Poco a poco y aunque sea a través de una suscripción, Nintendo va aumentando el número de consolas clásicas a las que podemos acceder en Switch. Tras NES y SNES, por fin ha llegado la hora de volver a jugar a algunas de las joyas del catálogo que nos dejó Nintendo 64 en su día gracias al Paquete de Expansión de Nintendo Switch Online, la nueva modalidad premium de este servicio. Además y de manera inesperada, también tenemos que sumar a Mega Drive a esta lista, la icónica consola de 16 bits de Sega que regresa una vez para deleitarnos con sus juegazos.
Considerando el desembolso extra que se nos pide para acceder a estas dos nuevas aplicaciones (así como a la nueva expansión de Animal Crossing: New Horizons, también incluida en esta nueva suscripción), probablemente muchos os estéis preguntando si merece realmente la pena pasar por caja y si el servicio que ofrecen está a la altura, una decisión con la que hoy os intentaremos ayudar ofreciéndoos nuestras impresiones tras varias horas rememorando viejos tiempos en la popular híbrida.
El regreso a los 64 bits
Así pues, vamos a empezar hablando del que es, sin duda alguna, el mayor reclamo de este Paquete de Expansión: sus juegos de Nintendo 64, cuya lista de títulos disponibles actualmente podéis comprobar justo a continuación.
- Dr. Mario 64
- Lylat Wars
- Mario Kart 64
- Mario Tennis
- Operation WinBack
- Sin & Punishment
- Super Mario 64
- The Legend of Zelda: Ocarina of Time
- Yoshi's Story
Como veis, ahora mismo el catálogo no es muy extenso, aunque incluye algunos de los imprescindibles de la consola y Nintendo ha prometido que irán llegando más juegos con el paso de los meses, como Banjo-Kazooie, The Legend of Zelda: Majora’s Mask o F-Zero X. Lamentablemente desconocemos el ritmo al que se irán lanzando, así que solo nos queda confiar en que este sea más regular y frecuente que el que hemos experimentando con NES y SNES.
Centrándonos en la aplicación como tal, lo primero que nos ha llamado la atención es lo similar que es a las de las otras consolas virtuales incluidas en Nintendo Switch Online, lo que trae consigo algunas cosas que nos han gustado mucho, como la velocidad tan alta a la que podemos cambiar entre un juego y otro, una acción que no nos debería llevar ni cinco segundos y que aligera mucho las cosas.
Por su parte, las opciones que ofrecen nos han parecido muy escasas, ya que únicamente podremos activar y desactivar la vibración y escoger entre versiones americanas y europeas, así que no esperéis filtros de ningún tipo con los que ajustar la imagen a vuestros gustos y preferencias, algo que hemos echado de menos. Otro aspecto que merece un buen tirón de orejas radica en el hecho de que no exista compatibilidad con el Controller Pack, la tarjeta de memoria que usaba Nintendo 64 para algunos juegos, obligándonos así a tener que tirar de la función de archivos de guardado de la aplicación (los save states de toda la vida) para mantener nuestros progresos en títulos como Operation WinBack o conservar nuestros fantasmas en Mario Kart 64.
Aquí también nos toca señalar que, por algún motivo, no se ha incluido una opción que nos permita personalizar los controles a nuestro gusto y aunque no hemos tenido mayores problemas para habituarnos a su configuración por defecto, se trata de una ausencia notoria y que debería llegar con un parche lo más pronto posible
Volviendo a lo positivo, comentar que podremos jugar de manera online hasta con tres amigos más a todos los títulos que incluyan funciones multijugador, algo que se agradece muchísimo y que por las pruebas que hemos hecho en Vandal entre redactores funciona realmente bien incluso por WiFi si todos los usuarios tienen una conexión medianamente decente, lo que nos ha permitido disfrutar de buenos piques a títulos que requieren tanta precisión como Mario Tennis sin sufrir problemas de lag, cortes o tirones de ningún tipo durante largas sesiones.
