habilidad de teletransportación muy práctica con la que puede desplazarse a lugares inaccesibles de otro modo, lo que da al combate una verticalidad novedosa para la saga.
Square Enix está potenciando la espectacularidad del juego para que tenga un aspecto más cinematográfico que nunca, sin transiciones bruscas entre jugabilidad, secuencias y combates. Como ahora la lucha transcurre en el propio escenario de exploración –personajes y enemigos no se desplazan a un área preparada, vacía y limpia de obstáculos-, la estrategia tendrá un papel importante para esquivar o protegerse de ataques físicos potentes mediante obstáculos físicos, aunque el alto grado de destrozos en objetos permite que uno de los enormes bégimos rompa columnas o levante por los aires los coches con las cornadas. ¡El paisaje de una zona urbana quedará irreconocible tras una pelea!
Tetsuya Nomura comentó hace años que Final Fantasy XV –por aquel entonces Versus XIII-, a pesar de los muchos cambios jugables que introducía, también devolvía parte del espíritu clásico recuperando un mundo con ciudades, terrenos a explorar y vehículos como las naves voladoras, coches y chocobos, junto con un sistema de día y noche que afectará a la peligrosidad de los monstruos con los que nos crucemos. Se espera visitar más ciudades y aldeas de diferente arquitectura –ya que el argumento habla precisamente de esas diferencias culturales-, pero hasta el momento casi todo el material se centra en el Reino de Lucis y algunas de esas llanuras fuera de la ciudad.
Una noticia que no sabemos cómo se tomará por parte de los jugadores es que Square Enix ya avisa ante la posibilidad de ver, por lo menos, un Final Fantasy XV-2. Según Nomura, el juego tendrá un final autoconclusivo, no así las historias de este mundo que podrían continuar centrándose en otros personajes. También se contempla el lanzamiento de episodios y expansiones para mantener la vida de XV durante mucho tiempo, en lugar de la estrategia actual con los juegos de XIII, cuyo contenido descargable se ha centrado principalmente en apariencias y otro tipo de novedades menores. En cualquier caso, el desarrollo parece marchar tan bien como para que la compañía ya esté planeando el futuro tras su lanzamiento.
Luminous al final del túnel
En cuanto a información de Final Fantasy XV podríamos pensar que estamos en el mismo punto que hace siete años, y en parte es cierto. Pero ya no hay vuelta atrás y el lanzamiento, para el que aún queda una espera que se hará interminable –mínimo finales de 2014- está un paso más cerca. Mentiríamos si dijésemos que no es uno de los juegos que más ganas tenemos de probar para comprobar si cumple lo prometido o la expectación ha sido en balde.
La saga se volverá a reinventar desde sus bases, con un cambio en el sistema de combate aún más radical que el visto en Final Fantasy XII que volverá a traer el eterno debate: ¿es un Final Fantasy o no?