Análisis de Bomberman Land Touch! 2 (NDS)

Muchos juegos han tratado de hacer uso de las capacidades especiales de la pequeña de portátil, siendo el género de los minijuegos uno de los más beneficiados con el control de la portátil. Cierto es que no todos estos juegos han gozado de un nivel que los hiciera destacar, pecando la mayoría en la poca variedad de minijuegos que hacía que la duración y la diversión se resintieran. Pero afortunadamente de vez en cuando aparece un buen exponente del género, que a base de esfuerzo por parte de los desarrolladores, nos ofrece variedad y entretenimiento para rato, siendo este el caso del juego que nos ocupa.

Al igual que hizo su antecesor, Bomberman Land Touch! 2 retoma la franquicia alejándola de su jugabilidad original. En esta ocasión se respeta totalmente la estética original, con personajes sencillos y coloristas, pero cambiando totalmente el estilo de juego, siendo en este caso una aventura con minijuegos. Y es que a diferencia de otros títulos que no dejan de ser una recopilación de pruebas sin más, Bomberman Land Touch! 2 nos presenta un mundo central desde el que podremos ir probando suerte en los distintos juegos. Para avanzar por este mundo, deberemos ir ganando piezas que nos permitirán abrir nuevas zonas. Pero esto no será todo, ya que no nos bastará con las piezas que obtengamos ganando los juegos, sino que el juego tendrá un componente de aventura que sin duda presenta un soplo de aire fresco para este tipo de juegos.

De vacaciones al parque de atracciones
La historia del juego nos pondrá en el papel de un bomberman blanco, llamado Blanco Alegre que ha ido junto con sus amigos a un parque de atracciones a pasar el día. Una vez en el parque comenzará una aventura que, aunque no nos hará rompernos la cabeza, si que hará que se rompa la monotonía y que no sea todo superar prueba tras prueba. Para avanzar en la trama, contaremos con objetos que iremos encontrando a lo largo de la partida y que nos permitirán acceder a zonas nuevas o simplemente activar algún evento necesario para avanzar.

Además, en varios momentos de la aventura tendremos que hablar con determinadas personas para que nos ayuden, algo que no será muy difícil de descubrir, ya que cada vez que ocurra algún evento nuevo, los personajes del juego nos mandarán un e-mail para indicarnos donde están, retarnos a una partida o simplemente saludar. En este sentido Bomberman Land Touch! 2 no será difícil y en cada momento sabremos qué hacer, pudiendo contarse con los dedos las veces en que debemos recorrer el mundo hasta dar con nuestro destino. De hecho, si en algún momento nos encontramos perdidos, no tendremos más que ir a una de las tres adivinas del parque y nos dará una pista de hacia dónde encaminarnos. Durante toda nuestra aventura recorreremos el parque con la pantalla táctil mientras que la cámara se sitúa sobre nosotros, dándonos una vista cenital y haciendo que no perdamos detalle.

Pero si en algo destaca el título, no es sólo por el componente aventurero que presenta y que hace la experiencia más variada, sino por el número de minijuegos distintos que contiene, que ronda los 50. Esto hace que no tengamos la sensación de repetirnos una y otra vez ya que todas las pruebas son muy diferentes entre sí, lo cual, unido a su creciente dificultad, hacen que sea una experiencia my divertida. Para acceder a uno de estos minijuegos, deberemos acercarnos una de las casetas que veremos por el mundo y hablar con el payaso que la custodia, quien nos explicará las normas básicas de la prueba. La primera vez juguemos deberemos alcanzar una puntuación determinada, acabándose la partida cuando lleguemos a ella, aunque aún nos quede tiempo.

Una vez que superemos la atracción por primera vez, recibiremos una pieza de la zona en la que estemos (que nos servirá para acceder a nuevas zonas) y nos permitirá repetir la prueba, esta vez debiendo alcanzar una puntuación mayor. En esta ocasión no dejaremos de jugar cuando alcancemos los puntos necesarios, sino que podremos agotar nuestro tiempo o los intentos que nos queden. Además, en determinados momentos de la aventura, alguno de los personajes nos retarán a pruebas que ya hemos realizado, premiándonos si conseguimos derrotarles.