Centrándonos ya en lo que es la emulación de los juegos como tal, probablemente lo más destacable sea el hecho de que ahora la resolución de todos los títulos se ha aumentado hasta los 720p tanto en portátil como en sobremesa, un incremento más que considerable respecto a sus versiones originales que consigue que todo se vea mucho más nítido, claro y definido.
Por norma general, la mayoría funcionan de manera notable y sin grandes problemas, aunque no se libra de pequeños defectos en el filtrado de texturas y en algún que otro efecto de postprocesado, impidiendo así que la emulación sea todo lo buena que cabría esperar. En la mayoría de casos no hemos notado nada demasiado grave y todo funciona de manera más o menos correcta, aunque hay dos títulos en concreto que merecen una mención especial.
El primero de ellos es The Legend of Zelda: Ocarina of Time, uno de los mejores y más influyentes juegos de la historia y, sin duda alguna, el más problemático del servicio. ¿Por qué? Porque sufre un buen puñado de problemas que empeoran la experiencia tanto visual como jugable. De entrada nos encontramos con que hay efectos que se han perdido, las sombras no siempre funcionan como deberían, adolece de algunos tirones en su rendimiento, la iluminación es peor y los efectos de niebla y reflejos están directamente rotos, lo que arruina el ambiente y la dirección de arte de algunos lugares y secuencias. Además, hay algo más de input lag, aunque, sinceramente, apenas se nota (a fin de cuentas, os recordamos que funciona a 20 fps y que no requiere demasiada precisión).
A pesar de todo, el título se puede jugar y disfrutar perfectamente y sin demasiados inconvenientes, aunque no deja de resultar un tanto decepcionante que, tras tantos años y con varios relanzamientos a sus espaldas, lo que nos haya acabado llegando sea una versión inferior del mismo, por mucho que la resolución sea más alta. Si Nintendo lanzará un parche o no para corregir estos errores es algo que desconocemos, pero ahora mismo solo cabe cruzar los dedos para que así sea y que este caso no se vuelva a repetir con juego venideros.
Por otra parte, tenemos a Super Mario 64, un juego del que ya pudimos disfrutar en Switch gracias a su inclusión en Super Mario 3D All-Stars. Sin embargo y al contrario de lo que muchos podrían creer, aquella versión es distinta de la de Nintendo Switch Online. Mientras que para el recopilatorio del fontanero se retocaron elementos visuales y texturas para que lucieran mejor y con una pixelación menor, aquí lo que tenemos es la versión original de Nintendo 64 en su estado más puro.
Si bien esto equivale a que hay cosas que se ven un poco peor y que los píxeles son más visibles, también hay que agradecer que el audio tenga mucha más calidad en comparación a la extraña y decepcionante compresión que sufrió en la remasterización. Es más, también regresan todos esos bugs que tanto entusiasmaron a la comunidad de speedrunners en su día, quienes ahora podrán seguir replicándolos. Curiosamente, la edición Shindou del juego (compatible con vibración y exclusiva de Japón) no está disponible en la suscripción de los mercados occidentales, pero sí en la japonesa.
Si hacemos balance, lo cierto es que ahora mismo el catálogo disponible se nos hace un tanto escaso y sus mejores juegos es probable que los tengáis ya muy trillados, como Super Mario 64, Ocarina of Time, Star Fox 64 o Mario Kart 64, pero si este no es vuestro caso, aquí encontraréis una buena oportunidad para descubrir por qué son tan aclamados. Eso sí, tenemos que reconocer que nos ha alegrado que se hayan acordado de un juego como Operation WinBack, un título no muy conocido por el gran público que quizá no ha aguantado el paso del tiempo demasiado bien y que ya en su día tuvo una recepción un tanto tibia, pero que tiene una importancia capital para la industria por ser el que puso las bases del sistema de coberturas en los juegos de acción en tercera persona que años más tarde pulirían y popularizarían obras como Gears of War. Una pequeña rareza inesperada que aporta frescor a la lista y que merece la pena probar a poco que tengas interés por la historia del medio y su evolución.
