Crear un juego tan exitoso como Grand Theft Auto V es el sueño de toda desarrolladora: más de 140 millones de copias vendidas, con ventas que no decaen después de 10 años y un multijugador constantemente actualizado que supone una fuente de ingresos estable –y enorme- para Rockstar. ¿Se puede competir con algo así? Mundos abiertos hay muchos y cada uno con su personalidad, pero ninguna saga ha conseguido equipararse a la popularidad de GTA, ni remotamente. Para un equipo independiente abordar un tema como este es impensable, pero no si la atención se fija en los orígenes más humildes en manos de DMA Design. Eso es precisamente lo que se ha propuesto Jutsu Games con Rustler, el llamado "Grand Theft Horse". Nosotros ya lo hemos probado y os contamos nuestras primeras impresiones.
Este estudio indie no esconde en ningún momento su inspiración, más bien al contrario: es el gancho que buscan para no caer en el olvido a los dos días en esa gigantesca tienda que es Steam. Rustler entrará en fase de Acceso anticipado el 18 de febrero, momento en el que seguro que muchos veteranos de GTA sentirán curiosidad por jugar a este mundo abierto con vista cenital que cambia la temática de mafias y crimen moderno por la época medieval. Lo cierto es que hay otros ejemplos relativamente recientes que han seguido los pasos de DMA Design en los últimos años, se nos ocurre el genial Retro City Rampage, pero la ambientación parece lo suficientemente fresca como para distanciarse de la competencia.
"Grand Theft… ¡Arre!"
La verdad es que Rustler podría pasar sin muchos problemas por un mod actualizado de GTA 2, porque en todo momento recuerda a la saga de Rockstar pero trasladando la acción siglos atrás. Por supuesto, sin tomarse muy en serio a sí mismo y consciente de la parodia, así que no estamos ante una especie de simulador medieval al estilo Kingdom Come: Deliverance ni una épica fantástica del tipo The Elder Scrolls o Dark Souls; en ese sentido, estaría más cerca de las aventuras de (Des)encanto, la serie de Matt Groening, más los guiños a Los caballeros de la mesa cuadrada de los Monty Phyton, pero potenciado con un humor irreverente que no duda en salpicar gráficos y diálogos con anacronismos. La combinación es peculiar, como mínimo.
Rustler está protagonizado por el genérico Guy, "alguien cuyos padres fueron demasiado vagos como para ponerle un nombre" según sus creadores. La primera toma de contacto de su versión en desarrollo es un pequeño tutorial de sus sistemas básicos, como el combate y el desplazamiento. Simplemente encara a un oponente –por ejemplo un borracho- y dependiendo del click en el ratón se golpea o se protege; si se hace en el momento justo, la defensa se convierte en una evasión. Bastante simple a decir verdad, aunque más adelante tenemos la opción de empuñar espadas, lanzas, ballestas y otras armas más letales o prácticas. No obstante, no estamos ante un beat’em up ni nada por el estilo, se utiliza en momentos puntuales o para resolver cualquier situación donde las palabras ya no tienen sentido.
Otra de las curiosidades de esta adaptación al medievo es el robo de coches de GTA, sustituido por el de caballos. Aunque el mapa es de tamaño medio –no una dimensión descomunal, al menos hasta donde hemos visto- nadie espera que cruces hasta la otra punta a pie, y si ves un caballo "sin dueño" o incluso montado, te lo puedes apropiar. Acércate a su jinete, tíralo y sal cabalgando antes de recibir un castigo por parte de su propietario o la policía. Sí, como era de imaginar, los robos, actos vandálicos o atropellos a inocentes transeúntes llamará la atención de la policía –acompañada de las características sirenas- que no dudará en perseguirnos a gran velocidad. Os recomendamos tener clara una ruta de escape porque pueden echar por tierra tu misión con facilidad, son muy agresivos y persistentes, y hasta que te equipas bien tus manos desnudas no son rival para las fuerzas del orden.
El resto de Rustler es exactamente como imaginas: un GTA con caballeros, villas amuralladas, personajes y sectas de lo más variopinto, granjas, el imprescindible minijuego de carreras de caballos, personalización de los equinos para dar esquinazo a los guardias, encargos de dudosa legalidad, bardos que sustituyen a las radios de un GTA, canciones de hip-hop que no pintan nada, pintadas al estilo graffiti y una historia no lineal que es el mejor homenaje a los mundos abiertos de los 90, cuando la tecnología no daba para crear un Shenmue o GTA III. Pero, en el fondo, las misiones no difieren mucho de lo que veríamos en mundos 3D más potentes, la única diferencia es la perspectiva.
Se trata de un producto en desarrollo y en el futuro os contaremos más de las aventuras de nuestro Guy, dispuesto a participar –¡y ganar!- el Gran Torneo. Por lo pronto el único aspecto que no nos ha gustado demasiado es el control a la hora de manejar el caballo en las situaciones de mayor tensión; para aclarar esto, comentar que el juego ofrece dos tipos de desplazamiento, orientado según la pantalla –la tecla W siempre es arriba- y orientado hacia la posición del ratón –en este caso, W se dirige hacia la posición del cursor-, pero sobre un caballo o carreta pasa a un control tanque –W avanza en la dirección que encara, para cambiar hay que girar-. Cuesta un poco acostumbrarse y se convertirá en la causa de no pocos choques con los obstáculos durante las huidas de la policía -los caminos fuera del núcleo urbano son irregulares y no siempre predecibles-. Es una de las críticas más constantes al Acceso anticipado así que no nos extrañaría que en la versión final sea menos engorroso.
Rustler no presenta grandes problemas en la fase en la que se encuentra y ya incluye textos traducidos al español –la mayoría de voces son sonidos guturales o balbuceos-, cualquier jugador podrá seguir los objetivos sin problemas de idioma. A nivel gráfico está bastante cuidado para lo que podríamos esperar de una producción de este tipo y sólo echamos en falta una mayor variedad de escenarios dentro de lo posible –es lógico que gran parte del escenario transcurra por bosques, pero se hace monótono- y algún que otro efecto mejorable, como el agua, que dependiendo de la iluminación no siempre parece lo que debería ser.
"Jode a tantos como puedas para ganarte la mitad del reino"
Apenas estamos rascando la superficie del contenido de Rustler, que incluye un sistema de progreso para mejorar aspectos de combate, ataque con proyectiles, aspectos sociales o montura –por ejemplo, recoger objetos sin necesidad de bajar del caballo-. Por supuesto a largo plazo tiene que demostrar que no sólo es una parodia absurda de GTA, sus misiones necesitan suficiente variedad, un trasfondo suficientemente interesante y pulir ciertos aspectos de control o el combate, que en este momento son los puntos más débiles de su propuesta. Para eso existe este Acceso anticipado: escuchar la reacción de los usuarios y mejorar todo lo posible una idea que, de hacerse bien, no amenazará el trono de Rockstar, pero sí puede ser una grata sorpresa para los jugadores de GTA en los años 90.
Hemos realizado estas impresiones con un código del Acceso anticipado que nos ha proporcionado Jutsu Games.