Existen videojuegos que enamoran a primera vista y existen también los que nos dejan con la cara desencajada, hasta saber que nos ofrecen. Dragon's Lair es un videojuego quizás difícil de clasificar, ya que la primera impresión era un festival visual del que vemos los controles apenas unas décimas de segundo.
Todo este desconcierto inicial responde al año en el que nos encontramos, nada más y nada menos que en 1983, y en ese año, ver una película de animación en la que nosotros tomábamos el control era algo bastante novedoso. De hecho, mucho antes que Shenmue, Road Avenger y sus quick time events, en el año 1983 ya se había probado esta idea en Laserdisc, el primer sistema óptico comercial, que murió por su ambición y sus propias limitaciones en los años ochenta.
En aquel año, se lanzaba al mundo Super Mario Bros, y juegos como Maniac Miner, clásicos atemporales de los que podemos recordar sus gráficos, y compararlos con una película de animación en la que podíamos ser los protagonistas.
Playboy, Disney y Donald
El juego fue "dibujado" en su totalidad por el animador Don Bluth (el diminutivo Don, viene de su nombre completo: Donald) que cómo no, trabajo en Walt Disney para fundar después su propio estudio: Don Bluth Studios. Logró reconocimiento (después de haber trabajado en 1959 en la película La Bella Durmiente), ya que su experiencia como "dibujante Disney" sirvió para la película interactiva Dragon's Lair.
La anécdota cuenta cómo el dibujante necesitaba una "musa" para dar vida a la princesa en apuros que nuestro amigo Dirk debe rescatar. Don Bluth, ya en su propia compañía, no dudó en acudir a la famosa revista Playboy para encontrar una princesa para su juego. Sin disponer del dato de cuánto duró su selección para crear a la princesa, podemos decir que la querida Daphne quedó en nuestras retinas ya que el dibujante mezcló un estilo Disney con ropa escasa para tratarse de una princesa, con aroma Disney.
Además de esto, su voz deliberadamente sensual explicará los porqués de los problemas en los que se mete nuestro caballero Dirk. Dejando a un lado el posible aspecto polémico de la princesa -de rotundas formas con escasa ropa, y en una sala llena de jóvenes efervescentes- podemos decir que de la misma manera que hoy de debate si es ético o no usar como reclamos este tipo de cosas, podemos decir que antiguamente estos aspectos también supusieron cambios de portadas en algunos juegos de la época, pero Dragon's Lair era un juego con un cuidado envoltorio repleto de humor.
¿Videojuego o película interactiva?
Aquí es donde muchos terminaron por catalogar a este título como una película interactiva, y no estaban faltos de razones, puesto que el sistema de juego se reducía a contemplar las escenas animadas, y en un momento determinado, cuando debamos tomar una decisión, pulsar un botón o una dirección, para superar un peligro o resolver una situación. Es cierto que este sistema de quick time events redujo en gran parte la euforia al ponernos a los mandos, puesto que las acciones y decisiones a tomar, sólo duran unos segundos, y además de esto, se vuelven repetitivas, pero en el año 1983 se perdonaba este sistema algo aburrido ante el gran despliegue visual y sus hilarantes situaciones.
Muchos de nosotros, que crecimos con libros en los que podíamos tomar nuestras propias decisiones y cambiar la historia, veíamos con emoción este videojuego, ya que el planteamiento era similar, pero multiplicado por mil, ya que estábamos dentro de una película de animación. El trabajo de Don se multiplicó, puesto que había que dibujar, tan sólo por poner un ejemplo, decenas de muertes diferentes.
Numerosos peligros nos estarán esperando en cada rincón, hasta llegar al gran dragón y salvar a la princesa Daphne, por lo que la historia no destaca por su originalidad, pero sí lo hace su despliegue visual y sonoro, un hito para la época. El juego contó con un presupuesto de un millón de dólares y tardó siete meses en ser gestado, y aparte de la mencionada imposibilidad de contratar modelos y optar por buscar en la famosa revista, en el genial aspecto sonoro hay una pequeña anécdota. La sensual (e irritante) voz de Daphne fue interpretada por la gran Vera Lanpher, jefa del departamento de limpieza, demostrando así que a veces, gente con vidas modestas tienen grandes cosas que mostrar al mundo.
El juego fue lanzado en diferentes sistemas, pero no fue hasta años después, rozando los noventa, y portándose en su mayoría a sistemas que casi diez años después, lo hacían en formato físico como Mega CD, PC, DVD, HD DVD, Blu-ray, también están las versiones de descarga digital en consolas y sistemas móviles, sin olvidar la versión de Game Boy.
El juego contó con varias secuelas de las cuales, merecen un capítulo aparte. Para algunos de los que lo probaron: ¿os parece un videojuego o una película interactiva? ¿Cómo lo vivisteis vosotros? Dragon's Lair salió hace 30 años para un sistema adelantado a su tiempo que fue sepultado por sus pocas opciones jugables, ¿cómo lo recuerdas?