Análisis de CastleStorm XBLA (Xbox 360)
Cuando estamos a punto de echar el cierre a esta larga y prospera generación de consolas, seguro que todos estamos de acuerdo en que uno de sus puntos fuertes han sido el descubrimiento y el desarrollo de las plataformas digitales Xbox Live y PlayStation Network, hasta el punto de que estamos seguros que van a ser unos de los puntales de sus nuevas y flamantes máquinas. Gracias a ellas hemos descubierto pequeñas joyas como la que tenemos ahora mismo instalada en nuestro disco duro.
CastleStorm no es muy espectacular, ni muy largo, ni muy original sí lo pensamos bien, pero sí os podemos asegurar que es uno de esos juegos que te enganchan sin remedio desde el primer momento.
La nueva obra de Zen Studios, el estudio húngaro-americano responsable entre otros de Pinball FX2, es un curioso experimento que mezcla soberbiamente estrategia, luchas arcade, y construcción con toques de Angry Birds, de forma realmente acertada y divertida.
Historia y estrategia
La historia nos lleva a algún extraño momento de la época medieval en la que los caballeros luchaban con los vikingos por la posesión de dos poderosas gemas. Cada uno de los bandos tiene una de las gemas, pero ya sabemos que el ser humano, y no tan humano, es inconformista, y siempre desea lo que no tiene. Asumimos el papel de Sir Gareth, un apuesto caballero, que en poco tiempo, ha pasado de ser un simple soldado a capitán del ejército del rey Edgar, en un momento en el que los ataques vikingos empiezan a pasar de simples anécdotas.
Y es que realmente la zona se encuentra en plena batalla, y no solo los vikingos, aparecen como los grandes enemigos del reino. Sir Gareth se tendrá que enfrentar a lo largo de una larga historia con otros caballeros, orcos o dragones, de una forma muy peculiar. Definir el estilo de juego de CastleStorm es bastante complicado, realmente aúna varios estilos de juego en uno.
La historia la iremos viendo en unas secuencias animadas muy divertidas que darán paso a una fase de acción que generalmente consistirá en manejar un castillo situado a la izquierda de la pantalla, encargándonos principalmente de su ballesta, y acabar con el castillo o campamento enemigo de la parte derecha. El manejo de esta ballesta es muy similar a los famosos tirachinas de Angry Birds, teniendo varios tipos de armamento para seleccionar, como la piedra bomba, o la que se divide en tres trozos, también muy similares a los tipos de pájaros de Rovio.
El objetivo, obviamente, es destruir completamente el castillo enemigo lanzándole todo tipo de artefactos, flejas, piedras, bombas, etcétera, o conseguir que nuestros soldados se adentren en el castillo enemigo, roben su bandera y la traigan de vuelta nuestra. Estos ataques de infantería, los desbloquearemos cuando consigamos los barracones, en los que también podremos entrenar a varios tipos de soldados, rasos, arqueros, guerreros, etcétera, y mandarlos a combatir de forma automática por el escenario, cosa que obviamente también harán los enemigos. En este caso, la estrategia consiste en colocar las tropas en el orden adecuado, para que puedan resistir y doblegar a los enemigos. Según avancemos el elevado número de tropas entre las que podemos elegir hará que tengamos que ir variando la estrategia, dependiendo también de los recursos que emplee el enemigo.
El último recurso por si las cosas se complican es mandar al propio Sir Gareth a la zona de combate de la infantería, momento en el cual, durante unos breves segundos, el juego se convierte en un sencillo hack'n slash, durante los cuales manejaremos directamente al caballero pudiendo eliminar decenas de enemigos con su poderosa espada o sus afiladas flechas.
El interfaz del juego puede parecer un poco complejo al principio, pero tras un par de partidas, se vuelve sencillo de manejar. Con el botón ‘A’ accederemos al menú de la ballesta, con el ‘X’ al de los barracones, y con el ‘Y’ al menú de Sir Gareth y de los ataques especiales, moviéndonos luego con los botones LB y RB por las distintas opciones del menú seleccionado. Debido al gran tamaño que presentan los escenarios tenemos también la posibilidad de hacerlo más grande o pequeño con el zoom, lo que complica un poco poner atención a todos los aspectos de la batalla.
Según avancemos, las posibilidades de todos estos menús se nos multiplicarán con nuevas unidades y armas para la ballesta, mejoras de todos tipos, y nuevas estancias para nuestros castillos, que podremos comprar con los créditos que consigamos en las misiones. Estos créditos los conseguiremos tanto por superar la misión, como por conseguir distintos bonus especiales por tiros a la cabeza, o por encadenar rachas de muertes enemigas.
