Para muchos, la actitud fuera de cámaras de Wesley Snipes no solo se cargó su carrera, también hizo que películas como Blade Trinity fracasaran de forma estrepitosa en las salas cuando se estrenó. La trilogía de los vampiros de Marvel, una de las más exitosas de principios de los 2000, consiguió que Snipes fuese una estrella querida entre el público y que la saga se consolidase como una de las más prometedoras de cara al futuro. Pero nada dura para siempre, y Trinity supuso el final. La cinta fue mal recibida por la crítica, se corrieron rumores sobre el rodaje, y todas las declaraciones siempre tenían a un culpable: Wesley Snipes. Hoy, a través de Collider, conocemos que el actor poco o nada tuvo que ver con el hundimiento del film.
Un rodaje convulso en el que Snipes fue el menor de los problemas
Hay leyendas urbanas y verdades que se asientan como indiscutibles en el imaginario colectivo. Algo así ocurrió con la tercera entrega de Blade. "Wesley Snipes se comportó como un verdadero bicho raro en el set de Blade: Trinity" fue algo que se escuchó, leyó y se presentó como algo que efectivamente ocurrió mientras se filmaba la película, y que fue el principio del fin de la renacida carrera profesional del actor. Su vuelta al cine de taquillazos con el cazador de vampiros de los tebeos le supuso un soplo de aire de fresco tras años muy malos, pero pronto el sueño se desvaneció.
¿El culpable? Según la prensa, mayormente él mismo. "¡Trabajar con Snipes fue una pesadilla! ¡Se negó a venir al set! ¡Intentó estrangular a su director!", se repetía una y otra vez. Pero el actor se ha cansado de todas esas historias, en su mayoría inventadas, que se han convertido en indiscutibles en determinados círculos cinematográficos. En una entrevista concedida a The Guardian, el actor pone los puntos sobre las íes sin tapujos.
El actor está, poco a poco, retomando su carrera. Ha trabajado con Eddie Murphy en Dolemite Is My Name y Coming 2 America, y ha afirmado que sus años malos, en los que fue acusado de evasión de impuestos y demás fraudes fiscales, han quedado atrás. Pero tiene la espina clavada con Blade: Trinity, una cinta que según él no salió bien y que fue injustamente criticada por comentarios racistas. Según afirma, la principal fuente de las acusaciones y de la sombra alargada de la leyenda negra existente alrededor del film, proviene de una entrevista de AV Club con Patton Oswalt, quien interpreta a Hedges en Blade: Trinity. "Claro, un tipo de la comedia, una autoridad absoluta para hablar de mi", comenta de forma sarcástica en la entrevista. Según relataba Oswalt, Snipes intentó estrangular a su director, David S. Goyer, durante la producción. Y no fue lo único, pues el mismo actor confirmó en su día a la prensa que el protagonista de la trilogía de acción se comportó como un auténtico capullo, negando la palabra a sus compañeros y pasando de todo durante la filmación. La historia se ha adornado y cambiado a lo largo de los años, y tenemos declaraciones y artículos que hablan de alcoholismo y constantes cambios en el guion que llevaron, como una tormenta perfecta de múltiples ingredientes y frentes, a destruir el film en su forma final.
"Déjame decirte una cosa. Si hubiera intentado estrangular a David Goyer, probablemente no me estarías hablando aquí y ahora. Un negro con músculos estrangulando al director de una película va a ir a la cárcel, te lo garantizo", comenta Snipes al medio británico. "Además, es absurdo. Les recuerdo que fui uno de los productores ejecutivos del proyecto. Tuve en mis manos la aprobación del director por contrato. No era solo el actor contratado. Tenía autoridad para decir, dictar, decidir. Este fue un concepto difícil de entender para mucha gente", afirma el actor y productor del film, que cree que muchos vieron con malos ojos que una persona de color tuviese tanto poder en el set.
"Esto es parte de los desafíos que nosotros, como afroamericanos, enfrentamos aquí en Estados Unidos: estas microagresiones. ¡La presunción de que un hombre blanco puede hacer una declaración y esa declaración es la verdadera!", argumenta. Según él, Oswalt dijo algo a la prensa, y de forma automática, todo se dio por válido sin rechistar ni contrastar. Las otras versiones, desmentidos y contradeclaraciones no tuvieron el mismo efecto, y eso, de una forma u otra, condenó a la película. "¿Por qué la gente cree que su versión es verdadera? Porque están predispuestos a creer que el negro siempre es el problema. Y todo lo que se necesita es una persona, en este caso el Sr. Oswalt, a quien realmente no conozco en persona lo suficiente. Apenas puedo recordarlo en el set, pero es fascinante que su declaración por sí sola fue suficiente para hacer que la gente diga: 'Sí, Snipes tiene un problema'", concluía.
Blade quedó enterrada como franquicia o saga después de este descalabro en la taquilla. Sin embargo, Marvel volverá a intentarlo con una nueva versión que contará con Mahershala Ali en el papel del cazador de vampiros que camina a la luz del día.