Una salida familiar al cine terminó en pesadilla para dos niños de cuatro y cinco años en Enfield, al norte de Londres, cuando el tráiler de M3GAN 2.0, la secuela de terror de Blumhouse, se proyectó accidentalmente antes de Lilo y Stitch, la nueva versión en imagen real del clásico de Disney.
La familia, que había acudido al Cineworld con la intención de disfrutar de una tarde tranquila, denunció el “impacto emocional” que el contenido violento tuvo en los pequeños.
Un tráiler perturbador y sangriento
La confusión comenzó en cuanto se apagaron las luces y aparecieron en pantalla escenas explícitas, gritos angustiosos, salpicaduras de sangre y expresiones agresivas como “zrra contra zrra”, según relataron los padres al medio BBC. Lejos de la simpática historia de una niña hawaiana y un alienígena azul, lo que vieron fue a la muñeca M3GAN atacando con espadas y bañada en sangre. “Fue como estar atrapada en una pesadilla”, declaró la madre, aún visiblemente afectada por el suceso.
El padre, por su parte, aseguró que el tráiler “se puso muy gráfico enseguida”, y que sus hijos “ni siquiera sabían que existía ese tipo de violencia”. Ambos señalaron que los menores quedaron tan paralizados que no pudieron quedarse a ver la película para la que realmente habían comprado las entradas. El error técnico por parte del personal del cine, que se disculpó más tarde, no logró calmar del todo el malestar generado.
Este tipo de incidentes no es nuevo. Hace algunos años, un tráiler de El Hijo —un thriller de terror psicológico— fue proyectado por error antes de una función de Peppa Pig, provocando una reacción similar entre el público infantil. La reiteración de este tipo de fallos técnicos plantea dudas sobre los protocolos de seguridad y revisión en las salas de cine, especialmente en sesiones dirigidas a niños.
