Mediados de los años 80. Fido Dido, el espigado personaje de la marca 7 Up da paso a un pequeño punto rojo como la mascota de la bebida y protagoniza una larga campaña comercial por EEUU que lo catapulta a la fama.
Cierto que en los demás países también se usa a la mascota, pero sobre todo en el nuevo continente, Cool Spot tiene una gran presencia en los anuncios de televisión.
En los noventa ya todos conocen a Cool Spot. Ese pequeño punto rojo que hace travesuras cuando nadie los ve. Como muchos otros personajes asociados a una marca, Cool Spot da el salto de los comercios a nuestras consolas. Pero no lo hace solo, lo hace de la mano de David Perry.
¿David Perry? Me suena, ¡sí!
Si solo te suena el nombre, puede ser por dos razones: porque lleves poco tiempo disfrutando del mundo de los videojuegos, o porque en aquellos años olvidaste el legado de grandes juegos que dejó.
Pero no es ningún delito, ya que este productor de videojuegos bastante afamado, tenía sus fans y detractores, ya que a pesar de estar involucrado en muchos juegos con licencia y grandes juegos propios, muchos le recuerdan por sus sonoros fracasos como fueron por ejemplo el polémico Mesiah o Enter the Matrix, juegos que si bien no fueron desastrosos, no estuvieron a las expectativas que todos los fans esperábamos de un trabajo de David Perry.
Pero también estuvo detrás de grandes juegos, como fue Aladdin de Mega Drive, Earthworm Jim o MDK, juegos sobresalientes, y para muchos, entre los mejores de cada generación.
Y después de todo esto, David Perry desapareció. No desapareció literalmente claro, pero si lo hizo su figura en primera plana en los videojuegos. Figura que en los años 90, como dijimos se hizo bastante presente ya que aparecía en los medios casi como una estrella de rock, algo que muchos ni perdonaron ni entendieron.
Pero esa es otra historia. Hoy estamos aquí reunidos, para unir en mat... para hablar de Cool Spot, la simpática mascota de 7 Up en los noventa y que David Perry -experto en conseguir financiar un juego con una licencia famosa de por medio- nos regaló en un caluroso verano de 1993 (¿publicidad subliminal?) al personaje que acompañaba a la bebida, haciendo surf sobre ella:
Una curiosidad es que en la introducción, en los territorios PAL y UK, se eliminó la etiqueta de 7 Up de la botella, ya que Fido Dido estaba considerada por estos lares la mascota oficial desde los años ochenta, y por razones de mercadotecnia y para no herir sensibilidades, se eliminó cualquier rastro de la marca y Cool Spot hacía surf sobre una botella normal de soda.
Entrando ya a hablar de el juego en sí, podemos decir que fue un plataformas clásico, para un solo jugador, sencillo y directo. Un botón para saltar y otro para lanzar el ataque a los enemigos. Pero llevaba el "sello Perry" en el aspecto gráfico y sonoro, ya que al bueno de David le gustaban los juegos en los que los personajes tuvieran animaciones bastante fluidas y dotó al pequeño punto rojo de unas animaciones realmente asombrosas.
Pero el apartado musical no se quedó atrás, ya que el compositor y músico Tommy Tallarico (además de amigo de David, que acompaño en bastantes trabajos suyos) fue el encargado de crear melodías animadas y pegadizas, de aquellas en las que la música se te pegaba a la piel y que quizás hoy muchos vuelvan a recordar. Pero mejor veamos algunos ejemplos de sus samples:
¿Tenías alguna favorita? El juego tenía músicas de varios estilos y aunque algunas eran realmente excelentes, otras acompañaban simplemente, o pasaban más desapercibidas.
El juego era notable, y aunque las "principales" versiones fueron las de Super Nintendo, Mega Drive, también fue lanzado para Master System, Game Gear, Amiga, Ms Dos y Game Boy.
Estas versiones más modestas, fueron conversiones bastante buenas, sobre todo en el caso de Master System, y también en portátiles, pero con el consabido problema de la poca resolución y un scroll que dejaba poca visión en los saltos.
Cool Spoot recibió bastantes buenas notas en la época y se convirtió en un buen plataformas, en la época dorada de los plataformas, que no es poca cosa. Pero este primer juego permitió a David Perry continuar con la pequeña aventura de nuestro punto rojo en busca de sus amigos enjaulados.
La semana que viene veremos todos los juegos en los que este pequeño personaje aparece. Algunos realmente infumables, y una buena secuela en la que nuestro punto rojo, se marcha a Hollywood. ¿Recibieron estos juegos el mismo aplauso que el primer Cool Spot?
La semana que viene veremos si fue así, porque hoy recordamos a la pequeña estrella de forma redonda que disfrutamos en los noventa.