Análisis de Rallisport Challenge (Xbox)

Los suecos de Digital Illusions han desarrollado todo tipo de títulos para multiples plataformas desde 1988, año de su fundación, pero es ahora cuando gracias a las buenas relaciones con Microsoft ha centrado la mayoría de sus esfuerzos en la consola Xbox, desarrollando Shrek para TDK, y tanto Rallisport Challenge como Midtown Madnesss 3 para Microsoft, en condición de First Party. De Rallisport Challenge, el primer juego de rallies para Xbox y título de lanzamiento de esta, es de lo que vamos a hablar hoy. Pensado y planeado para el público europeo, Rallisport Challenge fue revelado en el evento X01 de Cannes y es uno de los grandes atractivos del catálogo de lanzamiento de la consola Xbox. Digital Illusions no es una compañía novata en los juegos de carreras o rallies, pues títulos como Nascar Heat, Swedish Touring Car Championship o Rally Masters se encuentran en su haber. Rallisport Challenge no pretende ser un simulador del World Rally Championship en el que nuestro querido Carlos Sainz compite con la diosa fortuna como enemiga y cuya licencia está en posesión de Sony, sino más bien una combinación de todos los tipos de carreras, una especie de combinado de competiciones cuyo objetivo es ofrecer al jugador la mayor variedad y diversión posibles. Rallisport combina las carreras cronometradas tipo WRC con carreras Rallicross al estilo de las vistas en los clásicos Sega Rally. Además, dentro de las carreras conometradas cuenta con las pruebas Hill Climb (subida de colinas) y dentro de las carreras en circuito cerrado se incluye el Ice Racing, carreras sobre hielo donde habrá que controlar el coche al máximo. Con estos cuatro tipos de pruebas Rallisport Challenge intenta ofrecer un juego de rallies con la suficiente variedad para mantenernos enganchados al pad sin cansarnos de seguir la misma dinámica siempre, y lo cierto es que lo consigue. Como la mayoría de los títulos de lanzamiento de Xbox, Rallisport Challenge entra primero por los ojos, y es que el aspecto gráfico de este juego de Digital Illusions dejará con la boca abierta a más de uno, tal vez no al principio, pero sí tras la primera media hora. Digamos que RC no te impresiona como Wreckless, que hace un uso exagerado de efectos de luz y reflexiones, sino de una manera mucho más sútil, sin abusar de florituras técnicas pero sin escamotear ninguna. Así, circuito tras circuito, nos iremos dando cuenta de que los árboles que veremos pasar a toda velocidad están hechos por polígonos y llenos de texturas, de que las montañas nevadas del fondo tienen objetos independientes y no bitmaps, de que la hierba es independiente brizna a brizna y los arbustillos tienen volumen y parecen reales, y de pequeños detalles como la reflexión del sol en la superficie helada, que no llama la atención en un primer momento porque los desarrolladores no lo han querido hacer cantoso. Y todo esto lo mueve la consola con muchos otros detalles más que no voy a enumerar, a un framerate constante y con una facilidad pasmosa, incluso insultante; da la impresión de que los desarrolladores no han tenido que sacrificar nada de cómo tenían pensados los escenarios, y aún así está todo, cada detalle, convirtiéndolo en algo impresionante. Pero dejemos por un momento los gráficos y centrémonos en lo más importante: la jugabilidad. El núcleo de Rallisport es el modo Carrera, que utilizando un sistema de puntos al estilo Kudos/Bizarre nos dejará acceder paulatinamente a más y más carreras, según superemos la barrera de puntuación. El tiempo en el que terminemos un tramo o la posición en la que acabemos una carrera se traducirán en puntos, así como el estado del coche al finalizarla. Sin embargo, el factor puntos no influye tanto en el juego como podría pensarse en un primer momento y no habrá que jugar tanto con ellos como el Project Gotham. El modo está dividido en diferentes campeonatos de diferente tipo, pero todos siguiendo el mismo patrón: competiremos contra otros tres coches/pilotos. Ganara el que consiga más puntos, que casi siempre será el que quede en los mejores puestos. ¿Esto que quiere decir? Que en las competiciones cronometradas "estilo WRC", los tiempos sólo decidirán quien gana cada tramo, y no se acumularán. Esto significa que si ganamos a 15 segundos de ventaja, y luego perdemos por 2 décimas, estaremos empatados, cosa que es un poco extraña y decepcionante, y contra la que no se puede hacer nada. Las carreras Rallicross y Ice Racing son a cinco vueltas, con los otros tres rivales en la pista. En el capítulo de coches tendremos variedad, coches de los cuatros estilos que podrán utilizarse en cualquier tipo de carrera. Alrededor de 25 coches de marcas como Subaru, Mitsubishi, Audi, Saab, Lancia, Ford o Nissan. Los coches tendrán unos datos técnicos y unas características orientativas como Aceleración, Manejo y Velocidad, que realmente no sirven para describir el control del vehículo, ya que al final no suele coincidir. En lo que a jugabilidad respecta, Rallisport Challenge es más arcade que simulador, guardando un notable parecido con Sega Rally, pero sin llegar a tener un estilo propio. Estaremos constantemente derrapando por las carreteras de dios, pero tendremos que tener mucho cuidado de no salirnos demasiado, pues siempre habrá un árbol, una piedra o un bordillo que pueda hacernos chocar y saltar por los aires, pues aunque el control no es tan exigente que en otros simuladores, la física sí lo es, y veremos con más frecuencia de la deseada a nuestro coche saltando por los aires mientras se llena de polvo y se abolla (hasta la cámara cambiará de punto de vista para que lo veamos mejor). En donde el control de la frenada y de los derrapes se vuelve más exigente es en las carreras sobre hielo, donde no será el subviraje, sino el deslizamiento sobre la superficie, lo que hará que nuestro coche se vaya hacia los lados. Sobre el apartado gráfico hay pocas cosas más que decir. Impresionante en todos los aspectos, sólo queda hablar de los coches, que están bien modelados y sobre los que se refleja el escenario, la luz, y todo lo que sea necesario. Los coches sufrirán daños y deformaciones en tiempo real, y se llenarán de polvo, nieve o la partícula que abunde en el circuito. En cuanto al sonido, el de los coches es bueno y diferente con cada bólido, y como podréis comprender no hay mucho más FX en el juego, excpeto los de los choques. Las voces del comentarista de las carreras y del copiloto están en español, sin queja, y la música es de tipo electrónica y compuesta por grupos como Dub Pistols, Soundmine y Fear Factory. Como en Project Gotham, tendremos la opción de editar la lista de canciones y añadir las que hayamos grabado en el disco duro, por lo que podremos pilotar mientras escuchamos a El Puma, Morning Musume o King Africa –incluso a Operación Triunfo-. Finalizando, sólo me queda decir que Rallisport Challenge es un juego alucinante a nivel gráfico y muy divertido. Como juego de rallies parece el sustituto natural de la saga Sega Rally, aunque personalmente prefiera la simulación pura y dura y por lo tanto espero ansioso Colin McRae 3. Aun así, el juego es excelente y muy variado, y para los aficionados al Rally es una compra obligada. A los chicos de Digital Illusions les ha salido redondo su segundo juego para Xbox, al que sólo le falta, no sabría como decirlo, un estilo definido, una personalidad propia. Con este juego, Project Gotham y Wreckless, la consola de Microsoft ya cuenta en su mismo lanzamiento con un impresionante género de conducción. Rallisport Challenge sólo nos deja con una duda. ¿Hasta donde puede llegar Xbox?