Construyamos nuestro castillo
Unas fortalezas que podemos construir y diseñar a nuestro gusto gracias al sencillo e intuitivo editor de castillos en dos dimensiones que forma parte del juego. Una forma divertida y entretenida de diseñar nuestro castillo, pudiendo situar las torres, protecciones, y las estancias principales en zonas más escondidas, a salvo de los proyectiles enemigos. De todas formas, sí no queremos probar suerte en el mundo del diseño de castillos siempre podremos escoger uno de los predefinidos, según el nivel que tengamos.
El número de unidades y mejoras es tan amplio, que incluso se da el caso de que no podemos seleccionarlas todas a la vez, teniendo que configurar nuestro ejército, no solo en número de unidades, sino también en el tipo de las mismas, al igual que ocurre con los diferentes proyectiles de nuestras ballestas. Estas unidades y armas al principio comienzan siendo reales, pero según avancemos la fantasía se apodera del juego y encontraremos caballeros gigantes, magos sanadores, ataques especiales, ogros, o gigantescas y mortales águilas.
Intercaladas con estas misiones genéricas de combates castillos contra castillos, CastleStorm nos ofrece otro montón de posibilidades bien en misiones principales o secundarias de diferentes tipos que hacen que nunca entremos en la monotonía. Destruir un castillo con armas infinitas en un tiemplo limite, misiones sin infantería, fases de puntería con la ballesta o con el arco de Sir Gareth, o eliminar a un número de oleadas enemigos como si estuviéramos en un típico modo de supervivencia manejando al Sir en un sencillo hack'n slash, que hacen todavía más variado este entretenido juego.
El juego consta con un buen número de reinos y misiones que cumplir que aseguran una vida útil bastante larga del mismo. Cada misión tiene tres niveles de dificultad, llegando a ser bastante complicado avanzar incluso en modo normal según avancemos en la aventura, por lo que el nivel más alto es realmente exigente.
Aparte del modo historia, tenemos otros modos en solitario como escaramuza donde podremos echar guerras castillo contra castillo totalmente personalizadas escogiendo el lado y el bando que queremos defender, supervivencia, donde no existe el castillo enemigo, sino simplemente oleadas de enemigos, una tras otra, y supervivencia de héroe, que es igual pero manejando únicamente a un caballero.
Multijugador
Como es habitual también tiene un completo modo para jugar con amigos en nuestra consola, o mediante Xbox Live. A nivel local podemos escoger entre jugar batallas entre castillos para dos jugadores, en las que pasaremos a una vista en la que veremos dos escenarios completos, uno arriba y otro abajo, manejando cada jugador uno de ellos. Este tipo de vista hace que el tamaño de los escenarios sea muy pequeño, no haciendo que sea muy práctica, a no ser que tengamos una pantalla exageradamente grande.
El modo local se completa con dos modos cooperativos para dos jugadores también. En uno de ellos, un jugador maneja la ballesta, y otro a Sir Gareth, mientras que en el otro, los dos jugadores encarnan a dos caballeros, siendo el objetivo en ambos modos el mismo, superar oleadas de enemigos.
Estos mismos modos, competitivos y cooperativos también se pueden jugar online, aunque en el modo duelo, obviamente, solo veremos nuestra parte de pantalla. Aunque no es difícil encontrar jugadores en los distintos modos, no es modo que a priori aporte mucho.
Gráficos y sonido
Técnicamente, CastleStorm no es, como imaginábamos, un juego puntero, pero sus gráficos estilo comic son realmente simpáticos, y destacan sobre todo la variedad de sus escenarios, la gran cantidad de detalles, y el colorido general de todo el conjunto. También dignas de mención son las secuencias introductorias de cada misión, que destilan un peculiar humor en cada momento contándonos las peripecias del Sir, de sus soldados, y de un peculiar monje que nos acompaña en la aventura.
Asimismo, el sonido y los efectos sonoros también pasan bastante desapercibidos. Como suele ser habitual en los juegos de Xbox Live, cuenta con textos traducidos al castellano, mientras que las voces, apenas un par de frases, están en su idioma original.
Conclusión
De nuevo el bazar de Xbox Live nos trae un gran juego casi por sorpresa. CastleStorm no es espectacular, ni tiene una gran promoción detrás, pero sí es lo suficientemente divertido para que os recomendemos encarecidamente que, al menos, lo probéis. Estamos seguros que su particular mezcla de géneros, con lanzamientos estilo Angry Birds y peleas hack'n slash, la profundidad y variedad de sus castillos, soldados y armas, y su ácido humor, harán que más de uno le hagáis un hueco en vuestro disco duro durante una buena temporada, por apenas 800 Microsoft Points.