Lo hemos visto con Red One de Amazon y Dwayne Johnson y parece que ahora lo hemos vuelto a ver con este filme de Kevin Costner, que está inmerso en el proceso de desarrollo de Horizon. El actor, hace unos años, en plena fiebre de Yellowstone protagonizó un desconocido filme en clave de western junto a Diane Lane y bajo la dirección de Thomas Bezucha, Uno de nosotros (Let Him Go) que tuvo la mala fortuna de coincidir con la irrupción de la pandemia de coronavirus y que, desgraciadamente para el actor y sus creadores, no tuvo suerte en taquilla pese a las buenas críticas. Ahora ha encontrado una nueva vida en Netflix.
De fracaso histórico a éxito inesperado en Netflix: Kevin Costner protagoniza este neo western que es una de las películas más interesantes del streaming ahora mismo
Fue un fracaso de taquilla. Con un presupuesto de 21 millones de dólares, apenas recaudó 11 millones a nivel mundial, mientras que en España logró reunir a poco más de 42.000 espectadores, generando unos escasos 258.000 euros. Cayó en el olvido rápidamente y fueron muy pocos los que pudieron disfrutarla en cines. Pero en lo que está claro que es una segunda oportunidad, parece que el destino de este largometraje ha cambiado gracias a su incorporación al catálogo de Netflix en España, donde ha encontrado una nueva y merecida audiencia.
Uno de nosotros comienza como un drama íntimo, centrado en el viaje de un matrimonio, George (Kevin Costner) y Margaret Blackledge (Diane Lane), que intentan recuperar a su nieto de una familia que ejerce un control opresivo sobre él. La película se cuece a fuego lento, alternando momentos de calma y tensión contenida, para luego explotar en un último acto cargado de emociones y violencia. Es un relato de venganza que combina la intensidad emocional del drama familiar con la amenaza constante del thriller, logrando una experiencia profundamente inmersiva, pocas veces vista en el género, muy abonado a lo efectista y lo reiterativo en los últimos tiempos.
El guion, basado en la novela homónima de Larry Watson, encuentra su fuerza motriz en la construcción de personajes tridimensionales, cuyo desarrollo emocional resulta tan relevante como los peligros físicos que enfrentan. Los protagonistas dan la sensación de ser realistas, profundos y realmente complejos, llenos de dobleces. Costner y Lane brillan en sus interpretaciones, transmitiendo con autenticidad la angustia, la determinación y el amor de unos abuelos que están dispuestos a todo por su nieto.
Sí, es un thriller, pero también es un western, y eso se nota en cada tramo de la película y en los numerosos paisajes y personajes que pueblan la historia. La historia nos recordará, irremediablemente, a Centauros del desierto (1956), el emblemático filme de John Ford -una de las mejores películas de la historia del cine-, tanto en su estructura narrativa como en sus temáticas de redención y familia. Pero como las comparaciones son odiosas, la verdad es que Bezucha, le ofrece una perspectiva más intimista y realista, tangible en las distancia cortas -en esto ayuda Costner, un auténtico experto en estas lindes- dejando de lado los grandes paisajes épicos para centrarse en los espacios cerrados -como cocinas, aparcamientos y porches- y las tensiones personales.
Si consideramos a Yellowstone una joya redonda del género en el ámbito televisivo, Uno de nosotros es aún mejor. La cinta supera en muchos aspectos a la famosa serie de Taylor Sheridan, al optar por una narrativa más concentrada -ventajas del lenguaje cinematográfico y del concepto de largometraje en tiempos de dilatadas extensiones-. Lo que faltaba a Uno de nosotros era una plataforma que le diera visibilidad, y Netflix ha sabido brindarle esa segunda oportunidad que tanto merecía.