Mientras recorremos el parque, la acción se desarrollara en la pantalla de abajo, quedando la de arriba reservada para ver nuestro personaje equipado con los objetos que hayamos decidido y una serie de mapas de la zona en la que estamos. Estos mapas nos mostrarán las localizaciones importantes, como casetas o personajes, y nos indicarán la salida de cada una de las pantallas. La verdad es que esto es muy útil, ya que nos sirve para localizarnos inmediatamente y no perdernos en ningún momento. Además de ver a nuestro personaje desplazarse, la pantalla de abajo presentará una serie de iconos que nos permitirán acceder rápidamente a ciertas partes del menú, como los correos que hemos recibido, los objetos o guardar la partida.

Atracciones buenas y variadas.
Los distintos minijuegos que presenta el juego son divertidos en su mayoría, y hacen uso de las capacidades de la consola, especialmente de la pantalla táctil. Además, muchos de ellos usarán las dos pantallas, por ejemplo mostrándonos globos en la de arriba que deberemos reventar lanzando a nuestro personaje con un tirachinas. Un detalle que nos ha gustado es que la curva de dificultad está bastante ajustada, y aunque puede que nos atasquemos en algún minijuego, por lo general la dificultad no es demasiado elevada e incluso si nos atascamos, el juego nos dará la opción de bajar la puntuación requerida a cambio de fichas. Es cierto que podemos repetir las atracciones siempre que queramos para conseguir mejores puntuaciones, pero superadas las dos primeras veces, realmente no tiene demasiados alicientes.

Aparte del modo aventura, el juego nos presenta el modo diversión y el modo batalla. En el primero podremos jugar a todas las atracciones que hayamos desbloqueado en el modo principal, pudiendo incluso competir contra hasta otros tres amigos en modo local. Esto podremos hacerlo aunque contemos con tan sólo una tarjeta de juego, aunque hemos de advertir que antes del inicio de cada minijuego deberemos esperar cerca de un minuto hasta que se cargue. Aún así es una opción muy divertida que nos permitirá poner a prueba las habilidades que hemos desarrollado durante nuestra aventura mientras echamos unas risas con nuestros amigos.

El modo batalla nos presentará el multijugador clásico de la saga Bomberman, permitiendo competir de modo local a hasta ocho jugadores incluso con una única tarjeta. En este modo, se pueden configurar prácticamente todos los parámetros, como mapa, modo de juego, si queremos que la posición de inicio sea fija o aleatoria, etc. Además de contra otros rivales, podremos jugar nosotros solos con hasta ocho personajes controlados por la máquina. Pero aparte de la conexión local, también podremos jugar online en partidas regionales o mundiales o, si lo preferimos, con algún conocido gracias a los códigos amigo. En este caso, la selección de mapa es aleatoria, estando asociado a cada mapa una configuración determinada. Tras cada combate y según como lo hayamos hecho, se nos dará una puntuación que nos permitirá ir escalando posiciones en el ranking. Lamentablemente, debemos comentar que es muy difícil jugar contra alguien, ya que hay muy pocos jugadores conectados, por lo que si alguien está interesado en el juego por este modo en especial, quizás debería pensárselo mejor.

Gráficamente el juego no es impresionante, pero cumple con creces con unos gráficos alegres y cuidados. El juego conserva la estética desenfadada y simple de los bomberman de toda la vida, lo que, unido al parque de atracciones donde se desarrolla el juego, hace que sea agradable a la vista. Quizás se echan en falta unas animaciones más cuidadas o una evolución mayor respecto a la entrega anterior, ya que apenas hay novedades, aunque la verdad es que para el tipo de juego al que nos enfrentamos los gráficos son más que correctos.

Las melodías que nos encontramos son alegres y desenfadadas, teniendo cada zona del parque la suya propia. Aunque no son nada especial, encajan muy bien con el juego y son agradables de escuchar, siendo algunos temas pegadizos y fácilmente memorables.

Un detalle que nos hizo gracia cuando lo vimos en el juego, pero que sin duda es para darle un tirón de orejas a Rising Star por la localización del juego al castellano es el hecho de que hayan traducido la palabra bomberman por bombero. Es cierto que puede ser algo difícil encontrar una traducción adecuada para este nombre, pero creemos que hubiera sido mucho mejor dejarlo en inglés (que además, se entiende perfectamente) antes que hacer esa chapuza de traducción que sólo consigue despistar a los que no conocen la saga y molestar a los aficionados. Por lo demás, la localización es bastante aceptable, aunque choca que hayan traducido los nombres de los personajes de una forma tan literal como Negro Guay o Azul Crío>/i>, aunque esto no deja de ser un detalle sin importancia en comparación con lo del bombero.