Por último, no podemos olvidarnos de recordaros que las versiones europeas de los títulos que la incluyen solo se pueden jugar a 50 hz, por lo que rinden y se mueven mucho peor que las americanas con sus 60 hz. En esta primera tanda la decisión entre escoger una u otra es fácil, pues ningún juego cuenta con traducción al español, pero cuando lleguen los que sí están en nuestro idioma, como Paper Mario, no nos quedará otra que tener que elegir entre jugar en inglés a 60 hz o a 50 hz con textos en la lengua de Cervantes. Una pena.
Mega Drive: La inesperada colaboración entre Sega y Nintendo
En lo que respecta a Mega Drive, la lista inicial de juegos es la siguiente.
- Castlevania: Bloodlines
- Contra: Hard Corps
- Dr. Robotnik’s Mean Bean Machine
- Ecco the Dolphin
- Golden Axe
- Gunstar Heroes
- M.U.S.H.A.
- Phantasy Star IV
- Ristar
- Shining Force
- Shinobi III: Return of the Ninja Master
- Strider
- Sonic the Hedgehog 2
- Streets of Rage 2
Como veis, auténticos clasicazos que en la mayoría de casos se han reeditado en infinidad de recopilatorios y que probablemente ya tengáis, pero algunas rarezas como M.U.S.H.A. (un frenético shmup vertical) consiguen darle algo de sabor a la selección. Además, nunca sobra una buena partida a Sonic the Hedgehog 2 (sorprendente que no esté el primero) o a Castlevania: Bloodlines, por no hablar del auténtico vicio que nos hemos vuelto a pillar jugando online a Golden Axe o Streets of Rage 2.
Sí, hemos dicho jugando online porque al igual que ocurre con Nintendo, Super Nintendo y Nintendo 64, la aplicación de Mega Drive de Nintendo Switch Online también añade funciones de juego en red y, nuevamente, nuestra experiencia jugando a través de internet con nuestros amigos ha vuelto a ser muy satisfactoria. Una vez más, tenemos que lamentar la ausencia de una opción para configurar los controles, pero al menos esta vez sí que tenemos la posibilidad de añadir un filtro CRT que sin ser el mejor que hayamos visto nunca, está muy apañado y cumple bastante bien su función. Por lo demás, no hay mucho que decir más allá de que todos los juegos funcionan realmente bien y no nos han dado ni un solo problema de emulación, convirtiéndose así en una opción más y muy válida para disfrutar de muchas de estas maravillas de 16 bits.
Conclusiones
Si os somos sinceros, tenemos que admitir que nos lo hemos vuelto a pasar realmente bien rejugando y redescubriendo los catálogos de dos consolas tan queridas como son Nintendo 64 y Mega Drive. En líneas generales, todos los títulos disponibles siguen siendo muy disfrutables y la posibilidad de poder jugarlos en cualquier parte que ofrece la híbrida tiene un atractivo muy suculento, por no hablar de sus nuevas funciones online para rememorar aquellas tardes jugando en compañía de nuestros amigos. Ahora bien, no podemos negar que sufre algunas carencias que se deberían solucionar cuanto antes, como la incompatibilidad con Controller Pack o la imposibilidad de configurar controles. Evidentemente, tampoco estaría de más que se solucionaran algunos de los problemas de emulación que sufre la aplicación de Nintendo 64 (y en concreto, todos los errores gráficos que plagan a Ocarina of Time) y el listado de juegos necesita crecer a buen ritmo, ya que la selección actual es buena, pero escasa e insuficiente, algo aplicable a ambas consolas.
Lógicamente, la decisión de pagar o no el extra que nos piden para acceder a estos servicios es algo que dependerá de cada uno, pero si realmente tienes interés en jugar a estos títulos, ya sea por revivir tiempos pasados o para descubrir esas joyas que por algún motivo te perdiste hasta ahora, aquí encontrarás una opción decente y perfectamente disfrutable para sumergirte en el legado de estas dos consolas tan legendarias.
Hemos realizado este artículo gracias a un código de suscripción que nos ha facilitado Nintendo.